Aletargado en el ejercicio de la función pública en administraciones panistas estatales y municipales, el delegado de la Secretaría de Desarrollo Económico, Jesús del Palacio Lafontaine, desde hace tiempo ha dejado de ser un interlocutor efectivo con el sector empresarial porteño. Pese a que ya no es militante panista -cabe recordar su aventura por el Partido de la Revolución Democrática, cuando quiso ser alcalde por segunda vez-, ha seguido ostentando puestos por encima de quienes en su momento se presumen fieles a la causa blanquiazul. Ahora que en Baja California soplan los vientos de la Cuarta Transformación, la sorpresa es que Del Palacio es el personaje considerado por Jaime Bonilla y/o sus cercanos como próximo delegado de la Secretaria de Economía Sustentable, Turismo, Medio Ambiente y Pesca en Ensenada, en lo que se presume una negociación entre morenistas y panistas. La muy posible designación ha prendido alarmas en el sector, debido a que Jesús Del Palacio Lafontaine no ha jalado inversiones, carece de proyectos y no tiene representatividad ante el grueso de la iniciativa privada, en un contexto en el que Ensenada necesita empujar los grandes proyectos rezagados, apuntalar otros nuevos que detonen el desarrollo negado al puerto durante años, más aún cuando en la nueva secretaría se tendrán que atender temas tan variados. Y así hablan de una nueva era.