La Academia Sueca entregará dos Premios Nobel de Literatura en 2019, uno correspondiente a este año y otro al aplazado en 2018, luego del escándalo de filtraciones y abusos sexuales en la institución, confirmó este martes su secretario provisional, Anders Olsson.
“Habrá dos premios Nobel como esperábamos, también se fallará el premio reservado el año pasado”, declaró Olsson a la edición digital del periódico Dagens Nyheter, principal diario sueco, al término de una reunión de la junta directiva de la Fundación Nobel.
El Comité del galardón más importante del orbe había anunciado en mayo del año pasado el aplazamiento del Nobel de Literatura, algo que no se producía desde desde la II Guerra Mundial, hace 75 años, por la pérdida de “confianza” del mundo exterior en la propia institución, debido a la crisis que ha provocado la renuncia de media docena de miembros.
El premio se otorgó por primera vez en 1901. Además de seis años durante las guerras mundiales (1914, 1918, 1935, 1940, 1941, 1942 y 1943), solo ha habido un año en que no se otorgó el premio: en 1935, cuando no se encontró a nadie digno del galardón, mismo que recibió en 1936 el dramaturgo estadounidense Eugene O’Neill.
La institución que otorga cada año el premio había mostrado entonces su intención de entregar dos en 2019, aunque la decisión final quedaba en manos de la Fundación Nobel, que exigía reformas en el funcionamiento de la academia para aceptar dicha solución.
“Estoy muy contento por recibir ese mensaje hoy, que implica también que podremos trabajar con tranquilidad con los premios y que todos los miembros del Comité Nobel estarán más motivados para ese trabajo”, dijo Olsson a la agencia sueca TT.
Las divisiones comenzaron a surgir en noviembre del 2017, cuando el fotógrafo francés Jean-Claude Arnault, que dirigía un proyecto cultural con fondos de la Academia Sueca, fue acusado por 18 mujeres de agresión sexual y de filtrar los nombres de siete ex ganadores del Nobel, lo que él niega.
Varios de los supuestos incidentes ocurrieron en propiedades pertenecientes a la Academia, que votó en contra de la eliminación de su Comité de la esposa del fotógrafo, la poeta y escritora Katarina Frostenson.
Además, han existido acusaciones de conflicto de intereses y la filtración de los nombres de los ganadores del Nobel, lo que dividió a la organización. Frostenson y la directora de la Academia, Sara Danius, renunciaron a sus cargos.
La institución cortó la relación y encargó una auditoría, que concluyó que se habían producido filtraciones y que el apoyo económico recibido por el club literario que dirigía Arnault incumplía las reglas de imparcialidad al ser su esposa copropietaria.
Entre quienes dejaron la institución figura su entonces secretaria permanente, Sara Danius, que la semana pasada anunció su salida definitiva diez meses después de abandonar el puesto. Mientras que Arnault fue condenado en diciembre por el Tribunal de Apelación de Estocolmo, a dos años y medio de cárcel, por dos casos de violación de una mujer en octubre de 2011, aunque el fotógrafo apeló al Supremo.
La Academia Sueca ha impulsado en los últimos meses varias reformas de sus estatutos y elegido a cinco nuevos miembros. Los estatutos requieren un quórum de 12 personas para votar por cualquier miembro nuevo, mismos que son nombrados de por vida, y que no pueden renunciar a su cargo, aunque pueden negarse a participar.
La membresía que fue establecida en 1786 por el rey sueco Gustav III, está destinada a ser de por vida, por lo que si alguien renuncia deja un lugar vacante hasta la muerte del miembro del jurado. Ante ello, el actual monarca Carl XVI Gustaf, anunció que cambiaría los estatutos de la Academia, permitiendo que nuevos miembros sean nombrados para reemplazar a los miembros que renuncian.
El cómo la Academia elige al ganador del Premio Nobel de Literatura ha permanecido en secreto durante el último siglo. Cada febrero, los miembros revisan alrededor de 200 nominaciones y elaboran una lista final para mayo.
Luego leen sobre los cinco autores que siguen compitiendo por el premio durante el verano. El ganador, anunciado en otoño, es el autor que mejor cumple el deseo de Alfred Nobel de recompensar “la obra más destacada en una dirección ideal”.
-Con información de EFE.