Vecinos del fraccionamiento Loma Bonita manifestaron su inconformidad ante la instalación de un mercado sobrerruedas sobre la calle Agua Azul, por los inconvenientes de tránsito que generaría en dicha vialidad y por la generación de basura que conlleva.
Si bien, la extensión del mercado sabatino no excedía los 20 puestos y se concentraba en un solo lado de la calle, estos se han ido incrementando cada fin de semana, aseguraron los afectados, por lo que, el pasado 10 de junio, realizaron una pequeña protesta, situándose en las cercanías de los puestos con una lona de rechazo.
Aunque estos comerciantes cuentan con permiso para instalar un mercado sobrerruedas, la ubicación no es correcta, señalaron, ya que el documento los faculta para colocarlo en la Calle Monte Elbruz, ubicada a unas cuadras del sitio. Añaden que el permiso que se les mostró, indica que los puestos podrán ser operados por personas de la tercera edad, personas con discapacidad o jubilados que no reciban pensión, cuando la realidad es que no reúnen dichos requisitos los locatarios.
Aunque la calle en cuestión es lo suficientemente ancha para que, al momento, no se haya causado ningún problema en el paso vehicular, temen que el mercado continúe su crecimiento, lo que podría perjudicar el paso de unidades de emergencia, de así requerirse.
Comentan los quejosos que, desde el primer fin de semana que se colocó dicho mercado, se acercaron al Ayuntamiento de Tijuana para informarse sobre el mismo y solicitar su remoción, a lo que no han recibido respuesta, por lo que temen un arreglo entre el señor Margarito Bañuelos, líder de dicho sobrerruedas con la Dirección de Inspección y Verificación. Concluyeron señalando que, a cada cambio de administración municipal, se enfrentan problemáticas similares.
Durante la protesta, se hizo presente el señor Alejandro Palacios, permisionario de dicho mercado para dialogar con los vecinos, exponiéndoles que su único interés es trabajar y que si estaban instalándose en una zona distinta a la señalada en el permiso, se debía “a instrucciones del dirigente -Margarito Bañuelos-”.
Comentó que, incluso, el permiso faculta para trabajar hasta tres días a la semana, limitándose la operación únicamente a los días sábado, para no generar mayor molestia a los vecinos.
Indicó a ZETA que, de reubicarse a la zona indicada, los residentes inconformes seguirían exigiendo la no instalación del mercado y aseguró que, antes de que el mismo comenzara a operar en la calle Agua Azul, se recabaron las firmas de conformidad correspondientes entre los vecinos.
Al respecto, la Dirección de Inspección y Verificación, a cargo de Luis Carreiro Galaviz, informó a ZETA que mandaría personal de dicha dependencia para que realice una inspección en la zona y revise los documentos exhibidos por los comerciantes, aplicándose las multas que correspondan.