Con sinceridad, habrá que decir: muchos bajacalifornianos nos sentimos avergonzados. Y eso se lo debemos a un grupo de hombres que han decidido -por su ambición- exhibirnos como ignorantes, antidemocráticos, tramposos. El señor Jaime Bonilla, con todo su equipo de “asesores”, se ha encargado de que ahora Baja California esté en la charla de millones de mexicanos.
Como si estuviéramos en la época de la prehistoria, en la que un partido político era el que decidía, ahora en cada paso que dan -especialmente los legisladores locales, los que concluyeron y los que acaban de iniciar su responsabilidad-, se han dedicado a jugar con fuego. Como si trataran con gente estúpida, como cada uno de ellos, inventan cada babosada, pensando que como ciudadanía la aceptaremos.
Que no le busquen. Porque el hartazgo puede llevarnos a la catástrofe. Que el “Cata” Zavala ya no presuma de inteligente e invente estupideces, como eso de la “consulta”. Ni él se la cree. Gente lúcida de aquí y de todo México ha repetido hasta la saciedad que simplemente el señor Bonilla tendrá que hacerse a la idea de que “el raite” le va a durar únicamente dos años.
Y que en esta ocasión, ni su dinero, ni sus influencias, ni sus abogados -famosos por su pasado y temibles por sus clientes- podrán cumplirle el capricho. Inexplicable que una ambición muy personal del gobernador (electo para dos años) le haga tirar a la basura lo ganado en las pasadas elecciones. Aún no empieza formalmente su trabajo y ya la ciudadanía habla de él, incluyendo quienes le dieron el voto; y no todas cosas buenas.
En nuestro estado hay muchas personas con preparación suficiente que han opinado -en concreto- sobre este tema que a todos nos tiene inmovilizados, porque la ley es una sola que define puntualmente sobre lo que procede en este caso (y el peligro de transgredirla). En ZETA, especialmente en el de la semana pasada, un hombre experto, inteligente, honesto, como lo es el maestro José Woldenberg, ampliamente expuso el por qué no procede esa monstruosa “Ley Bonilla”.
Es importante recordar los nombres de los 22 “legisladores” y la casi expresidenta de Rosarito, que votaron para que la ambición se convierta en realidad. Estarán en la historia, pero no es necesario ver el final de esta tragedia de enredos. Ellos votaron y tarde o temprano se sabrá sus razones. En las que no se incluye el cumplimiento de la ley.
Nota 1. Otra ambiciosa que los mexicanos quisiéramos ver jubilada, es la señora Dolores Padierna. A pesar del compromiso firmado por el coordinador de los diputados del Club Morena, Mario Delgado, para que la presidencia se alterne (cumpliendo el Art. 17 de la Ley Orgánica del Congreso de la Unión que especifica que” la presidencia será rotativa”), se ha montado en su macho y quiere que “los morenos” presidan los tres años. La esposa del señor de las ligas, se siente dueña de las cámaras por los 20 años que ha andado circulando por ahí.
Nota 2. A Ernesto Ruffo le cabe el “honor” de figurar entre los cinco diputados más faltistas de esta legislatura federal.
Nota 3.- Los buenos panistas sufren por lo que “Kiko Vega” y sus vasallos han dejado de ese partido.
Luz Elena Picos es Directora de Red Social de Tijuana.
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