De enero a julio de 2017, Baja California recibió 14 mil 480 millones de pesos por participaciones federales, lo que representó un incremento a la tasa anual de 22.6 por ciento, situándola como la segunda entidad que mayor aumento tuvo en este rubro, señaló la diputada federal, Nancy Guadalupe Sánchez Arredondo.
A pesar de ello, el Estado fronterizo se sitúa en el lugar 25, del índice de Competitividad Estatal 2016, del Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO), lo que significa un retroceso de ocho posiciones, debido a la falta de inversión pública y al dispendio del gobierno de Francisco Vega de Lamadrid, afirmó la legisladora priista.
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Hay un manejo inadecuado de recursos por parte de la administración de “Kiko” Vega, ya que, durante los 43 meses de su gestión, recibió 67 mil 928.9 millones de pesos, cifra superior a la que se entregó a José Guadalupe Osuna Millán y Eugenio Elorduy Walther, durante el mismo lapso.
“Me preocupa mucho que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) reporta que el gobernador del Estado no ha comprobado 300 millones de pesos y que Baja California no hizo una gestión eficiente y transparente del Fondo de Aportaciones de Entidades Federativas”, así como un desvío de recursos que superan los cinco mil millones de pesos, hasta 2016.
Añadió que es momento de exigirle al gobernador y a los diputados locales eficiencia en el gasto y responsabilidad, ya que el Paquete Económico de 2018 plantea que aumentará más la participación económica para estados y municipios, pero lo importante es que los gobiernos locales manejen con más responsabilidad las finanzas y que lo que llegue se destine a inversión pública y no a gasto corriente.
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Para el próximo año se espera una disminución en el Fondo de Impuestos sobre la Renta, no obstante, el incremento en participaciones federales oscilará en 12 por ciento; sin embargo, reiteró que estas participaciones no tienen etiqueta, por lo que es riesgoso porque no todos los estados son responsables y mandan el recurso a aquellos rubros que el Gobierno Federal recortó, sino que lo tiran al caño al destinarlo al gasto corriente.
