Transportistas de los cinco municipios de Baja California, en su mayoría taxistas, se manifestaron la mañana de este lunes 23 de marzo a las afueras de las secretarías de gobierno de cada municipio, para exigir que el transporte no pase al estado y que siga en los Ayuntamientos; sin embargo, en reunión con el gobernador Jaime Bonilla, este no accedió y dijo que el transporte público pasará a manos del gobierno estatal para terminar los casos de corrupción.
“Yo estoy de acuerdo que hay intereses, es muy claro y que se sepa: la corrupción en el transporte los ha manchado a todos, y ustedes mismos deben ser los más interesados en limpiar; se han entregado hasta 900 placas ilegalmente… A ustedes les conviene que haya orden, porque es como van a tener más valor sus placas, pasó en Mexicali, en Rosarito y pasó aquí en Tijuana. Es su patrimonio y se los vamos a cuidar”, dijo el gobernador Bonilla Valdez al grupo de representantes del transporte.
Aseguró, además, a la decena de transportistas con quienes se reunió, que no es una traición el hecho que el control del transporte sea tomado por el gobierno estatal, porque lo que está haciendo es parte del plan de 100 puntos que había prometido en la campaña para gobernador; subrayando que la única intención de su gobierno es poner orden.
Fotos: Cristian Torres
Durante la junta con transportistas, estuvo presente Rafael Echegoyén, propuesto para director del Instituto de Movilidad Sustentable en el Estado, a quién se lepreguntaron cómo implementará una ruta troncal en Playas de Rosarito, cuando la ciudad sólo cuenta con un bulevar principal que conecta con la ciudad de Tijuana, además, a modo de referencia se señalaron los actos de corrupción alrededor del Sistema de Transporte Público de Tijuana (SITT).
A pesar que los transportistas mantuvieron su postura para desechar la idea de que el Estado tome el control, también criticaron el que se quiera hacer un transporte metropolitano, argumentando que no hay vialidades suficientes, y que además pondría en desventaja a los transportistas de los distintos municipios. No obstante el gobernador Jaime Bonilla, se mostró decidido a que la zona metropolitana seaun hecho a largo plazo.
Entre las manifestaciones, resaltó la nula confianza que tienen los transportistas hacia Echegoyen, a quién señalaron de declarar extraoficialmente, que iba a trabajar para disminuir el número de taxis que existen en el estado e impulsar el transporte masivo.
Foto: Cristian Torres
También mostraron su inconformidad ante el Gobernador sobre la nueva ley de Movilidad Sustentable y Transporte del Estado de Baja California, que hoy fue votada por la comisión de Desarrollo Metropolitano, Conurbación e Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, encabezada por el diputado Ramón Vázquez Valdez, y que será llevada al pleno del Congreso del Estado. El desacuerdo es por la forma qué se quieren manejar las concesiones y permisos que ya han sido entregados, temen perder su patrimonio al ser considerado monopolio, en los casos donde una sola persona tiene más de un permiso, además están inconformes con la forma que plantean administrar el transporte público y el transporte metropolitano.
Posterior a la reunión con el gobernador de Baja California, el grupo de transportistas acudió a Mexicali para con un grupo de diputados del Congreso, trabajar en los puntos tratados con Bonilla, antes de que fuera votada.
Foto: Jorge Dueñes
En los últimos dos meses, en un par de reuniones el gobernador había cancelado decretos ante la petición de los transportistas de los cinco municipios, luego que mostraron su inconformidad en la manera que se estaba llevando el proceso de transición. Bonilla prometió a los transportistas que les dejaría trabajar en la creación del nuevo decreto, el proyecto de ley y las leyes secundarias, pero a partir de la solicitud de juicio político contra la alcaldesa de Rosarito, Araceli Brown, por entregar casi 100 permisos para transportistas, solicitó que se avanzara en la publicación del proyecto de ley para evitar “limbos” legales.
