El miércoles 7 de octubre, en el Congreso del Estado, los diputados eligieron a la licenciada Cynthia Monique Estrada Burciaga como magistrada del Tribunal Superior de Justicia de Baja California, en sustitución de la notoria María Esther Rentería, quien dejará el Poder Judicial en diciembre de 2020 cuando cumpla los 70 años de edad. La cuestión no es solo que eligieron a la abogada que obtuvo la calificación más baja de los 16 que se presentaron a la convocatoria del Consejo de la Judicatura para elegir nuevo magistrado, sino que lo hicieron al margen de la ya aprobada y publicada reforma judicial que promovió el gobernador Jaime Bonilla Valdez, entre otras cosas, para desaparecer el Consejo de la Judicatura y para elegir a los nuevos magistrados a partir de una terna enviada por él al Congreso del Estado. Las prisas -dicen- de Amador Rodríguez, el secretario general y Juan Manuel Molina el diputado por agandallarse magistraturas, los llevaron a elegir a la Jueza de Control de Justicia Penal Oral en Tecate y Playas de Rosarito, quien llegó a esa posición promovida por el magistrado Armando Vásquez cuando este era presidente del Tribunal Superior de Justicia de Baja California, movido -aseguran- por complacer al Grupo Caliente que encabeza Jorge Hank Rhon. Por ello era casual que Vásquez se la pasara en palco especial cuando había partido de futbol del equipo de los Hank. Monique, la ahora magistrada, insisten en el Tribunal, es el vínculo con Hank, y ahora gracias a las labores de los de Morena para hacerse de la magistratura, en el Hipódromo ya presumen que tendrán magistrada en el Tribunal Superior de Justicia. Lo que no se sabe es si al gobernador Bonilla le metieron un gol al elegir una magistrada hankista, o de plano ya está pactando con el señor de las apuestas. ¿Será?