El regreso a las actividades en los ayuntamientos de Mulegé y Comondú, se ha postergado debido a manifestaciones que estallaron desde el lunes 4 de enero por la falta de pago de salarios y bonos de fin de año a los trabajadores sindicalizados.
En el caso de Comondú, el paro de labores en áreas de Servicios Públicos inició con la toma de oficinas del ayuntamiento. Debido a la pandemia, los sindicalizados optaron por una protesta con medidas sanitarias: bloquearon con cintas amarillas las puertas de la Tesorería Municipal.
Expusieron de forma colectiva que el Sindicato y el alcalde de Comondú, Walter Valenzuela, llegaron a acuerdos en diciembre para “pagar de 10 en 10” los bonos de fin de año; sin embargo, no solo se incumplió con esto, sino que ahora también se les adeuda la segunda quincena de diciembre.
Tenía hasta el 31 de diciembre para cumplir con el acuerdo, por lo que los trabajadores decidieron estallar la huelga. Por esto motivo, el municipio quedó sin servicios públicos.
Señalaron al alcalde por la incapacidad de cumplir con el pago que les corresponde por ley a las y los trabajadores. Se estima que la deuda asciende a poco menos de 30 millones de pesos.
En el caso de Mulegé, las manifestaciones iniciaron el mismo día. No obstante, en Santa Rosalía los empleados sindicalizados del ayuntamiento decidieron avanzar con la protesta y bloquear la carretera federal desde la mañana del miércoles 6 de diciembre. El titular de la Subsecretaría de Protección Civil, Carlos Godínez León, fue quien dio a conocer este hecho.
Los sindicalizados de Mulegé reclaman lo mismo que los afectados en Comondú: la segunda quincena de diciembre, el bono navideño y parte del bono único. De acuerdo con los manifestantes, la deuda asciende a nueve millones de pesos.
Según explicaron, son más de 100 trabajadores de este ayuntamiento los que no han recibidos sus pagos. Señalaron al alcalde de Mulegé, Felipe Prado Bautista, por el incumplimiento.
Los manifestantes se fueron colocando uno a uno en la vía de comunicación, para impedir el flujo de vehículos en las entradas de Santa Rosalía.
En un inicio aseguraron que nadie entraría o saldría de la comunidad hasta que el presidente municipal cumpliera con el pago del adeudo, sin embargo, después permitieron desahogar el tráfico cada dos horas.
Las autoridades de Protección Civil alertaron sobre esta situación a los ciudadanos para que tomaran sus precauciones al circular por dicha carretera.
Hasta el cierre de esta edición, los paros continuaban en los dos municipios sin una respuesta satisfactoria de los alcaldes.