Poco más de 20 familiares de internos del Centro de Reinserción Social (CERESO) de Mexicali, se manifestaron a las afueras del inmueble para exigir respuestas sobre una supuesta huelga de hambre que iniciaron hoy sábado 23 de enero.
La exigencia de los internos y de sus familiares es que mejoren las condiciones y trato dentro del penal, donde aseguran ser víctimas de trato. Infrahumano. Además, se inconformaron por inoperancia de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH).
A través de redes sociales, madres, hermanos y esposas de internos se dieron cita en el CERESO de Mexicali, ubicado en Calle Sur, donde esperaban llevar a cabo una manifestación, pero se limitaron a acudir para solicitar información sobre la huelga de hambre.
Ante los medios de comunicación, algunas mujeres compartieron experiencias como la falta de medicamento, fracturas y lesiones de internos inexplicables, enfermedades no tratadas y la falta de comunicación con sus familiares, pues desde el inicio de la pandemia se suspendieron las visitas y sólo pueden acceder a ellos por medio de llamadas telefónicas.
Rafaela, madre de un interno de El Hongo, acudió como apoyo a sus compañeros, para exigir mejor trato a los reos, pero reconoció que su hijo le ha comentado que los golpean dentro del complejo penitenciario de Tecate.
María reclamó que hace unos días acudió al Cereso para depositarle dinero a sus familiares, y en ese momento le entregaron una receta para que comprara medicamento. Sin embargo, al revisarla, descubrió que fue expedida el 27 de diciembre, es decir, casi un mes de la detección de la enfermedad.
Lo peor es que fue rechazada debido a que entregó un medicamento genérico.
Las mujeres prometieron convocar a una nueva manifestación dentro de los próximos días, con el objetivo de buscar una reunión con el director del penal.