En Baja California, las maquiladoras reportan afectaciones por falta de insumos. David Pérez Tejada Padilla, administrador de la Aduana de Ensenada, dijo que el número de operaciones diarias que tenía el puerto bajó de 600 a 400. El dólar se cotiza en el nivel más alto de la historia. Calificadores anticipan un crecimiento de entre 0.7 y 0.9% en 2020. Aerolíneas estiman pérdidas superiores a 100 mil millones de dólares ante la disminución de viajeros
Es prematuro saber el impacto que tendrá el coronavirus COVID-19 en la economía mexicana, y si sus estragos serán de la misma magnitud que los causados hace una década por la influenza AH1N1, considerados como los peores en 70 años.
Sin embargo, para 2020 se prevé que el Producto Interno Bruto (PIB) no crecerá más del 1%, según las últimas revisiones a la baja del Banco de México (Banxico) y la agencia calificadora Moody´s, las cuales previeron un crecimiento de 0.9% en promedio, y de la encuesta de CitiBanamex que lo situó en 0.7%.
Especialistas consultados por ZETA no descartaron que, ante menores ingresos, la economía mexicana decrezca por segundo año consecutivo, y de nueva cuenta no se cumpla la promesa del Presidente Andrés Manuel López Obrador, de un crecimiento económico del 4% anual.
En el caldo de cultivo para la crisis que se avecina, se encuentra la turbulencia de los mercados financieros. El 12 de marzo, un día después que la Organización Mundial de Salud calificó el COVID-19 como pandemia, la Bolsa Mexicana de Valores cayó 5.28% para ubicarse en el nivel más bajo desde enero de 2012, mientras que Wall Street se desplomó 10%, su mayor caída en 32 años. Ambas bolsas suspendieron sus operaciones por la mañana ante lo que ya se anticipaba como una jornada “negra”.
Mientras que el tipo de cambio FIX registró el dólar en 22.1518 pesos, el nivel más alto en la historia del país, pese a que Banxico subastó 2 mil millones de dólares y Hacienda anunció que haría una permuta de valores gubernamentales por 40 mil millones de pesos.
Días antes, el 9 de marzo, el precio del crudo se derrumbó más de 30% ante la falta de un acuerdo entre Arabia Saudita y Rusia por el volumen de producción, y aunque en las siguientes horas se recuperó hasta los 27.40 dólares, al cierre de la jornada del jueves 12, la mezcla mexicana retrocedió 9.1% para ubicarse en 23.58 dólares por barril.
Foto: Alejandro Gutiérrez Mora.- El Dr. Ignacio Casas, docente en CETYS Universidad, durante entrevista en las instalaciones de la institución.
Al temor en los mercados, se suma el impacto que traerán las afectaciones en la cadena de suministro, ya que el gobierno de China -principal exportador del mundo- incrementó el número de días de descanso para evitar más contagios de COVID-19.
Las primeras empresas que a nivel global reportaron falta de insumos fueron Hyundai en Correa del Sur; Tesla, Ford, PSA Peugeot, Nissan y Honda en China; además de Suzuki en la India.
Actualmente, en México empresas del sector automotriz ubicadas en Chihuahua, Coahuila, y Nuevo León, han tenido paros técnicos según datos de Index Mexicali y Zona Costa. En BC, algunas compañías están previendo afectaciones por la falta de insumos sobre todo en el sector electrónico. Algunas estimaciones refieren que la pérdida para diversas industrias en México será de mil 369 millones de dólares
Al corte del jueves 12 de marzo, la Secretaría de Salud federal reportó cuatro nuevos casos de COVID-19 en el país, con lo que sumaron 16 en total, en Sinaloa, Ciudad de México, Coahuila, Chiapas, Estado de México, Puebla, Nuevo León y Querétaro.
MENORES INGRESOS REDUCIRÍAN GASTO PÚBLICO
Ante la sacudida económica a nivel global, Arturo Herrera, secretario de Hacienda, manifestó que la Secretaría de Salud federal tiene asegurado su presupuesto e incluso podrían comprar medicamentos de forma anticipada.
Además, se analizan las medidas a aplicar para proteger a la economía nacional, y dejó entrever que el gobierno echaría mano -nuevamente- del Fondo de Estabilización y Compensación (por 150 mil millones de pesos) y tomaría la línea de crédito del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Lo anterior se debe a que México no tiene “mucho dinero disponible” para hacer frente al COVID-19 ni a la caída de ingresos que tendría por la baja del precio del petróleo, comentó Ramsés Pech, asesor en economía y energía, quien sin embargo, apuntó que tomar la línea de crédito del FMI “estaría en contra de la política del Presidente, de no endeudarnos”.
A diferencia de Hacienda, el especialista consideró que la combinación del COVID-19 y la guerra comercial petrolera “ya nos pegó, porque en México la economía se está moviendo en función del presupuesto, es decir, entre el gasto de la inversión pública y no privada”.
En su opinión, la economía mexicana es susceptible a resentir más estos factores externos, dado que el año pasado decreció 0.1 por ciento, y es probable que en 2020 el PIB también tenga un crecimiento negativo dado que el gasto depende de los ingresos del gobierno por petróleo e impuestos. Según el Consejo Coordinador Empresarial, el boquete por los ingresos podría ser de hasta 1.2% del PIB.
Foto: Ramón T. Blanco Villalón.- INDEX.- Luis Manuel Hernández, Presidente zona costa
En el primer rubro, los recursos provenientes de la exportación petrolera se verán disminuidos pese a que el gobierno haya contratado coberturas para considerar el precio del barril en 49 dólares, conforme a la Ley de Ingresos 2020. No se puede saber el valor real de los datos que se contrataron, no obstante si la plataforma de exportación del país fuera de un millón 100 mil barriles (como está prevista para este año), Hacienda cubriría 605 mil barriles diarios, y Petróleos Mexicanos (Pemex), alrededor de 350 mil barriles.
Es decir, menos de lo que se estipuló destinar a la exportación, por lo que habría menos ingresos para Pemex y a su vez para Hacienda, por lo menos hasta que no se resuelva la disputa comercial entre Arabia Saudita y Rusia en junio próximo, expuso.
Por otro lado, al haber una contracción económica, las empresas venderían menos y, por tanto, habría menos captación tributaria.
“Entre menos casos tenga el país de COVID-19, mejor será el posicionamiento a nivel mundial de México sobre las inversiones que pudieran moverse de aquellos países que fueron más afectados, como Italia y Corea del Sur”, expuso Pech.
En ese sentido, el Plan Nacional de Infraestructura Energética (pospuesto por AMLO) cobra mayor trascendencia, ya que podría dar cierta certeza a las inversiones. Lo que hay que entender es que “el dinero no tiene ideologías, lo que está buscando es que se utilice y México tiene la oportunidad”.
Esa oportunidad podría vislumbrarla el propio Alfonso Romo, jefe de la oficina de la Presidencia, quien el miércoles dijo a la prensa nacional que el gabinete económico analiza un ajuste al presupuesto y una mayor agresión en las inversiones.
En Estados Unidos -anticipó Ramsés Pech- se estarían dando incentivos fiscales a las empresas que tengan pérdidas por el bajo precio del crudo, para que el recurso que no entre a las arcas lo destinen a pagar a los bancos y tengan acceso a nuevos créditos, luego que las tasas de interés han bajado.
DEPRECIACIÓN DEL PESO SIN PRECEDENTES
Luego de que este jueves el dólar alcanzara su precio máximo en la historia del país, al llegar a venderse en 22.9785 unidades según Bloomberg; Carlos Leos Martínez, presidente de los Centros Cambiarios de Tijuana, indicó que en el mercado local la moneda mexicana pasó de 18.40 el 7 de marzo, a 19.50 pesos el día 9.
Al mantenerse este tipo de cambio en promedio, el dólar en centros cambiarios se encuentra más de 2 pesos por debajo del dólar interbancario, que en la Capital del país de vendió hasta en 22.25 pesos. “Esto representa la posición más lejana de un centro cambiario con relación a la banca nacional”, afirmó.
El líder de los cambistas agregó que esto se debe a una aversión al riesgo, en el sentido que puede haber un acuerdo entre Arabia Saudita y Rusia que provocaría una reacción favorable en los mercados, así como presentarse una vacuna o una solución al COVID-19.
Consideró que esta cotización podría mantenerse por dos semanas más, pero de depreciarse el peso por más tiempo y acentuarse, se erosionarían las finanzas públicas del país.
Además de que un tipo de cambio alto tendría un efecto directo en el bolsillo de las personas, pues aumentaría la inflación. Indicador que se ha ido acelerando desde el primer mes de 2020. Apenas el 9 de marzo, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía informó que durante febrero aumentó 0.42% respecto al mes anterior, para situarse en 3.70% a tasa anual, el mayor nivel desde julio de 2019.
INDUSTRIA DE BC COMIENZA A RESENTIR EFECTOS
David Pérez Tejada Padilla, administrador de la Aduana de Ensenada, dijo que desde hace diez días las operaciones diarias que tenía el puerto, en promedio 600, se han reducido a 400, como consecuencia de los efectos económicos de la pandemia del COVID-19.
Consideró que las consecuencias se resentirán a finales de marzo y principios de abril, ya que en su opinión, será a mediados del cuarto mes cuando la mercancía china aumente su llegada al puerto.
“Tenemos entendido que el gobierno de China amplío el periodo vacacional de interrupción de actividades por el Año Nuevo, sumaron de dos a tres semanas de paro de actividades (…). A eso hay que sumarle el tiempo de traslado de mercancías, de aproximadamente dos semanas”, argumentó.
La semana pasada (del 2 al 6 de marzo), dos de los seis buques procedentes de China que tendrían que haber llegado a Ensenada no lo hicieron, lo cual significaría alrededor de 5 mil contenedores que se dejaron de mover en el puerto, estimó el funcionario federal, quien en entrevista con ZETA, dijo que en la semana que termina, no hubo cancelaciones.
La disminución de insumos chinos ha generado que empresas como Foxconn, con 5 mil 500 empleados, y Harman, hayan parado actividades en Tijuana, según versiones extraoficiales.
Respecto a ello, Luis Manuel Hernández, presidente de Index Zona Costa, aseguró que en la entidad “en sí paros técnicos no ha habido”; lo que se ha visto es que la mayoría de las empresas con problemas de insumos, están aprovechando para capacitar a su personal, otras están haciendo inventarios físicos, otras más adelantando vacaciones, y algunas darán viernes y lunes por el próximo día festivo.
En la Capital bajacaliforniana, solo dos empresas del sector automotriz han reportado que pueden experimentar afectaciones en el corto plazo; sin embargo, las compañías cuentan con planes de contingencia para obtener materia prima, por lo que muchos ya los echaron a andar, confirmó Víctor Hugo Delgado Sánchez, presidente de Index Mexicali.
Por su parte, Marcello Hinojosa Jiménez, vicepresidente de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra) Capítulo Noroeste, reconoció que varias empresas ya agotaron sus inventarios, por lo que “están teniendo afectaciones graves”. Sin embargo, no se puede tener un número preciso, ya que no todas lo externan.
Complementó que los sectores más susceptibles son el eléctrico y electrónico, puesto que en el epicentro del COVID-19 en China se produce “mucho” el cable de fibra óptica. Además, la afectación se está dando en empresas con mucha mano de obra.
Otra afectación que se está registrando es que hay empresas que se están pidiendo una ampliación de crédito de 15 a 75 días, “entonces es una cadena donde se van retrasando todos”, expuso.
La situación es más complicada para las pequeñas y medianas empresas, manifestó en entrevista el líder empresarial, y observó una oportunidad para impulsar la proveeduría local. “Hay muchos que podemos competir en precio y calidad con los productos chinos e incluso se reducirían los tiempos e inventarios”, agregó.
Francisco Rubio, presidente de la Canacintra Tijuana, expresó que habitualmente todos los años se observa una baja de importaciones chinas debido al Año Nuevo Chino, por lo que estimó, después de Semana Santa se verá realmente el impacto del coronavirus, ya que la mitad de los productos que se importan por Tijuana proviene de Asia.
PÉRDIDAS MILLONARIAS A NIVEL MUNDIAL
Ignacio Casas Fraire, profesor de CETYS Tijuana, refirió que estimaciones apuntan que la economía de China crecerá solo 3%, lo cual implica “un golpe” al crecimiento global, dado que esa economía es la segunda más grande del planeta.
El Banco Mundial ha señalado que el coronavirus ha costado 50 mil millones de dólares a la producción global, principalmente en China. Las aerolíneas también han sido afectadas, pues la gente ha dejado de viajar, por lo que estiman pérdidas por 113 mil millones de dólares para este año.
Mientras que el sector automotriz podría crecer solo 0.9%, pese a que el pronóstico anterior sin el coronavirus lo situaba por encima del 2%.
Para concluir, el académico destacó que el coronavirus ha generado más pánico al cobrar la vida de más de 4 mil 500 personas a nivel mundial en dos meses, expandiéndose a más de 90 países.
