“Más de 40 años vendiendo más barato, ¡esa es la diferencia!” es el lema que abanderó los últimos años de lo que se conoce como “Tienda almacenes El Águila”, una de las tiendas más representativas del Estado de Baja California Sur y sobre todo, uno de los iconos de la época dorada de La Paz, tiempos que hacen referencia a aquellos años cuando se vivió el apogeo de la fayuca, donde cientos de mujeres de distintos estados de la República viajaban hacia el puerto de la Paz a realizar sus compras de ropa para regresar y revenderla.
Tras el paso del tiempo y la poca afluencia ciudadana en la zona del centro histórico, la emblemática tienda “El Águila” recientemente ha iniciado su gran venta de liquidación y con ello, el proceso del cierre del establecimiento comercial con más de 40 años de operación.
Sin embargo, aunque la tienda concluya sus servicios, quedan los recuerdos de generaciones que asistían ahí a comprar su vestimenta.
“Era una tienda muy económica, toda las familias podíamos comprar ahí todo ropa de temporada; ahí mi mamá me compraba mi ropa y yo la ropa de mis hijos, sobre todo en la temporada de calor que era muy económica y muy bonita. Nos quedan muchos recuerdos”, comentó Soledad Almaraz, clienta de la tienda.
De acuerdo a información encontrada en la plataforma del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la capital del Estado de Baja California Sur, La Paz, es la ciudad del país con el más alto índice de cierre de establecimientos comerciales; en base a las estadísticas, un 80 por ciento de ellos cierran en un periodo menor a los tres años de haberlo inaugurado, lo que indica que tan solo el veinte por ciento de ellos pueden permanecer en el mercado más de tres años activos.
El cierre de este establecimiento se suma a la lista de los otros tantos que han formado parte de la historia, tal fue el caso de las tiendas de “El Trébol” y “La Sirena”, grandes almacenes con similitud a tienda “El águila”.
Actualmente, lo que es conocido como el Centro Histórico de La Paz, luce de manera deteriorara y con poco movimiento, esto debido a que muchos de los locales comerciales permanecen vacíos y cerrados.
Esta situación no solo ha llevado a la sociedad a ya no visitar el centro de la ciudad y preferir plazas con cadenas comerciales mayormente conocidas, sino que además es analizada por observatorios ciudadanos, tal es el caso de “Cómo Vamos La Paz” que reconoce el gran empeño que realizan de inicio los comerciantes, pero que muchas veces no es suficiente.
“La verdad es muy triste ver el gran entusiasmo que se le pone para abrir un negocio, la gran inversión en tiempo y recursos; también es abordar las ideas, el concepto, pero lo cierto es que te mata la renta, el pago de luz, y eso es otra lucha que hay que tener muy firme ahorita”, expresó Lucía Frausto, directora del Observatorio Ciudadano “Cómo vamos La Paz”.
Cada vez es más común que más negocios cierran y menos abran, en lo que al centro refiere, pues ciudadanos manifiestan ya no es viable invertir en esa zona cuando la gente prefiere asistir a otros lugares.
“Yo no pensaría jamás en abrir un negocio en el centro, mira, todo está solo, ya nadie viene para acá. Las ventas obviamente no se tienen aquí; sería verdaderamente un fracaso pensar que un negocio te va a pegar en el centro, cuando la gente ni siquiera lo visita”, dijo Cecilia Fernández, ciudadana.
Una alternativa viable para el observatorio ciudadano consiste en un planteamiento diferente de reutilización de uso de suelo de los edificios que ya existen; es decir, analizar qué se puede hacer, bajar las tarifas de los inmuebles y así apoyar el impulso del comercio local.
“Hay edificios como el icónico Hotel Los Arcos, mismo que generaba muchísimo movimiento, muchísima economía aquí local; hay otros como los edificios que estaban aquí donde está abandonado, en el antiguo Aero California, incluso hay también un sindicato abandonado, todo grafiteado; también la tienda del Issste, ahora esta gran tienda del Águila, si se va, es un edificio inmenso y no hacemos nada con toda esa tierra abandonada. No hay que crecer como ciudad, no hay que dispersarse más como ciudad, hay que reutilizar”, dijo al respecto Lucía Frausto.
La principal economía que ahora sostiene a la ciudad, según datos presentados por la dirección de comercios del XV Ayuntamiento de La Paz, es la de los giros negros, es decir, bares y centros nocturnos y donde el gobierno municipal ha expedido mil 800 licencias de
alcoholes en la ciudad.