En su último día como alcalde de Tijuana, Arturo González Cruz pasó parte de su jornada realizando recorridos de supervisión en obras públicas que el Ayuntamiento realiza hacia el lado este de la ciudad, donde se unen las delegaciones La Mesa y Presa Este.
El jueves 11 de febrero el Cabildo aprobó la segunda licencia que solicitó el munícipe, para separarse de su cargo, aunque en esta ocasión es por un periodo indefinido y según su versión oficial, para atender asuntos personales que surgieron tras el fallecimiento de su padre.
El primer recorrido fue en los avances de la pavimentación del tramo conocido como “camino viejo a Tecate”, del cual informó fue obra financiada por el programa Ramo 22 y podría beneficiar a más de 20 mil ciudadanos.
“Fue el compromiso que yo hice, que mientras estuviera yo como presidente municipal de Tijuana iba a salir a las colonias, a las delegaciones, iba a salir directamente a atender a los ciudadanos”, expresó González Cruz ante los medios que acudieron a su recorrido.
Destacó que durante su gestión cambió la forma de hacer gobierno, al salir tanto él como los integrantes de su gabinete de los escritorios para atender las solicitudes de la ciudadanía.
Afirmó desconocer si habrá más salidas de funcionarios que llegaron con él al XXIII Ayuntamiento, aunque reconoció estar enterado de lo que se ha mencionado en redes sociales y medios de comunicación de posibles renuncias que se estarían presentando algunos en los siguientes días.
Posterior realizó recorridos de supervisión de obra en la colonia Pinos de Agüero, la conexión entre el bulevar Insurgentes y La Presa, así como la construcción de un nuevo pluvial en la tercera etapa del Río Tijuana.
Su último recorrido lo realizó de la que fuera su oficina en las instalaciones de Palacio Municipal, hacia el exterior para abordar su vehículo particular, marchándose antes de que llegar Karla Ruiz Macfarland a tomar de nueva cuenta posesión del cargo de alcaldesa suplente.
Se despidió de los colaboradores que fue encontrando durante su trayecto hacia la salida, mientras lo escoltaba su equipo de seguridad, su hijo y parte del personal que lo acompañó desde la campaña hasta su gestión como alcalde.
“Que tengan mucho ánimo, Tijuana avanza, va a seguir siendo una ciudad muy dinámica, y va a seguir avanzando en todos los temas. Que tengan mucha confianza en el futuro de Tijuana. Nos vemos pronto”, fue el último mensaje que emitió antes de abandonar las instalaciones municipales.