El coreógrafo, bailarín y director de teatro colombiano, radicado en Estados Unidos, habla sobre su amplia trayectoria que incluye el proceso creativo de “Jersey Boys”, musical que se presentará en San Diego del 9 al 14 de mayo. “Mi talento es algo con lo que nací, pero también es algo que lo trabajé muy duro para poder llegar a donde he llegado”
“Jersey Boys” es uno de los musicales más conocidos con una temporada que en Broadway se extendió de 2005 a 2017. Concebida en el teatro regional de La Jolla Playhouse, en San Diego, esta propuesta recrea la historia de The Four Seasons, un grupo de jóvenes de New Jersey siempre identificado por el amplísimo rango vocal de Frankie Valli y ese sonido distintivo de rocanrol y balada pop que evolucionó con temas como “Walk Like a Man”, “Sherry”, “Big Girls Don’t Cry”, “Working my Way Back to You”, “Beggin” y, por supuesto, “Can’t Take my Eyes Off of You”.
Sergio Trujillo es el coreógrafo responsable de esos pasos inolvidables en escena que complementan la música, deleite para los sentidos que del 9 al 14 de mayo el público local podrá apreciar cuando esta producción se presente en el Teatro Civic, dentro de la cartelera de Broadway San Diego.
Trujillo, de origen colombiano, recibió por “Memphis” el Premio Olivier, y su trayectoria de meteórico ascenso se explica a través de sus creaciones. Por ejemplo, actualmente está comprometido con “Arrabal”, concepto definido por él mismo “como rock tango y “se lo dedico a todos los latinos”.
La puesta en escena se contextualiza en Argentina durante los años 1976 y 1983, cuando La Junta desapareció a 30 mil personas. Para contar la aventura de una joven de 18 años que vivió ese tiempo, se requirió la música de Gustavo Santaolalla (ganador del Óscar por la banda sonora de “Babel” y de “Brokeback Mountain”), el libreto de John Weidman, la coreografía de Julio Zurita y Sergio Trujillo quien además dirige la obra a estrenarse el 12 de mayo en el American Repertory Theatre (ART) de la Universidad de Harvard.
Mientras ese proceso se perfecciona, Trujillo, camino al ART, concedió una entrevista con ZETA a propósito de “Jersey Boys” y de su inagotable vena creativa.
— Eres colombiano, pero fuiste educado en Toronto.
“Sí, me fui desde que tenía 10 años para Toronto, Canadá, y me vine de Canadá para los Estados Unidos hace 27 años, o sea que ya llevo la mayor parte de mi vida viviendo aquí en los Estados Unidos”.
— ¿Estudiaste Ciencias en la universidad?
“Sí, estudié Ciencias, estudié Bioquímica, y después de eso me fui para la escuela de quiropráctica y fue durante el segundo año de mis estudios que decidí tomarme un sabático para bailar, para probar y venirme a Estados Unidos para ver si yo tenía lo que se necesitaba para ser un bailarín en los grandes escenarios de Broadway; y durante ese tiempo, durante ese año, me escogieron para mi primer show de Broadway, que fue ‘Jerome Robbins’ (1989), y eso fue lo que me cambió la vida”.
— ¿Cómo fue esa transición? De pronto es de un extremo a otro, ¿de dónde nace esa vocación artística en ti?
“Yo creo que uno nace con el talento, lo que necesitas es, pues, que se descubra el talento, y hay veces que los padres lo pueden ayudar a uno y lo guían a uno a que siga para que pueda alcanzar sus metas, sus sueños, y yo siempre fui muy de buenas porque mis padres me apoyaron para que escuchara mis instintos y reconociera mis sueños y mis ambiciones, que trabajara duro para conseguirlas.
“O sea que mi talento es algo con lo que nací, pero también es algo que lo trabajé muy duro para poder llegar a donde he llegado porque no es algo que uno dice ‘tengo talento’ y de un momento a otro le pasan a uno cosas, no; yo he trabajado muy duro para llegar a lo que he podido llegar”.
— Ya siendo bailarín en Broadway, duraste aproximadamente 15 años trabajando en musicales como “Guys and Dolls”, “Victor/Victoria”, y de ahí pasaste a ser coreógrafo, tu debut fue en 2005. ¿Cómo estuvo esa transición? ¿En qué momento el bailarín decide que necesita algo más para expresar su talento?
“Mira, yo creo que para mí siempre ser coreógrafo y director fue algo que tenía como parte de mis metas, y cuando yo estaba en Broadway o cuando trabajé en la película de ‘Chicago’, cuando estaba de bailarín asistía a otros coreógrafos famosos, el coreógrafo Rob Marshall, que fue el que dirigió esta película de ‘Chicago’, y también asistí al coreógrafo Jerry Mitchell, que es el coreógrafo de ‘Hairspray’, de ‘Kinky Boots’; y también asistí a otra coreógrafa que se llamaba Debbie Allen, que era la famosa profesora de la película ‘Fame’, o sea que la coreografía es otra cosa que requiere talento, pero también requiere tener experiencia y haber estudiado debajo de maestros, y yo tuve muy buenos maestros y es algo que yo sabía, cuando era bailarín, que en algún momento iba a dejar el baile e iba a comenzar a hacer coreografía. Fue durante mi último show que hice en Broadway, en 1999, se llamaba ‘Fosse’, basado en la vida de Bob Fosse, y fue durante ese tiempo que yo había decidido que ese iba a ser mi último show en el que iba a bailar, decidí que ya era hora y comencé a hacer mi carrera de coreógrafo”.
— Tu primera obra como coreógrafo fue “All Shook Up”, y ese mismo año hiciste la coreografía de “Jersey Boys”.
“Sí, sí, sí, sí. La coreografía que hice de ‘All Shook Up’ fue como coreografía adicional, los productores me trajeron para que arreglara el show porque ya ves que a veces pasan cosas que los shows de Broadway los hacen fuera de Nueva York, y cuando estaban en Chicago me llamaron para que pudiera arreglar el show porque no estaban muy contentos con la coreografía que estaba haciendo el coreógrafo que tenían en ese momento, entonces comencé a trabajar en este show y la coreografía la hice bien rápido; esa relación que tuve con estos productores me ayudó mucho, porque también me preparó para ‘Jersey Boys’ y para muchas otras oportunidades que tuve después de hacer ese show también”.
— Deteniéndonos un poco en “Jersey Boys”, ¿cómo fue el proceso para trabajar con la coreografía? ¿Retomaste la imagen de The Four Seasons, pero al mismo tiempo es una coreografía parte del espectáculo?
“Antes de comenzar los ensayos de ‘Jersey Boys’ había estado haciendo mucha investigación en la biblioteca aquí en Nueva York, vi videos, y también había estudiado mucho porque había tenido que hacer la coreografía para ‘All Shook Up’, que era basado en los mismos tiempos, entonces yo tenía un conocimiento sobre los bailes de ese tiempo, lo único era que los Four Seasons nunca bailaban, ellos nada más se paraban y tocaban, entonces lo que hice para ‘Jersey Boys’ fue crear una coreografía que es específica al show de nosotros y se toma libertades creativas, porque yo y el director Des McAnuff, con quien he trabajado muchos años, tomamos la decisión de si lo hubiéramos hecho como de verdad era los Four Seasons, el show nunca hubiera funcionado; entonces lo que yo hice fue un estilo, un movimiento, una coreografía que es inventada y creada para el show de ‘Jersey Boys’, para que tenga el show esa magia que hay en los musicales, que de un momento a otro el baile ayuda a levantar un momento, y pues excita al público y crea un momento de mucha sensación”.
— Esta obra surge en La Jolla Playhouse y tú has tenido trabajo ahí, ¿cómo nace esa colaboración?
“La Jolla Playhouse me encanta, es un lugar donde he trabajado muchas veces, llevo siete shows ahí, es uno de los teatros regionales donde desarrollan muchas nuevas obras que vienen para los Estados Unidos, para Broadway. Ahí hice ‘Memphis’ que también hice la coreografía y se ganó el Tony por el Mejor Musical; hice ‘The Wiz’, con Des McAnuff; hice otra obra que se llama ‘Shake, Shake from the Sun”, acabo de hacer ‘Freaky Friday’ y ‘Hands on a Hot Body’, o sea que tengo una muy buena relación con La Jolla Playhouse”.
— Cuando hiciste “Jersey Boys”, ¿te imaginaste el enorme éxito de la obra? Además tienes premios como el Tony, y el Olivier a lo largo de tu carrera, ¿visualizaste todo este éxito?
“Uno tiene sueños, yo creo que parte de los sueños es el trabajo duro para alcanzar mis metas, los premios vienen como otra cosa, como un bono, nunca pensé que iba a ganar estos premios. Yo creo que para mí es importante siempre seguir cada uno con sus metas, concentrado en el trabajo, pero en términos de nunca pensar que voy a hacer este trabajo y me voy a ganar un Tony, claro que es algo muy importante porque valoran el trabajo de uno, o también en la comunidad de teatro refuerzan el talento que uno tiene”.
— En 2012 figuraste en la lista de los “100 Colombianos más Destacados” por el entonces Presidente Juan Manuel Santos. ¿Qué significa para ti como colombiano recibir esa distinción?
“Pues muy orgulloso, porque siempre dentro de mí la sangre colombiana, la nostalgia de ser colombiano, es muy importante para mí que sepan los colombianos, también los latinos que uno se puede superar, que uno puede alcanzar metas en el arte, puede uno tener una carrera muy linda, muy próspera, como ser coreógrafo y director del teatro. Me parece que necesitamos más talento latino en la industria de Broadway y en el teatro, no nada más aquí en Estados Unidos, sino a nivel internacional, y quiero que sepan que eso es posible. La persona que esté leyendo esto, quiero que sepa que todo es posible, y es posible superarte en el arte”, finalizó Trujillo.