Jesús Torres Estrada y Marco Antonio Castillo Quijas, policías municipales detenidos el 31 de enero en un operativo del FBI, tendrán su audiencia preliminar el próximo 21 de febrero y 17 de marzo, respectivamente.
Durante la mañana del 14 de febrero, ambos policías, junto con Ignacio Martínez Cruz, Mario Eugene Hall, Tomás Emanuel Ramírez y Nicholas Jeremiah Shaw, les fueron puestas sus nuevas fechas ante el Juez del estado de California, Timothy R. Walsh.
Castillo Quijas y Hall la tendrán el 21 de febrero, mientras que el resto el 17 de marzo, a pesar de ser el mismo caso.
En la próxima audiencia será la primera en donde el fiscal, Christopher Rhodes podrá demostrar evidencia que sustente el caso, y puedan sentenciarlos por robo, robo a vivienda y conspiración para cometer un crimen.
“Básicamente, si el caso se presenta a un jurado, van a encontrarlos culpables, más allá de la duda razonable. Sentimos que cumpliríamos esa responsabilidad, si el caso se presentara a un jurado”, dijo a ZETA el abogado fiscalista Christopher Rhodes.
El primero en pasar fue Tomás Ramírez; después Torres Estrada, quien requirió a un traductor para que le explicara el proceso, así como Castillo y Cruz.
Cada uno de los acusados pasó al estrado de manera individual, en el turno de Castillo Quijas, pidió que los medios de comunicación no siguieran caso, ya que su familia estaba siendo hostigada, tanto por medios, como por la gente que lo conocía, sin embargo, el Juez desestimó la petición, ya que su nombre y rostro ya era de dominio público, y no haría diferencia alguna, que no se siguiera grabando.
El 31 de enero de 2020, ambos policías, quienes estaban asignados al distrito de La Presa Rural, fueron detenidos en Chula Vista, como parte de un operativo orquestado por el Buró Federal de Investigaciones (FBI por sus siglas en inglés), junto con otras cuatro personas, quienes pretendían robar un domicilio, donde presuntamente había 1 millón de dólares.
