Daniel Payán González sucesor de “El Lucifer” para el Cártel de Sinaloa, controló Cabo San Lucas, La Paz y San José del Cabo;721 homicidios en 2017 respaldan la teoría de que su ingreso como brazo armado desbordó la violencia en BCS. Se le vincula en el homicidio del periodista Max Rodríguez
Cuando “El Lucifer” fue detenido el 6 de marzo de 2017, en las calles Batalla de Puebla y Eduardo Rodríguez de la colonia El Zacatal, de San José del Cabo, viajaba en un automóvil Nissan Sentra gris con placas de Baja California Sur, acompañado de dos jovencitas de alrededor de 18 años; traía consigo un fusil AK-47, dos cargadores, veinte cartuchos útiles y dos bolsas de nailon con marihuana.
Entonces el mando de las células criminales del Cártel de Sinaloa pasó a manos de Daniel Payán González “El Colores”, quien quedó a cargo de los grupos criminales en defensa de la plaza de Los Cabos y La Paz, con miras a ocupar San José del Cabo.
“Fue visto en la misma camioneta en que se movía ‘El Lucifer’, la tenían plenamente identificada los elementos de investigación, puro elemento local, pero nadie se animaba a actuar contra el jefe de sicarios. Fue hasta una serie de eventos de alto impacto que, digamos, calentó las cosas y tuvo que salir de inmediato para evitar ser eliminado por sus contras o detenido por la autoridad”, refirió una fuente de inteligencia militar a ZETA.
Pero su historia como criminal va más allá de los límites de Sudcalifornia. De acuerdo a información brindada, en 2012, Daniel Payán González, originario de Ciudad Obregón, Sonora, pasó de ser narcomenudista de bajo rango en el poblado Villa Juárez de esa entidad, a uno de los delincuentes más buscados.
Según fuerzas de inteligencia de la Policía Ministerial, es “responsable de diferentes delitos que sacudirían al Estado de Baja California Sur, específicamente en Cabo San Lucas (Los Cabos), su principal labor fue retener la zona y apoderarse del centro de Cabo San Lucas, sin descuidar San José del Cabo, territorio de ‘Los Javieres’ en disputa con miembros de la ‘La Barredora’ o ‘La Plaza’ para Jalisco”.
Antes de ser reconocido como narcomenudista fuerte o de gran alcance, autoridades le atribuyeron delitos contra la salud y portación de cartuchos útiles a los 24 años de edad.
Su crecimiento en la estructura criminal en Sonora pasó de la distribución y el transporte de droga y armas en 2004, a la venta al menudeo de droga en 2012, así llegó a Baja California Sur para sumarse al brazo armado de las “Fuerzas Especiales Dámaso”, principalmente en Los Cabos. Luego se consolidó como el principal generador de violencia en esa localidad: 721 homicidios cometidos por la delincuencia organizada en 2017 respaldan la teoría de que su ingreso como brazo armado desbordó los hechos de sangre.
A Payán González se le conoció a través de distribuidores de droga de grupos antagónicos en Los Cabos, cuando la Unidad Antidrogas de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) interrogó a “varios de ellos, afirmaban que ‘El Colores’ los había ‘levantado’, los interrogaron y los dejaban ir, pero más bien se trataba de alinearlos a la plaza sinaloense”, refirió el efectivo de inteligencia.
Poco a poco, “El Colores” se abrió camino con ejecuciones realmente violentas y cuerpos descuartizados. Destaca un hallazgo realizado la madrugada del 11 de junio de 2017, en la Zona Centro de Cabo San Lucas, donde dos cabezas humanas fueron localizadas y, a su lado, un narcomensaje.
A unos días de haber ascendido en la estructura criminal del Cártel de Sinaloa, Daniel Payán cometió su primer y sangriento aviso a grupos criminales y la incitación a que “salieran al topón”, principalmente al entonces líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG): Abraham Cervantes Escareaga “El Babay”.
La PGJE confirmó que se localizaron “restos de tres personas, dos del sexo masculino y una del sexo femenino”, en el interior de una hielera en Puerto Paraíso el 19 de marzo de 2017, dos semanas después de la captura del “Lucifer”.
Otro hallazgo tuvo lugar en Avenida Paseo de la Marina, a un costado del resort Hacienda Beach Club & Residences. Se trataba de una mujer y dos hombres.
Junto a sus cuerpos, un mensaje: “Esto LE SEGUIRA pasando a la GENTE QUE ANDE DE MITOTEROS “BABAY” AQUÍ TE DEJO TU BASURA SALGALE AL TOPON NO METAN GOBIERNO POR DELANTE PINCHES PUTOS ATENTAMENTE COLORES”.
Desde entonces Daniel Payán “El Colores” no sólo fue una amenaza para las células del CJNG, sino para las propias instituciones.
LA CAPTURA
“Derivado de trabajos de inteligencia, la Secretaría de Marina Armada de México, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado y en atención a una orden de aprehensión obtenida por investigaciones practicadas por la PGJE se logró la localización, ubicación y detención en el Estado de Sinaloa, de Daniel ‘N’, imputado en una carpeta de investigación por su probable intervención en delitos de homicidio calificado y homicidio en grado de tentativa, en agravio de Miguel Ángel Castro Romo y Luis Alberto González Corrales, agentes de la Policía Ministerial del Estado y un tercer elemento, quien salvó la vida”, reveló Daniel de la Rosa Anaya, procurador general de Justicia del Estado.
En un operativo conjunto, cayó el más temido de los líderes criminales del Cártel de Sinaloa en BCS, Daniel Payán González “El Colores” y/o “El Patreño”, detenido la mañana del martes 25 de septiembre en Navolato, Sinaloa, y enviado a Culiacán para su posterior traslado a La Paz, Baja California Sur, a bordo de aeronave tipo Cessna con matrícula XA-LAS del Gobierno del Estado.
“Se logró la detención de Daniel ‘N’ alias ‘El Colores’, presunto autor intelectual del doble homicidio de agentes de investigación ocurrido el 21 de febrero de 2017 en San José del Cabo. Contaba con orden de aprehensión por el delito de homicidio calificado y en grado de tentativa; el presunto homicida de 38 años y originario de Ciudad Obregón, Sonora, de acuerdo a las investigaciones, habría ordenado el asesinato de agentes antes citados, y tras los hechos se había trasladado a Navolato, Sinaloa, donde finalmente fue capturado”, refirió Marco Antonio Montoya, subsecretario de Seguridad Pública de Baja California Sur.
Tres elementos de investigación de la Policía Ministerial del Estado se encontraban investigando homicidios ocurridos recientemente en la colonia San Bernabé de San José del Cabo, cuando fueron sorprendidos por personas armadas, “quienes les dispararon en múltiples ocasiones, causándoles heridas que provocaron la muerte a dos de ellos, resultando ileso un tercer elemento”, informó el procurador estatal De la Rosa Anaya.
El homicidio fue tan sanguinario que prácticamente borraron los rostros de los elementos de seguridad, desde entonces se inició la cacería del jefe de sicarios, entonces identificado como “El Colores”, quien presuntamente habría ordenado el crimen.
“Con la labor de inteligencia del Ministerio Público, con las evidencias científico-periciales y la labor de investigación de los agentes ministeriales, se logró la ubicación de Daniel ‘N’ en el Estado de Sinaloa”, informó el procurador, pero dejó la moneda en el aire, al decir que “El Colores” se relaciona “en otras carpetas de investigación por delitos de homicidios de alto impacto, que en su oportunidad daremos a conocer”.
El detenido fue trasladado al Centro de Reinserción Social (Cereso) de San José del Cabo, donde queda a disposición del Juez de Control, pues la orden salió desde el municipio de Los Cabos.
Sobre la posibilidad de buscar que sea trasladado a un penal de máxima seguridad por el nivel de peligrosidad que representa tener a un perfil tan alto, en un centro penitenciario de mediana seguridad, la autoridad adelantó que de momento se busca la vinculación a proceso y de ahí poder tramitar su traslado a un penal federal.
“En este momento es internado en el Cereso de San José del Cabo porque la residencia del juez que lo requirió, emitió el mandamiento judicial a partir de su cumplimentación y de la vinculación a proceso que se genera a partir de la vinculación a proceso, ahí ya se puede, por las razones de la alta peligrosidad de este sujeto, el traslado a algún Centro de Reinserción Social de carácter federal, las autoridades de Seguridad Pública en el Estado realizan lo correspondiente para efectuar algún traslado de esa naturaleza, hasta el momento sí se requiere que sea vinculado a proceso”, refirió Daniel de la Rosa Anaya.
Aunque existe el riesgo de que “El Colores” pueda interactuar en el penal de San José del Cabo, debido a la presencia de miembros de su célula delictiva, autoridades han determinado colocarlo en el penal, donde se ha sabido del movimiento de células delictivas que “gobiernan” el Cereso.
AUTOR INTELECTUAL DEL HOMICIDIO DE MAX RODRÍGUEZ
“Este sujeto está siendo investigado, está sujeto a diversas carpetas de investigación, gran cantidad de ellas del año pasado, en diversos delitos de alto impacto, sin embargo, en este momento estamos en la etapa exclusivamente de la cumplimentación de una orden de aprehensión por este caso, es la información que hasta este momento podemos proporcionar con mucha transparencia y con oportunidad daremos a conocer más detalles de otras investigaciones”, adelantó el procurador estatal.
Según el expediente de investigación del homicidio de dos policías ministeriales ese 21 de febrero de 2017, se estableció que:
“Sin ningún remordimiento la célula delictiva de ‘El Colores’, que además de contar con la intención de desestabilizar tanto a la población y los cuerpos de Seguridad Pública, a través de mantas con mensajes intimidatorios, acreditándosele uno de sus actos delincuenciales en el mes de febrero del 2017, cuando da la orden a Jesús José Burrola alias ‘El Guayaba’; José de Jesús Cano, conocido como ‘E Cano’; Juan de la Peña alias ‘El Teoría’; y a Sergio Sedano (a) ‘El Gastón’, de privar de la vida a dos elementos de la Policía de Ministerial, mismos que se encontraban adscritos a la Unidad Especializada en Investigación de Delitos de Homicidio Doloso del Estado de Baja California Sur, de nombre Miguel Ángel Castro Romo y Luis Alberto Corrales González; fueron acribilIados con armas Largas en cumplimiento de su deber en las calles Vinoramas y calle Costa Azul, de la colonia San Bernabé en San José del Cabo”.
Tal información permitiría la resolución de varios casos, ya que autoridades han confirmado la participación de los pistoleros que servían a Daniel Payán González en otros eventos, así como las armas vinculadas.
El subsecretario de Seguridad Pública, Marco Antonio Montoya, aseguró que “derivado de estos trabajos de investigación, en meses pasados se logró la detención de cinco personas presuntamente relacionadas en este hecho (homicidio de ministeriales), por lo que con esta captura se logra dar fin a esta célula delictiva, la cual podría estar relacionada en hechos delictivos ubicados en esa localidad”.
Todo apunta a que “El Colores” y/o “El Patreño” es el autor intelectual del homicidio del periodista de Colectivo Pericú, Maximino Rodríguez Palacios, ocurrido el 14 de abril de 2017 en una plaza comercial de La Paz.
Dos días después del homicidio, la PGJE informó los resultados del Sistema de Huella Balística, que permitieron establecer que el arma con la que privaron de la vida a Max Rodríguez, es la misma con que ejecutaron el 5 de abril de 2017 al comandante del Grupo Especial Operativo de la Policía Estatal, Juan Salvador Díaz Moreno, afuera del Cereso La Paz.
De acuerdo a las declaraciones que obran en la PGJE, tres de los cinco sicarios que participaron en la ejecución de Rodríguez y que se encuentran confesos, son Juan Antonio de la Peña González; José de Jesús Cano Vega (fallecido el 28 de diciembre de 2017 al intentar fugarse del penal) y Sergio Asunción Sedano.
Los tres participaron también en el homicidio de los dos agentes ministeriales en febrero del mismo año, enviados por “El Colores”.
De acuerdo a las investigaciones que se tienen actualmente, la célula de “El Colores” podría estar vinculada con los siguientes casos:
* José Rosario Cadena, comandante del Cereso La Paz, privado de la vida cuando llegaba a su domicilio el domingo 15 de enero de 2017, domicilio ubicado en Ciprés y Sonora, de la colonia Ruiz Cortines
* Juan Salvador Díaz Moreno “El Cuervo 23”, comandante del Grupo Operativo Especial de la Policía Estatal Preventiva, ejecutado el 5 de abril de 2017 fuera del penal de la Capital del Estado
*Maximino Rodríguez Palacios, reportero policiaco de Colectivo Pericú, el 14 de abril dl 2017 en el estacionamiento de City Club.
La célula de “El Colores” fue desarticulada el 30 de mayo de 2017, cuando agentes de seguridad perseguían a hombres armados que acababan de accionar sus armas de fuego en una vivienda de la colonia el Progreso en La Paz, refugiándose en una casa de seguridad en la calle Palma, entre Matías Flores y Gomera del fraccionamiento Isla; allí fueron localizadas nueve personas del sexo masculino.
En el inmueble se localizaron autos y armas vinculadas con diversos homicidios:
* 5 fusiles AK-47 calibre 7.62 x 39 milímetros
* 2 AR-15 5.66 (.223) x45mm
* Un arma tipo escopeta
* Equipo táctico, chalecos y ropa en general en maletas
* 4 pistolas calibre 9 milímetros
* 14 cargadores y tres discos de 100 tiros cada uno
* Tres unidades automotrices: Dodge RAM 1500 de color negro; Toyota Highlander color oro y Toyota 4Runner verde.
SICARIO DEL TERROR
Para las autoridades de Baja California Sur era prioritario capturar a “El Colores” y/o “El Patreño”, se había convertido en uno de los sicarios más sanguinarios en la historia de la entidad.
“Hubo momentos que vivimos en incertidumbre, hubo amenazas en contra de Colectivo Pericú, no sabemos si eran de este personaje directamente, porque aparecieron diversos narcomensajes, hasta siete, colgadas en bardas perimetrales de escuelas, puentes”, señaló Cuauhtémoc Morgan, director del medio de comunicación en el cual colaboró Max Rodríguez.
Fuerzas de seguridad sitúan a “El Colores” como el principal generador de violencia en 2017, más de 700 muertos fueron contabilizados en La Paz y Los Cabos principalmente, zona de influencia del líder de sicarios y encargado de plaza. Ha sido el año más violento en la historia de BCS, con un promedio de ejecuciones de dos personas por día, todos cometidos por la delincuencia organizada.
Según información recabada por miembros de inteligencia militar, “El Colores” se convirtió en el lugarteniente al servicio del Cártel de Sinaloa más violento y sanguinario, con prácticas que sembraron terror a sus adversarios, al desmembrar cuerpos para después arrojarlos en diversos sitios con narcomensajes; violó toda medida de seguridad para colocar restos humanos en la plaza más visitada de Baja California Sur: Puerto Paraíso.
“Nosotros no teníamos conocimiento de este sicario, la situación estaba muy confusa, sabíamos de su existencia o supimos más bien de su existencia, cuando irrumpe con narcomensajes, acreditándose terribles homicidios, fue un periodo de terror para Baja California Sur y para Los Cabos principalmente en 2017. Como medios estuvimos siempre a la expectativa y recibiendo constantes mensajes de uno y otro grupo, pero fue de esta manera que supimos de su presencia y su actividad criminal”, manifestó el director de Colectivo Pericú.
De alguna u otra manera, Daniel Payán pudo burlar la extrema vigilancia que se concentró en Los Cabos y La Paz, más de dos mil efectivos, entre policías federales operativos y de inteligencia, de la Secretaría de la Defensa Nacional y de la Marina, con puntos de revisión secundaria en puertos y aeropuertos.
“El Colores” ya se encontraba resguardado en el Estado de Sinaloa, de donde presuntamente pudo haber ordenado una ola de homicidios más a través de Henry Froilán Rojas Ramírez “El Zopy” y/o “El Zopilote”, el cual comandaba una célula criminal que fue desarticulada el 29 de enero, cuando lo recapturaron.
El 25 de abril, elementos de la Policía Estatal Preventiva de Baja California Sur y agentes de la Marina Armada de México ubicaron en Culiacán, Sinaloa, a Óscar Omar González Murillo “El Osmar”, “El Pelosnacas” y/o “El Pelonchas”, miembro del Cártel de Sinaloa bajo el mando de “El Zopi”, quien presuntamente habría privado de la vida a Silvestre de la Toba Camacho, presidente de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos en la entidad y a su hijo, lo que deja duda si también fue ordenado por “El Colores”.
Sin embargo, donde ya se ha vinculado con datos de la investigación, es en el caso del Periodista de Colectivo Pericú, a lo cual reconocen que esta podría ser una valiosa oportunidad de esclarecer homicidios cometidos en la entidad y dar tranquilidad a las familias.
“Vemos una luz de esperanza, una luz de justicia por la muerte de nuestro compañero y amigo Max Rodríguez, si autoridades logran vincularlo con el homicidio de nuestro amigo, sería cerrar una página negra para Baja California Sur, una escalofriante historia”, agregó Morgan.
Hasta el cierre de esta edición, la autoridad no había revelado la participación del ahora detenido en hechos específicos, sin embargo, se especula que Daniel Payán ordenó decenas de ejecuciones en La Paz y Los Cabos; también pudo haber estado involucrado en las narcofosas localizadas en junio de 2017, donde fueron recuperados 18 cadáveres: 13 masculinos y cinco femeninos.
Aún es incierto el futuro tras la captura de “El Colores”, pero en los municipios del norte de la entidad, donde ya hubo cambio de autoridades, los alcaldes fueron recibidos con personas ejecutadas, lo que pudiera significar una pronta respuesta del Cártel de Sinaloa, tras la detención de uno de los hombres más importantes en la estructura criminal en la pelea por la plaza.