La Asociación de Jugadores de Beisbol de Grandes Ligas (MLBPA, por sus siglas en inglés) acordó presentarse en los campos de entrenamiento antes del 1 de julio y desarrollar una temporada de 60 juegos, pero aún discuten los protocolos de salud y seguridad con la Liga, de acuerdo a información proporcionada de ESPN.
Los propietarios de la Liga votaron el lunes 22 de junio para implementar una temporada de 60 juegos que comenzaría el 24 de julio. Después de la votación, MLB cuestionó al sindicato si los jugadores podrían presentarse en los campos de entrenamiento antes del 1 de julio, de estar de acuerdo “con la Operación Manual que contienen los protocolos de salud y seguridad necesarios para darnos la mejor oportunidad de conducir y completar nuestra temporada regular y la postemporada”.
Asimismo, el sindicato convino presentarse en los campamentos para el 1 de julio, pero aún trabaja en detalles de protocolos de salud y seguridad en medio de la pandemia por coronavirus, confirmó CBS Sports.
Después de casi tres meses de negociaciones infructuosas, MLB optó por utilizar el derecho que se le otorgó en el acuerdo de las partes del 26 de marzo para imponer un calendario de la duración deseada. Al elegir una temporada de 60 juegos, la Liga acumulará tantos juegos como sea posible hasta el 27 de septiembre, límite autoimpuesto para que termine la temporada regular.
Además, la temporada de 60 juegos podría fungir como un amortiguador contra una queja de la MLBPA que, en el caso de una posible implementación, se espera acuse a la Liga de no cumplir con su deber de completar una temporada lo más posible. También podría presentar una queja contra el sindicato.
Bajo la temporada impuesta, los jugadores recibirían la parte prorrateada completa de sus salarios, aproximadamente el 37% de sus salarios de temporada completa y alrededor de mil 500 millones en total. La postemporada se mantendría en diez equipos, en tanto que los jugadores no recibirían perdón por el adelanto salarial de 170 millones que cobraron como parte del acuerdo de marzo, ni dinero de la postemporada; como tampoco aceptarían usar micrófonos en el campo. Los equipos no usarían parches publicitarios en sus uniformes y el bateador designado universal probablemente permanecería en su lugar, ya que es parte del protocolo de salud y seguridad.