A unas semanas del inicio de la tercera etapa del Programa Raite, creado por el gobierno municipal en cumplimiento a la promesa que hiciera en campaña, el alcalde Juan Manuel Gastélum, choferes acusaron que sus patrones no les han cubierto el pago proporcional del pasaje, lo que les afecta directamente a su economía.
Al respecto, el secretario general del Consejo de Autotransportes de Baja California “J. Magallanes”, Héctor Márquez Adame, dijo que al inicio del programa, en septiembre de 2017, se anunció que el financiamiento del proyecto lo absorbería el municipio y el gobierno del Estado, pero finalmente, el peso recayó totalmente en los choferes.
Por ese motivo se registraron conflictos entre ellos y los beneficiarios, porque los conductores se negaban a recibir el boleto e incluso les negaban el acceso a las unidades.
La acción derivó que la dirección de Transporte Municipal realizara operativos para sancionar a quienes se negaran a dar el servicio, pero el gobierno de Gastélum continuó sin proporcionar la aportación prometida.
Esto generó más problemas al interior de la empresa, pues al no recibir recurso de la autoridad municipal para pagar a los choferes, el sindicato reclamó; finalmente llegaron a un acuerdo con los permisionarios de la línea que representa para que se pagara un 23% por cada boleto de Raite a los choferes, porcentaje similar al que reciben por el resto del pasaje.
“Entre que sí (recibían apoyo del gobierno) y que no, salimos abanicando nosotros. Tuvimos que poner (el recurso) completamente nosotros, aquella vez”, admitió.
Para la segunda etapa, que inició en febrero de 2018, el Ayuntamiento anunció que pagaría a las empresas 1.60 pesos por cada boleto y que éstas, según sus formas internas de pago, retribuirían el dinero a los choferes que le entregaran los boletos. Márquez Adame confirmó que en la segunda etapa, el municipio aportó recurso, pero no especificó cantidad.
Para la tercera etapa de Raite, que dará inicio a finales de agosto de este año, el tesorero del Ayuntamiento, Ricardo Chavarría Morales, compartió a ZETA que los recursos saldrán de la partida de Becas. En esta ocasión, detalló, el Ayuntamiento dará dos pesos por cada boleto.
Chavarría refirió que para el ejercicio de 2018, el Municipio aportó siete millones de pesos para el pago de boletos de estudiantes. Anotó que cada empresa maneja un sistema de recaudación diferente, pero cuando el chofer entrega los boletos a la empresa, ésta se lo pagará y le cobrará al Instituto Municipal de la Juventud (Imjuv). Hasta ahora, dijo, se ha pagado a transportistas, casi un millón de pesos por boletos.
Sin embargo, conductores de las líneas Autotransportes Urbanos y Suburbanos Corredor Tijuana 2000 S. A. de C. V., de Autotransportes Urbanos y Sub-Urbanos Libres de Tijuana B. C. S. A. de C. V. “Altisa” y Línea de Autotransporte Urbano y Suburbanos de Baja California S. A. de C. V. “Verde y Crema”, dijeron a este Semanario que ni de la primera, ni de la segunda etapa han recibido ningún pago.
Gerardo, de la ruta Refugio-5 y 10, de Autotransportes Urbanos y Suburbanos “Corredor Tijuana 2000”, quien trabaja en la modalidad de renta y no por pago de porcentaje de boletaje, reprochó no haberlos tomados en cuenta en la implementación del programa que se les obliga a apoyar.
“A nosotros, nomás el patrón nos dijo que teníamos que recibir los boletos. Pero al momento de pagar la renta, él recibe completito y nosotros con menos dinero por los estudiantes que no pagaron ni la mitad del pasaje. No nos ayuda en nada el programa ese a nosotros, al contrario”, manifestó
Por su parte, Sergio, operador de la ruta Villa Fontana-Centro, de “Verde y Crema”, refirió que a pesar de que su ruta es de las que traslada pocos estudiantes, ha recibido alrededor de 300 boletos del programa, con los que dejó de recibir seis pesos por cada uno, lo que se traduce en mil 800 pesos, equivalente a más de la renta diaria del camión. “Aunque nos hubieran dado el peso por boleto, de todas formas nos afecta. Ahora, el compromiso no lo hizo la empresa, el gobierno fue el que se comprometió a dar ese apoyo, es el que tiene que responder”, aseveró.
Mientras que otro conductor de “Altisa”, quien prefirió no identificarse, dijo que tampoco a ellos les pagan el boleto de Raite. Del conteo de pasajeros diario que hacen mediante el sistema de sensores, descuentan los correspondientes a los estudiantes beneficiados para no cobrarlo, “como si no se hubiera subido nadie. Pero ocupó el lugar, me afecta porque puede subir alguien que sí pague pasaje completo o medio”.