Aunque autoridades de los tres niveles de gobierno niegan que exista extorsión o “cobro de piso”, comerciantes y empresarios denuncian un índice alarmante de delincuencia que ha aumentado sobre todo en esta zona de Ensenada
A muchos molestó y a los más inquietó la revelación que hizo la diputada Claudia Agatón respecto al “cobro de piso” que están padeciendo algunos empresarios del Valle de Guadalupe, quienes presuntamente han recibido amenazas de ser “levantados” o secuestrados.
No hay autoridad de los tres órdenes de gobierno que confirme que existe la “extorsión” o “cobro de piso” en Ensenada. Tampoco lo refieren empresarios o comerciantes de cualquier ramo en el puerto, quienes sin embargo, han sido insistentes en sus lamentos y demandas para que se abatan los índices de violencia desbordada en los últimos dos años.
Denuncian que están azorados por delitos de todo tipo, robo, asaltos, narcomenudeo y demás, a lo largo de las 22 delegaciones, incluyendo El Porvenir, Francisco Zarco y San Antonio de las Minas, mismas que conforman el Valle de Guadalupe, o también llamada ya afamadamente “La Ruta del Vino”. Pero insisten que hasta el momento no se ha llegado a niveles más graves. Menos en la región más turística y rentable que pueda existir actualmente en Baja California.
Según la legisladora petista, vitivinicultores y hasta restauranteros muy reconocidos le habrían confiado que han sido extorsionados con fuertes cantidades de dinero. Que han callado precisamente ante el temor de sufrir represalias y, sobre todo, para no afectar la afluencia turística en el Valle de Guadalupe, donde se vive un “boom” que es la apuesta tanto del sector público, como privado.
Sin abundar más, después de ser confrontada desde varios frentes, empresariales y políticos, por considerar su declaración como alarmista sin fundamento, Agatón refirió, “lo que sí es evidente es que, en materia de inseguridad, el sol no se puede tapar con un dedo, y no es justo para los residentes y turistas que visitan el Valle de Guadalupe que por cuestiones de percepción o interés económico y comercial, se oculte información o se niegue una realidad”.
En lo que va de 2017 se han denunciado más de 10 mil 500 delitos en todo el municipio, suman casi 170 homicidios. En ese global, la diputada local por el Partido del Trabajo recordó crímenes recientes ocurridos en el Valle de Guadalupe. Como el ataque armado contra un vehículo donde fallecieron dos personas y una quedó herida. Una de las víctimas fue una mujer embarazada. Igual, a mediados de año ocurrieron otros dos homicidios en distintos domicilios de “La Ruta del Vino”.
“Y si hay quienes dicen que en el Valle de Guadalupe no pasa nada y que es seguro, pues creo que es su percepción, pero yo insisto que hay que elevar el número de patrullas y policías en esa región, y que la Procuraduría de Justicia dé resultados ante las denuncias interpuestas”, insistió.
“El Valle de Guadalupe es seguro para inversionistas y visitantes”, reviró por su parte, de forma contundente, la también diputada por Ensenada Rocío López Gorosave, quien preside la Comisión de Turismo en el Congreso del Estado.
Aunque postulada por el Partido de la Revolución Democrática, la candidata ciudadana reprobó que se ponga en entredicho el ambiente de seguridad del principal atractivo turístico de Baja California y el noroeste del país.
“Hasta donde yo sé, el Valle de Guadalupe es una zona segura para invertir, para visitar y para vivir, de ahí que en estos momentos sea un polo de desarrollo económico con gran actividad que le está dando renombre a nuestro Estado a nivel mundial. Hay que enfocar los esfuerzos de las autoridades de los tres órdenes de gobierno para que esta tranquilidad continúe”, acotó.
Sin hacer referencia directa a Agatón, expresó: “Debemos ser muy cuidadosos a la hora de hacer declaraciones públicas, ya que hacerlo sin fundamento y de manera alarmista podría ser muy negativo y ahuyentar tanto a turistas como a futuros inversionistas.”
Tras enumerar logros y reconocimientos que han recibido restaurantes, vinos y chefs bajacalifornianos, López conminó a resaltarlos “en lugar de hacer eco a comentarios ligeros y nocivos”.
Lo bueno cuenta
En medio de la convulsión que causaron las malas noticias sobre el Valle de Guadalupe, en los días subsiguientes tanto las instancias estatales como municipales reforzaron su comunicación social en torno a destacar las bondades de la zona y obras emprendidas.
La Secretaría de Turismo del Estado (Secture) destacó la publicación de la revista Thrillist, que ubicó a la “Ruta del Vino” como un destino de interés mundial con el artículo titulado “20 cosas inolvidables para hacer en México antes de morir”. Resaltaron el impacto de la publicación y los más de 11 millones de lectores potenciales.
De igual manera, destacaron la ocupación hotelera total y una derrama de 6 millones de dólares gracias a la carrera fuera de camino Baja 1000, y reiteraron que el 61 por ciento de turistas que llegan a la entidad lo hacen atraídos por su gastronomía, vinos y cervezas artesanales. Lo que también determina que Ensenada sea el destino mejor evaluado del Estado, con un 90% por encima de los demás municipios.
Paralelamente, el gobierno municipal encabezado por Marco Novelo anunció un programa de fortalecimiento para la región vitivinícola, en aras de abatir los problemas que enfrenta el sector y establecer las condiciones “para operar y crecer con orden”.
Reunidos con las diferentes agrupaciones de productores de vino, se signó el compromiso de mesas de trabajo para actualizar el Programa de Ordenamiento del Valle, la mejora regulatoria para permisos de comercios y alcoholes, y la coordinación para la implementación de medidas de Seguridad Pública en la “Ruta del Vino”.
Con los mandos policíacos municipales, nuevamente se habló de promover programas de prevención del delito y “analizar casos particulares para desarrollar estrategias a seguir”.
“El Ayuntamiento está comprometido a brindar apoyo a esta región para que siga siendo uno de los principales atractivos turísticos de Baja California y México”, dijo el primer edil.
Por los mismos días, el gobernador Francisco Vega de Lamadrid celebró reunión de la Comisión que preside en la Confederación Nacional de Gobernadores (Conago) en su lugar predilecto para ello, el Museo del Vino, donde destacó la inversión de 240 mil millones de pesos en 153 proyectos, y tres más previstos para el tema de seguridad y justicia, que ascenderá a 2 mil 300 millones de pesos.
Posteriormente, acompañado de mandos de las diferentes corporaciones policíacas y militares, el mandatario tuvo encerrona con líderes empresariales, quienes días antes habían lanzado una demanda más enérgica para que disminuyan los altos índice delictivos y pedir la presencia de fuerzas federales.
De alarmante señaló la situación Marco Antonio Coronado, presidente del Consejo Coordinador Empresarial de Ensenada, quien les recordó que con relación al año pasado, los crímenes en el municipio incrementaron en un 140%. Planteó que hay incertidumbre, intranquilidad y claro temor del sector empresarial ante la posibilidad que el clima de inseguridad inhiba la inversión y la economía regional.
Reconocen como alarmante el incremento de robos a domicilios, a mano armada, de vehículos, asaltos, ejecuciones por ajuste de cuentas, a víctimas colaterales, pero no mencionan otro tipo de delitos que pudieran estar afectando directamente a personajes de la Iniciativa Privada.
“El gobierno en sus tres niveles no debe esperar a que se desate una oleada incontenible de robos, secuestros y extorsiones que vengan a agravar más la situación, deben actuar urgentemente y dejar de lado los acostumbrados discursos políticos de una coordinación que no existe”, indicó.
¿Y lo malo?
A diferencia del sector vitivinicultor, comerciantes de otros giros en el Valle de Guadalupe, tales como agricultores, propietarios de tiendas, negocios de comida y demás, sí refieren amenazas y extorsiones, aunque lo hacen veladamente. El pueblo conoce de los hechos, pero las víctimas se niegan a hablar y más a denunciar.
Testimonios recogidos por ZETA dan cuenta del propietario de unas albercas, a la entrada del Ejido Francisco Zarco, al que le pidieron “piso” y éste se negó. Un buen día le prendieron fuego a una de sus bodegas, donde guardaba varios vehículos antiguos de colección.
“Pero la gente se queda callada aquí, nunca habla”, expresó un vecino.
Saben también del propietario de un restaurante de mariscos, sobre la avenida principal. Presuntamente le querían “cobrar piso”, se negó y le quemaron el local, “después andaba que no lo calentaba ni el sol”.
“Antes les robó otro, el mentado ‘Maquenco’, pero esta gente tenía ‘parientes’ y se lo echaron al bato, lo balearon”, platican como si nada algunos pobladores. Otro caso: “Un chamaco que andaba robando siempre, los policías nunca le hacían nada, hasta que fueron y mataron al camarada. La gente ya se está haciendo justicia por su propia mano”.
El único supermercado ubicado en la zona, Lys, muy grande y con guardias, fue asaltado a mano armada recientemente. Se sumó a otros robos en casas y comercios. Una abarrotera se negó a dar detalles a ZETA por temor a represalias. En otro robo a casa habitación, gracias a las cámaras de video instaladas, lograron identificar a los ladrones, que se paseaban campantes por el pueblo, pero estos amenazaron a la familia si denunciaban. Además, acusan los vecinos que entre la Policía Municipal, Estatal y Ministerial “nada más se avientan la bolita” cuando remotamente alguien los procura.
“Y es que personas han sido amenazadas de muerte, denuncian, encierran al malandro dos o tres días, pero luego lo ven en la calle y están con el temor de si realmente va a cumplir la amenaza de matarlos. Menos denuncian”.
Recientemente pobladores atestiguaron el aseguramiento que hicieron agentes de la Procuraduría General de la República (PGR) contra un fuereño y achichincles que lo acompañaban. Se trataba de un secuestrador que estaba extorsionando a una familia del centro del país y lo hacía llamando por teléfono desde El Porvenir.
“Hay gente aquí que los cabrones vienen armados de Michoacán, los policías les tienen miedo, a uno le dicen ‘El Caborca’, ese güey ha amenazado a gente aquí”, confiaron fuentes extraoficiales.
Se quejan los lugareños que el auge turístico que vive el Valle de Guadalupe ha traído bonanza y ganancias para unos cuantos, políticos y vitivinicultores, pero no tanto para los pobladores originales, trabajadores de toda la vida y muchos de ellos con papeles e ingresos de Estados Unidos. No obstante, lo que sí ha contribuido, con la llegada de tanta gente nueva, es que se disparen los robos y asaltos y narcomenudeo “a lo descarado”.
“Hay mucha cara nueva en el Valle, viene mucha gente de Sinaloa, Durango, Oaxaca, a trabajar en el campo, pero muchos que vienen con broncas y ven que hay movimiento, negocios y toda la cosa, empiezan a delinquir”.
Respecto a “cobros de piso” o secuestros, un contratista oriundo de Francisco Zarco dice que “sinceramente, de eso no he sabido, pero sí hay muchos robos, y balaceras, el domingo pasado hubo una balacera”.
Sí, pero…
“Fue un exabrupto de la diputada”, manifestó por su parte Jaime Palafox, respecto a la aseveración de Claudia Agatón y el “cobro de piso” y extorsiones.
Palafox, presidente de Consejo Estatal de Productores de Vid en Baja California, aseguró a ZETA que nunca se ha presentado ni denunciado un evento de esos, y que hablando con cada uno de los vitivinicultores y restauranteros asentados en la “Ruta del Vino”, ninguno refirió haber pasado por esos problemas. Al margen que, externó, la diputada nunca se ha acercado con el sector, ni antes ni después de su declaración.
“Ha guardado silencio, no nos buscó para corroborar, nunca ha tenido acercamiento con nosotros, ni en la actual ni en la pasada Legislatura, su declaración parece más de tinte político o electoral”, consideró Palafox.
Aceptó el preocupante índice de inseguridad y delitos en alza como el robo, asaltos, “tienditas”, violencia, “pero el único delito que no se está registrando es exactamente el que escogió para declararlo públicamente”.
Por parte de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) Ensenada, su presidente Jorge Menchaca también desconoció que se esté dando tal delito, y compartió que durante la reunión de empresarios con mandos policíacos, se trató ampliamente el tema: “Ellos aseguran rotundamente que este tipo de situaciones se están dando en el Valle, por lo menos nadie ha reportado una situación de este tipo”.
“No pasa nada, solo hay robos y muertes, es un valle muy tranquilo”, ironizó Rosa González, residente de toda la vida en Francisco Zarco y quien ha sido víctima de robo en su casa varias veces. “Casi todas las noches se oyen balaceras y persecuciones”.
La secunda Juan Mata, quien reprocha que la inseguridad es evidente, pero no para los políticos, “obvio, bien sabemos que para ellos nuestro Valle es puro lucro e interés”.