La limosna de mil 160 pesos que cada dos meses les arrojaba, el usurpador priista Enrique Peña Nieto (EPN) a los miserables ancianos mayores de 65 años, ahora el “amoroso”, el “primero los pobres”, etc., se las arrojará solamente a los ancianos mayores de 68 años.
Ahí tenemos una muestra de lo “amoroso” que es el actual régimen de “izquierda” de López Obrador.
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Si algún anciano paupérrimo que estaba esperando cumplir los 65 años, para recibir la antedicha limosna, ahora se tendrá que esperar tres años más. Y lo más probable es que en esa espera se muera.
Pero ahora el “apoyo” va a ser doble vociferan los malditos morenistas tratando de justificar el aumento de tres años más para que todo anciano pueda percibir el susodicho “apoyo”.
Les dice el partido Morena a los ancianos que están en vías de recibir o que ya reciben el susodicho “apoyo”: “No se preocupen por los demás pues ustedes a partir de enero van a recibir doble apoyo”. Ruindad de los morenistas. Sí, doble limosna a costillas de los ancianos que tendrán que esperar tres años más.
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Si eso no es soborno, corrupción y falta de solidaridad para con nuestros semejantes en desgracia, entonces ¿qué diablos es?
Mientras los “30 millones” callados. En silencio cómplice.
Veamos uno de los argumentos del régimen de AMLO para aumentar la cantidad de años (de 65 a 68) que deban tener las personas mayores para poder recibir la limosna de marras.
Arguye el régimen morenista que debido a los adelantos en medicina, tecnología y bienestar social la esperanza de vida de las mujeres es de 77. 5 años y la de los hombres de 72.1. Por lo tanto, los ancianos miserables se deben de esperar tres años más para poder recibir la “espléndida” limosna.
Esta es una completa falacia. De ninguna manera se puede equiparar a un anciano de la clase burguesa con uno de la clase obrera. Hay de ancianos a ancianos. Ricos y pobres.
Es un hecho que los pobres sufren de más enfermedades, quedan baldados muy pronto y se mueren a más corta edad que los ricos.
La gran mayoría de los obreros a los 60-70 años ya están muertos en vida. Además, los grandes adelantos de la ciencia y de la tecnología en la medicina, están al servicio de la clase capitalista en el poder.
Un anciano de la clase proletaria jamás podrá, en los marcos de la sociedad burguesa existente, ser atendido en esos hospitales que cuentan con médicos de primera y moderna tecnología. Hospitales carísimos, vedados para los ancianos paupérrimos.
¿Piensa usted, estimado lector, que con la campaña de “hacer más con menos”, puesta en marcha por el gobierno morenista, los ministros, diputados, senadores, etc., se van a ir a atender al IMSS o en los hospitales del “Seguro Popular”? Por supuesto que no. Su campaña de “austeridad y de ahorro” no va a llegar a esos extremos. Los políticos burgueses son gente fina.
López Obrador y sus compinches no se van a poner en manos de pasantes de medicina, ni de medicuchos. El IMSS y el Seguro Popular son para las masas misérrimas. Los lujosos hospitales son para la burguesía explotadora y para sus testaferros.
No olvidemos que el jefe del partido de los “30 millones” de votos, según el INE de Peña Nieto, de tiempo en tiempo, es atendido por un médico especialista que viene exprofeso, desde España.
Prosigamos. Veamos algo más: “Existen en el país, actualmente, alrededor de 2.1 millones de ancianos que tienen entre 65 y 67 años de edad. Los cuales quedarían fuera con el nuevo programa de “68 y más”. Nota tomada de la publicación Animal Político. 16 de septiembre de 2018.
Podríamos asegurar que un alto porcentaje de esos 2.1 millones de ancianos morirán antes de haber cumplido 68 años.
“El próximo secretario de Hacienda (Carlos Urzúa) dijo que este apoyo se daría a todos los mayores de 68 años, incluso `a los más ricos`. Que la pensión para adultos mayores de todo el país se daría a partir de los 68 años y no los 65, como propuso en un principio el presidente electo Andrés Manuel López Obrador”. El Sendero del Peje. 5 de septiembre de 2018
Asegurar, como lo hace, Carlos Urzúa, de que la limosna de “68 y más” también se les otorgará “a los más ricos” deja ver que el partido Morena no sólo es una organización de demagogos sino también de bufones.
Ni a Carlos Slim, ni a Vicente Fox, ni a Luis Echeverría se les verá nunca extendiendo la mano para que se les otorgue la miseria del programa “68 y más”.
Ser limosnero es una gran afrenta. A ningún obrero en la vejez o en la invalidez se le debería de aventar mendrugos. Eso sólo ocurre en el capitalismo, un sistema cruel e inhumano.
La clase obrera es la que con su esfuerzo, sacrificio físico e intelectual ha sostenido y sostiene a la sociedad entera. Pero son los voraces capitalistas quienes se aprovechan de este sacrificio y esfuerzo de los trabajadores. La riqueza de los todopoderosos empresarios está fincada en la desgracia y miseria del pueblo trabajador.
Quienes viven más de 70 años son los ricos. Los pobres cada día que pasa se mueren a más temprana edad.
La pobreza a la que está condenado un obrero hace que éste sufra en el último tramo de su vida de mil achaques. Males propios de una clase explotada. El trabajador sólo vive para acrecentar el Capital. Y en la vejez, cuando la clase patronal ya no puede sacar más provecho de él se convierte en un desecho.
El burgués explotador se asemeja a un Drácula que se alimenta de sangre humana. Ser pordiosero es oprobioso. Los obreros deben de organizarse y luchar. Y luchar con ánimo y gran tesón por terminar con este infierno capitalista que condena a la juventud proletaria a una vida de esclavos, y a los obreros viejos a una existencia de pordioseros.
Malditos politicastros reaccionarios que tratan de congraciarse con el pueblo pobre lanzándole unas migajas. Cuando ellos han sido los culpables directos del estado miserable en que se encuentra la mayoría de la población de nuestro país. Y de la desgracia de millones de ancianos.
Las limosnas sean sencillas o “dobles” no dejan de ser limosnas.
¡Abajo con AMLO-Morena y su “68 y más! ¡Al diablo con sus “dobles” migajas!
Atentamente,
Javier Antuna
Tijuana, B.C.
Correo: gloriaproletaria@gmail.com
