Bueno, ni tan solo. Pero eso sí, dicen en el Ayuntamiento de Tijuana, muy mal acompañado. Así es como afirman se está quedando el alcalde Juan Manuel Gastélum Buenrostro. Refieren que ya solo escucha el hablar, los pensamientos y los consejos de tres personas. Una, la síndico municipal Marcela Guzmán, quien más que representar un contrapeso para la administración pública local, se asemeja a una funcionaria bajo las órdenes del presidente municipal. Y dos, a un par de muchachos que le han vendido la idea de la “modernidad” y la “vanguardia”: uno es su hijo, Juan Manuel Gastélum Rivera, y el otro es el hijo de la diputada Alfa Peñaloza, Víctor Lagunas Peñaloza. Entre los dos chavales planean con el alcalde las acciones a seguir, y especialmente a quién sacar del equipo. Por eso dicen que quien ya está casi fuera de la administración, es el director de Comunicación Social, Moisés Márquez, a quien los Juniors no respetan por su trabajo, y le aseguran al alcalde que ellos se encargan, especialmente en redes sociales. ¡Ah, raza!, dijera Gastélum.