El piloto español, Fernando Alonso salió hoy por su propio pie el hospital de Berna donde fue operado de la mandíbula el pasado viernes 12 de febrero, tras el accidente de bicicleta que sufrió un día antes cerca de su casa en Lugano en Suiza.
Se espera ahora que el asturiano pase unas semanas de recuperación, y su entorno confía en que en un mes ya esté listo para competir, por lo que podría estar en el inicio de la temporada de Fórmula 1, previsto para finales de marzo en el Gran Premio de Baréin.
El jueves 11 de febrero, Alonso chocó con la parte derecha de un automóvil que cruzaba la calle para entrar en un supermercado.
El piloto fue trasladado ese mismo día a un hospital de Berna, la capital suiza, donde se sometió a una cirugía maxilofacial para corregir la mandíbula superior, afectada en un accidente en el que Alonso también perdió varias piezas dentales.
La escudería del piloto, Alpine F1, con la que Alonso prepara su retorno a la categoría reina del automovilismo tras tres años de ausencia, comunicó el viernes que la cirugía se había llevado a cabo con éxito, y que el piloto permanecería 48 horas ingresado en observación.
Los médicos le han recomendado reposo absoluto, aunque a mediados de marzo tiene ya en agenda los entrenamientos de pretemporada en el circuito de Baréin, a los que, de poder acudir, quizá tenga que hacerlo con un casco ligeramente adaptado para que la mandíbula esté lo más estable posible durante la carrera.