El escultor mexicano Jorge Marín inauguró la exposición “Bronces” en la Sala 1 de El Cubo del Centro Cultural Tijuana (CECUT), el viernes 18 de octubre por la noche, cuya muestra también incluye la escultura “Alas de la frontera” ubicada en el exterior del cine planetario IMAX (La bola), donde los paseantes se toman selfies o fotografías.
En la Sala 1 de El Cubo, Jorge Marín exhibe obras que recurren a la estética clásica del cuerpo de diversas culturas, en comunión con otras civilizaciones como, por ejemplo, la maya, con “Ek balam” (bronce, 2013) de 15 kilogramos. Los hombres de broce con alas del escultor son de diversos tamaños; por ejemplo, pueden apreciarse piezas de pequeño formato como “Octubre miniatura” (bronce, 2018) de 5 kilogramos, “Tiberio barbado” (bronce, 2017) de 6 kilogramos e “Inicio mediano” (bronce, 2009) de 15 kilogramos; hasta llegar a esculturas de gran formato y más pesadas como “Alexa en columna” (bronce, 2019) de 43 kilogramos y “Bernardo oriental monumental” (bronce, 2008), de 250 kilogramos.
En torno a la estética clásica del cuerpo humano, como en la antigua Grecia, en diversas posiciones o actitudes, en el texto de sala de la exposición se lee: “Buscando en los cánones clásicos, pero con una relectura contemporánea, vamos encontrando contraposiciones en las figuras, tomando como punto de partida la obra en torno a la que hemos establecido esta exhibición: ‘Bernardo’. Esta escultura consigue desarrollar una significancia para cada espectador, donde no hay un mensaje universal, puesto que la obra en sí misma plasma en su barroquismo una emoción humana diferente para cada ojo. La especialidad de la pátina, a su vez, conecta al proceso creativo donde la figura parece protagonizar un instante previo al vuelo”.
“Las obras de Jorge Marín adquieren múltiples dimensiones en función del contexto en el que se instalen, ejerciendo una acción directa para con el espacio. Con el bronce como transmisor, la obra de arte se relaciona con su propio escenario socio-cultural, que se establece tanto en torno a los bocetos de menores dimensiones como a las exhibiciones de tamaño monumental”, complementa el texto.
Como parte de la exposición, Jorge Marín exhibe la obra “Alas de la frontera”, de 4.50 metros de altura, 3.30 de largo por 1.59 de ancho: “‘Las alas representan la posibilidad de volar con el cuerpo y la mente, con el deseo, la voluntad y el empeño; simbolizan hermandad, libertad, plenitud; simbolizan la posibilidad de ir más allá de las facultades físicas, invitando a trascender los límites, al tiempo de simbolizar el instrumento para llegar tan lejos como nuestras fantasías lo deseen”, según el autor.
Finalmente, el texto de sala concluye: “Con esta instalación se traspasa la barrera intangible de la obra, para que aquellos que la contemplen, la tomen como suya propia. La interacción de esta escultura materializa las emociones y los deseos de las anteriores figuras. Ahora los miedos y los vuelos no pertenecen a personajes fantásticos, sino a hombres de piel, de carne y hueso, que acuden al encuentro con las alas como parte de la comunidad migrante. Unas alas de bronce que no sólo acogen al pueblo mexicano, sino que también rompen el horizonte fronterizo de cualquier otra bandera, como la ola en la roca”.
“Bronces” se exhibe en la Sala 1 de El Cubo del CECUT, de martes a domingo, de 10:00 am a 7:00 de la tarde, con diversos costos de entrada; los domingos el acceso a El cubo es libre.