Tras la reunión que sostuvo con el presidente Enrique Peña Nieto en Palacio Nacional -misma en la que participaron los integrantes de los respectivos Gabinetes del Gobierno entrante y del saliente-, el mandatario nacional electo, Andrés Manuel Lópéz Obrador, afirmó que a la dirigente sindical Elba Esther Gordillo Morales se le debe respetar su derecho de participación, además de que reiteró que cancelará la reforma educativa.
El político tabasqueño abundó que la ex secretaria general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) -quien permaneció 5 años y 6 meses en prisión, acusada de delincuencia organizada y lavado de dinero por mil 978 millones de pesos- fue declarada inocente y está libre, por lo que se tiene que respetar su derecho de participación.
López Obrador señaló, también, que va a refrendar los compromisos que hizo en campaña, uno de ellos el de no intervenir en los asuntos internos de los sindicatos, y otro, procurar que haya democracia sindical. A pregunta expresa de un reportero, el político tabasqueño aclaró que ni Gordillo Morales, ni ninguno de sus allegados trabajará en su Gobierno, y que sólo se van a reconocer sus derechos como ciudadana.
Respecto a la reforma educativa, el presidente electo dijo que en tiempo y forma se presentarán las iniciativas para cancelarla, así como para conocer un plan distinto, con un marco legal ajustado a nuevas circunstancias. Para ello, indicó López Obrador, la actual reforma educativa va a ser sustituida por otra que tomará en consideración el punto de vista de maestros y padres de familia.
“Mientras esto no suceda, vamos a acatar lo que está establecido en las leyes y vamos a respetar el mandato constitucional del presidente Enrique Peña Nieto”, aclaró. “Se puede mejorar mucho la calidad de la enseñanza, y al mismo tiempo, ampliar la cobertura. La educación es un derecho, no es un privilegio, todo esto es lo que se busca con la nueva política educativa”, abundó.
“Tenemos que convencer, no vencer, tenemos que incorporar a los maestros […] ninguna reforma educativa se puede hacer sin los maestros, que son los que transmiten el conocimiento en el aula”, dijo el presidente electo, quien recordó que pronto el presidente Peña Nieto dará su último informe, en que informará sobre el tema.
“Al final de cuentas, el juicio final corresponde al pueblo y a los ciudadanos. Ya nosotros hicimos nuestro compromiso durante la campaña, ya lo dicho, dicho está […] Es extraordinario tener esta relación armoniosa, entre el Gobierno que va a terminar, y el que va a empezar”, indicó López Obrador.
“El presidente Peña Nieto, a diferencia de otros, dio muestra de imparcialidad durante el proceso electoral, no se involucró en el proceso electoral, como, nos consta, ha sucedido en otras elecciones. Por eso nuestro respeto al presidente Peña Nieto”, finalizó el político tabasqueño.
Por su parte, el aún titular del Poder Ejecutivo Federal sostuvo que para su Gobierno no tiene “mayor trascendencia” la opinión de Gordillo Morales sobre la reforma educativa. Además, señaló que el proceso seguido por la Procuraduría General de la República (PGR) contra la líder sindical “es de todos conocidos” y que “”no hay un encono personal” contra la que fuera dirigente del SNTE.
“En el tema de la maestra no tengo respuesta, lo único que puedo decir, no es una definición del Ejecutivo, es una definición o el proceso que ella enfrenta es a partir de elementos judicializados de la PGR y correspondió al Poder Judicial tomar definiciones, no las toma el Ejecutivo, el Poder judicial es un poder autónomo, que actúa de manera autónoma”, aseveró Peña Nieto.
“Simplemente es inadmisible e inaceptable el afirmar que la maestra, cuya carrera y trayectoria es conocida públicamente, que el juicio que enfrentó haya tenido que ver con una orden política, nada más falso que ello y no tengo más respuestas para quien se le respeta en sus derechos político y en lo que ha realizado”, dijo el mandatario Nacional, quien además insistió en que respetará la decisión que tome López Obrador sobre la reforma educativa.
Este mismo lunes, justo al arranque del Ciclo Escolar 2018–2019, Gordillo Morales ofreció una conferencia de prensa, en la que dijo fue víctima de “una persecución política y acoso en su contra”, pero que, sin embargo, recuperó su libertad y la reforma educativa que promulgó Peña Nieto -al que nunca mencionó por su nombre- “se ha derrumbado”.
La ex secretaria general del SNTE, de 73 años de edad, abundó que fue blanco de “acusaciones falsas para hacerme ver culpable de un delito que no cometí […] Soy inocente y doy a conocer a ustedes lo que justifica judicialmente el acuerdo”, dijo, para luego levantar un documento.
Era el expediente 156/2018, que el magistrado Miguel Ángel Aguilar López, del Primer Tribunal Unitario del Primer Circuito en Materia Penal de la Ciudad de México, sobreseyó el pasado 7 de agosto, tras permanecer 5 años y 6 meses en prisión, acusada de delincuencia organizada y lavado de dinero por mil 978 millones de pesos.
