Ernesto Ruffo Appel fue el primer gobernador de oposición en México, lo que lo ha convertido en un personaje y en un, vaya, representante del cambio. El panista, hoy senador e integrante de la Comisión de Anticorrupción y Participación Ciudadana, ha sabido jugar su papel. Exhibe a los panistas, los critica por parecerse más al PRI que al PAN original, y denuncia corrupción. En esta ocasión, cómo desde la Secretaría de Hacienda, en contubernio con la Cámara de Diputados, se dejaron 51 mil millones de pesos de “excedentes” para que legisladores y partidos los repartan en municipios y gobiernos, con su consabido moche
El senador Ernesto Ruffo Appel se ha concentrado en ésta su primera labor legislativa en su carrera política, en los temas del combate a la corrupción. Explica cómo en el Sistema Nacional Anticorrupción (SNA) él fue el proponente inicial de que lo integrara un Comité de Participación Ciudadana. No fue fácil: “Es lamentable pero había gente dentro de los diputados que me borraban la iniciativa, ya cuando iba a inscribirse en la Oficialía Mayor del Congreso de la Cámara de Diputados, ¡ya no llevaba mi pedacito!”.
Recuerda también como en la Cámara de Senadores, de todos los partidos se opusieron a la Ley “3de3” (finalmente solo aprobaron declaración patrimonial y de intereses, y no hacerlas públicas), “los senadores fueron alegando que había intromisión en la vida privada y que ponía en riesgo la seguridad de las personas y de los senadores, pasaba en la del PRI y en la del (Partido) Verde, pero en la nuestra hubo algunos que firmaron un papel para adelgazar la ‘3de3’, y eso nos causó un atraso enorme”.
Se refiere a una veintena de senadores, entre panistas y perredistas, que iban por la rendición de cuentas total, apoyados por organismos de la sociedad civil y la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX): “Cuando llegaron con el montón de cajas con firmas, eso lo que provocó fue que se abriera, se lograra que la participación de la opinión pública se incluyera, y los que no querían que esto se modificara, tuvieron que irse acomodando.
“En aquel momento el presidente de la comisión era Pablo Escudero, el hoy presidente de la mesa directiva. Entonces, mil y una veces violó el proceso parlamentario dentro de la comisión, y lo hacía con anuencia de Roberto Gil Zuarth, presidente del Senado en ese momento. Entonces, entre Gil y Escudero se iban pasando el balón y se iban brincando reglamentos”.
El fiscal anticorrupción: no si Raúl Cervantes le va a dar órdenes
El decreto para crear la Fiscalía Anticorrupción se publicó en 2014, ese mismo año se emitió una convocatoria y se declaró desierta. En 2016 otro proceso se aplazó en octubre, después en noviembre, y en abril de 2017 de nueva cuenta. A la fecha, el SNA se ha instalado, pero el Senado de la República no ha elegido al fiscal anticorrupción. Ernesto Ruffo Appel no cree que estén las condiciones para hacer el nombramiento:
“El fiscal especial anticorrupción es un fiscal que pertenece al ámbito de la procuración de justicia, ahorita la procuración de justicia se llama PGR, y la PGR es un brazo del Poder Ejecutivo, o sea, del Presidente de la República. En la PGR ya hay fiscalías especiales, como la FEPADE, la de Delitos Electorales. Lo que quiere decir es que como está la Ley orgánica ahorita, el procurador o procuradora puede darle órdenes a un fiscal especial, en este caso al fiscal anticorrupción.
“El PRI ha estado entonces ahora, que quiere sacar ¡ya!, al fiscal especial anticorrupción, y vendió la idea a los medios de comunicación y a todo el mundo. Sí, pero está Raúl Cervantes, procurador general de la República, y a él le va a reportar. Y el que quedó como candidato, uno de los más nombrados y acreditados, es un César Chávez. Era el fiscal especial de Asuntos Internos en la PGR, y le pidieron que se retirara porque fue el que descubrió los malos manejos de otro fiscal, que fue el que manejó mal el asunto Ayotzinapa, y como los investigó por dentro, se dio cuenta que había falseado averiguaciones, y entonces corrieron al otro y a éste le pidieron que se fuera. Entonces el mismo Chávez dice: ‘Yo tengo muchas ganas de ser fiscal especial anticorrupción, pero no bajo el esquema que está allí, ahorita, porque no va a funcionar’”.
“La PGR bajo el mando del Presidente no funciona”
Para Ernesto Ruffo Appel, antes de nombrar un fiscal anticorrupción, primero debe modificarse el esquema en el que convergen los temas de seguridad:
“Ahorita estamos hablando del universo de las estructuras que componen el Sistema Nacional Anticorrupción, pero hay otro universo que se llama Sistema Nacional de Seguridad Pública, donde anda ahorita la Ley de Seguridad Interior, que es la de los militares. Si tienes esos dos universos y los sobrepones, hay una interjección entre los dos sistemas, que se llama procuración de justicia, entonces dices ¡ah, caray! Si quieres que las cosas funcionen adecuadamente, resulta que el gozne, como las bisagras ahí de la puerta, lo que hace que todas las demás instituciones funcionen es que hay un eje común, que es Procuraduría General de la República, nosotros decimos ‘la PGR cómo está’: bajo el mando del Presidente de la República, ¡pues no funciona! Si los papeles van mal integrados, sesgados, hechos con una intención o algo, ¡pues todo lo demás ya no va a funcionar! Por eso es que hay impunidad en todas partes”.
En ese escenario lo que refiere el senador es la necesidad de darle independencia, autonomía a la PGR o Fiscalía General. De hecho al momento de la discusión de las Reformas Estructurales propuestas por Enrique Peña Nieto, acordaron que habría un fiscal general de la República autónomo, respecto del Presidente de la República.
El panista explica por qué ello no sucedió:
“En la maniobra de los papeles le metieron a la reforma un transitorio, el número 16 del Artículo 102 constitucional. Dice que cuando se haga la reforma legal, que ya la tanda que sigue es legal, que al momento de ya celebrar la nueva Ley orgánica del fiscal general autónomo de la República, el que esté en ese momento de procurador se vuelve fiscal general por nueve años, pues qué chistosos, ¿no? Yo lo que opino de cálculo especulativo, es que lo que están haciendo los del PRI es una protección de nueve años al gobierno de Peña Nieto”.
De hecho, en noviembre de 2016 y ante las críticas, el Presidente Peña envió una iniciativa para modificar ese transitorio, donde descarta que al entrar la Ley y de automático quien sea procurador general de la República se convierta en fiscal autónomo, pero permitiendo que quien ostente el cargo, pueda competir por ser el fiscal. Esa iniciativa no ha sido aprobada. Aun así, para Ruffo, el meollo del asunto está en que la elección del fiscal recae en el Senado, “pero el Senado quién lo domina ahorita: el PRI y el Verde. Entonces, es atole con el dedo”.
En “la maldita Junta de Coordinación Política” se reparten todo
Lo que debe hacerse, reflexiona el ensenadense, es transparentar el procedimiento de selección del nuevo fiscal, algo que en el Senado no se ha hecho. “Que se diga cómo se va a hacer el procedimiento para seleccionar al nuevo fiscal, como lo hicimos para elegir a consejeros del INAI, que hubo trampita también, porque ahora Pablo Escudero es el presidente del Senado, entonces dejó la titularidad de la Comisión Especial Anticorrupción y Participación Ciudadana y pusieron uno nuevo, Héctor Yunes, el candidato perdedor al gobierno de Veracruz, y ¡ah, otra vez el montón de maniobras!, nos ponen a participar a los integrantes de la comisión, a calificar, a hacer nuestros tabuladores y luego de repente pasa una conclusión el presidente de la comisión, diciéndole a la Junta de Coordinación Política que todos son idóneos. ¿Y para qué me pusiste a calificar, para qué me pusiste a estudiar? Pero ya mientras te marearon, y como en la Junta de Coordinación Política quien preside ahorita es nuestro coordinador del PAN, ¡ay, Dios mío! Acaba de pasar ahorita lo de esta muchacha, Paloma Merodio, digo yo, porque lo que provocó, entonces hay un asunto de fuerzas, de mañas, de intereses, de cañonazos de 50 mil pesos, dijo el General Obregón… ¡no, no, no!”.
Los nombramientos en el Senado, amplía el senador, “van a una Junta de Coordinación Política, y ahí es donde hacen negociaciones; por más que hagas el esfuerzo de calificar con transparencia, con criterios académicos o de experiencia, llegas a la maldita Junta de Coordinación Política y ahí se reparten PRI, PAN, PRD…”.
Elegir primero al fiscal general de la República
Ahora Ruffo, con los senadores Víctor Hermosillo, Juan Carlos Romero Hicks y Marcela de la Torre, y actores sociales como Gustavo de Hoyos Walther, presidente nacional de la COPARMEX, realizan foros para que haya claridad en la opinión pública, “es esencial que primero se defina el asunto de la Fiscalía General Autónoma de la República”.
No le teme a la mayoría priista en el Senado, “hemos estado abriendo procesos, ahora que hicimos el proceso de selección de los candidatos para la Fiscalía Especial Anticorrupción, no la queremos nombrar todavía, pero sí estamos haciendo el proceso de selección. Lo que queremos es que la opinión pública entienda que no se trata específicamente de la Fiscalía Especial, que es muy importante, pero yo ya le puse un acrónimo a la Fiscalía Especial Anticorrupción, la FEA, porque pues pobrecita fiscalía, la hemos jaloneado para todas partes y el PRI trata de ocultar con esa discusión la importancia de hacer bien la Fiscalía General Autónoma de la República. Esa sí es la estrategia del PRI, y luego nos avientan el asunto de la Ley de Seguridad Interior y la quieren sacar ya, cuando es parte de un sistema”.
Ruffo insiste en que no debe darse el nombramiento de fiscal anticorrupción, “si no tienes la estructura sustantiva del centro de todas estas leyes, pues estás construyendo la casa sin cimientos”.
Ley de Seguridad Interior, “sí necesitamos a los militares en seguridad pública”
Son tres las iniciativas para la Ley de Seguridad Interior, que entre otras cosas, tiene la intención de regularizar la participación del Ejército Mexicano en temas de investigación y operativos que corresponden a corporaciones e instituciones civiles. “Hay una de Gil Zuarth, hay una de Jorge Ramos, otra de César Camacho, del representante del PRI en la Cámara de Diputados; hay una parte preocupante ahí en esa Ley de Seguridad Interior: propone la posibilidad que los militares intervengan directamente con un ciudadano a criterio de muchas circunstancias, pero ya no hacen como básico que medie una orden judicial”, explicó Ruffo, para después reflexionar los antecedentes: “Siempre ha sucedido, dondequiera tenemos retenes militares, te paran y te preguntan cosas, y no deberían si vas a un asunto muy preciso, porque la única forma que te pueden detener es mediante una orden judicial, claro, todos somos ciudadanos tranquilos, le tenemos un gran respeto al Ejército y a la Armada, y te preguntan y ni te molestas, ni nada por el estilo. Y es más, sabes que es por el bien, porque confías en ellos para que se imponga el orden, pero de eso que es un asunto de trato cortés y tienes disposición, otra cosa es que te aparezca una Ley y ya no quedan tan claras tus Garantías Individuales. Todo eso se tiene que revisar por el propio bien de los militares, pero sí los necesitamos en el equipo de operación de las cosas por la seguridad pública, porque esencialmente lo que los militares deben hacer es cuidarle las manos a los policías. Todo esto es el asunto que nace en esa piñata de cosas con la Fiscalía General Autónoma de la República, y se van todas estas ramas, por eso es que es tan importante”, considera el ex gobernador de Baja California.
Origen y forma de la corrupción de los moches
Hablando de cañonazos de 50 mil pesos, negociaciones políticas e imposiciones, a la pregunta de si hay corrupción en el Senado, Ernesto Ruffo Appel no lo duda. Responde rápido: “Absolutamente que sí. Es lamentable lo de los moches, es un cochinero, es una traición a la República; así está”.
El asunto de los moches -dice Ruffo- inició en 1997, cuando por primera vez el Presidente de la República -en ese entonces Ernesto Zedillo- no tuvo la mayoría absoluta del Congreso de la Unión. El PRI perdió las dos terceras partes de las dos cámaras, “eso obligó de manera automática, a que el Presidente bajara del pedestal del absolutismo y autoritario, a las fracciones parlamentarias de los otros partidos a buscar entendimiento y acuerdos. Así se empiezan a dar: los partidos políticos le empiezan a negociar al Presidente, a pedirle cosas. Empiezan muy sanitos, ‘bueno -Presidente-, está bien, pero háganme la carretera tal y el puente tal, porque mi gobernador de tal parte…’. Tuvo que empezar a ceder situaciones presupuestales el Presidente, el caso concreto es que se hace a través de Hacienda. Pero ahorita es algo ya totalmente inaceptable. ¿Qué es? Hacienda sabe que el promedio del barril de petróleo va a valer 43 dólares, pero manda el proyecto a 40, y le dice entonces a la Junta de Coordinación Política, a los diputados, o se lo dice al coordinador del PRI. No sé a quién exactamente se lo digan, pero es ahí en la Cámara de Diputados”.
— ¿Qué les dice?
“’Súbele 3 dólares’. Entonces, de 40 dólares, los diputados dicen ‘no es cierto, va a valer 43’. Entonces por el simple hecho de que le subieron 3 dólares, por un millón 900 mil barriles al día, pues se hace una polla de dinero bastante grandecita, entonces, ese montón de dinero no está contemplado en el presupuesto”.
— Es post aprobado, una negociación posterior a…
“Post propuesta, porque Hacienda te manda una Ley de Ingresos, ahí es donde está el asunto del petróleo, y luego te manda una Ley de Egresos, que es el presupuesto, y allí dice cómo se va a erogar el dinero que viene de la Ley de Ingresos; pero la Ley de Ingresos viene calculada a 40 dólares, entonces los diputados dicen ‘no, en la Ley de Ingresos le voy a subir 3’. Aparece el montón de dinero y aquí no tiene destino, ¿me entiendes? Llegó la propuesta del Presupuesto de Egresos ajustada a la Ley de Ingresos, pero como le aumentaron 3 dólares, de repente hay un montón de dinero…”.
— Hay un incremento en ingreso que no está planeado ni etiquetado…
“Sí. Yo por eso me traje mi iniciativa ¡ay, hace más de un año! Dije: cuando aparezcan demasías, acredita el dinero a la deuda pública, ah, ¿pues te apareció ahí? ¡Ahora paga deuda pública! Y no… no. Lo que hacen es que viene el Ramo 23, ahí está una de las maneras como esto sucede. En el Ramo 23 viene lo que se le llama el concepto de Infraestructura Municipal, entonces esa parte la dividen en deporte, en cultura y en pavimentación; pues a este rubro general, para este año 2017, del montón de dinero que vino de los 3 dólares del petróleo, 51 mil millones de pesos fueron a dar ahí”.
— Al Ramo 23…
“Y aquí es donde empieza lo más malvado: primero, la manera en como lo está haciendo Hacienda es perversa, es una perversidad, está manipulando, corrompiendo el trabajo de los diputados. Entonces en la Junta de Coordinación Política dicen ‘Okey, 51 millones de pesos para el caso del PAN, ¿cuántos diputados tienes?’. Pues 109. ‘Okey, 109/500 en total, pues es tanto’ -es un porcentaje-. ‘Okey, ese porcentaje se lo aplicas a los 51 mil millones de pesos’, y entonces ese montón de dinero que el grupo parlamentario del PAN diga cómo lo va a proveer, que son más o menos como 9 mil millones de pesos, algo así por el estilo, es mucho dinero. Nueve mil millones de pesos”.
— Para repartírselo.
“Bueno, espérate, lo que sucede es que ya están en el Grupo Parlamentario del PAN, ahí están todos los diputados, y ahí el Grupo Parlamentario PAN dice ‘números más, números menos, a cada diputado le toca asignar’, porque no es dinero en efectivo, ¿eh?, estás hablando de puros números en papeles; le toca asignar 30 millones de pesos, entonces, 30 millones de pesos por 109, son como 3 mil 300, ¿no? Ahorita te dije que eran como 9 mil, ¿verdad?”.
— Y eso es nada más lo del PAN.
“Nueve mil son del PAN, pero los 30 millones por diputado, ya cada diputado va y dice…”.
— En qué, o a dónde quiere que se reparta…
“Exactamente. Entonces, no es dinero en la bolsa, es una capacidad presupuestal. Entonces un diputado dice ‘Ay, yo traigo 30 millones, okey, entonces voy a ir con mi presidente municipal y se los voy a dar’. Ese es un diputado bueno, transparente, o sea, no condicionó la entrega del recurso, pero hay otro tipo. Otra clase de diputado que va y como si fuera un remate, se para por ahí y empieza a decir ‘yo tengo 30 millones de pesos, ¿quién quiere la asignación? ¿Quién da más?’, y ahí es donde vienen los moches. Y ya es un lío entre el presidente municipal y el diputado, y obviamente en medio está una constructora. Bueno, pues esos son 3 mil 300 de los 8 mil, 9 mil millones de pesos. Lo que queda, queda a disposición del grupo parlamentario, y llegan los gobernadores y también quieren.
“Toda esta faramalla que estoy platicando, bueno, (sucede) en el PRI, en el Verde, en el PRD, en los 500 diputados, ¿no?, pues consuelo de muchos, ¿verdad?”.
Haciendo las cuentas de lo revelado por el senador Ruffo, significa que tan solo al Partido Acción Nacional, de los 51 mil millones de pesos de “excedentes”, le corresponden 10 mil 710 millones de pesos, a esa suma se llega considerando que los 109 diputados del PAN representan el 21 por ciento de la Cámara, y el 21% de 51 mil millones, resulta en esa cantidad.
De ello, dice Ruffo, el acuerdo en el PAN es “repartir” 30 millones de pesos a cada diputado para que cada cual lo “distribuya” en su Estado o municipio; es decir, en total a los diputados panistas les conceden 3 mil 270 millones de pesos, y restan 7 mil 440 millones de pesos para que la cúpula del Grupo Parlamentario lo asigne a los gobernadores de su partido.
Recurso que cada legislador o grupo parlamentario decide a cual gobierno o municipio asigna, sin más reglas que cumplir con los programas o proyectos seleccionados para invertir el dinero producto del excedente.
— ¿Cómo llega la corrupción de los moches al Senado?
“El Senado no tiene operación legal en esto”.
— Es adjudicar recursos…
“Lo que sucede es que los coordinadores de los senadores empiezan a hablarle al coordinador de los diputados y empiezan a decir ‘Oye, aquí tenemos un senador que está dando muchos problemas, ayúdame a controlarlo’, y lo mandan para allá. En el Senado no se manejan partidas de ingresos y de egresos, eso no es facultad del Senado, excepto aprobar, ratificar o modificar en su caso la Ley de Ingresos, entonces ahí siempre tenemos a un grupito de senadores, en el caso del PAN, que también pasa en el PT, que votan a favor de la Ley de Ingresos, y yo ya les digo que somos del GAPEF, del grupo de apoyo al Poder Ejecutivo federal. Y eso viene para mí desde el ‘haya sido como haya sido’, ahí se hizo una especie de acuerdo con el PRI, allá entre que salía Fox y entraba Felipe, y el voto útil y la noche que no dormimos, pero que nomás fueron 300 mil votos de diferencia. Y ahí hubo un acuerdo, yo creo”.
— Y Manlio Fabio Beltrones estaba como representante del PRI, no había presidente.
“Exacto, o sea, o había un parcial presidente, había un cogobierno, entonces por qué ahora resulta que Fox hace ciertas declaraciones, y ahora lamentablemente, la gente que le es leal a Felipe dentro del Senado, son los que votaron por Merodio (Paloma, como vicepresidenta del INEGI sin tener la experiencia para ello), está bien clara la película”.
El sistema ya se agotó
“El sistema político revolucionario, la manera como encontró la estabilidad y la pacificación fue la corrupción. Bueno, pero en la Revolución eran un puñado. Luego vinieron los hijos e hicieron los grupos corporativos y metieron a los sindicatos y fue creciendo la bola, y sexenio tras sexenio se empezaron a comer el erario y el primer reflejo de que esto se estaba agotando fue el 68. Y ya entonces se dan cuenta que tienen que seguir repartiendo y echan a andar la maquinita del dinero, por eso empezaron las devaluaciones, para suerte del sistema este corrupto sube el precio del petróleo y ahí es donde empiezan a agarrar, pero ahora, en este sexenio, cae el precio del petróleo, entonces qué hacen, pues súbele a la gasolina, súbele al IVA en la frontera, porque traen un problema de finanzas públicas, de finanzas de un sistema político que no le interesa el interés público más que el propio sostenimiento del poder. Entonces por eso, a sabiendas de que les iba a ir como en feria con el aumento del precio de la gasolina, le suben a la gasolina porque necesitan el dinero para seguirle pagando a los incondicionales o a los sistemas estos de subsidio que tienen, o las prestaciones sindicales. Es el sistema son mercenarios de un sistema político, por eso es que el PRI obtiene siempre cuando menos el 30 por ciento de la votación, pero es el reflejo de toda esa gente que vive y depende del erario”.
— ¿Por qué cuando el Partido Acción Nacional estuvo en la Presidencia de la República no cambió ese sistema?
“Porque Acción Nacional se encuentra con todas esas estructuras y no domina el Congreso, entonces quieres tomar decisiones y no puedes, así que pues si acaso el que pudiera, pudiera hacer bastante fue Fox, porque llegó limpiecito, pero no supo qué hacer, llegó enamorado y se acabó el asunto; y Felipe es fruto de no sé de qué acuerdos, que los calculo, no estuve ahí presente, pero por dondequiera los hechos me gritan que se pusieron de acuerdo”.
— ¿Cómo se frena a los gobernadores?
“Tiene que haber supervisión ciudadana, es lo que no ha habido; nuestra cultura, nuestra práctica política es apoyar a alguien y esperar que nos cumpla, y eso no funciona porque ese alguien llega y se pone a robar, y ésa ha sido la historia de México”.
— Para frenar la corrupción, ¿la solución es la participación ciudadana?
“Y transparencia. Es como cuando… ahora ya de perdida te gritan cuando te brincas la cola. La gente empieza ‘hey, hey, cola, cola…’, eso es una muy buena señal, porque lo que está, cuando ves, te das cuenta que alguien trata de abusar y pues le gritas, tan simple y sencillo.
“Que la ‘3de3’ sea Ley, que todo aquello que nos lleve a que las cosas sean como ponerlas dentro de una vitrina y haya gente que quiera estar observando la vitrina y levante el dedo y diga ‘hey, aquí está pasando una anomalía’. En ese momento vamos a empezar a enderezar las cosas, pero tantos años que han pasado, pues todo mundo se contentaba con que te tiraban con algo, te compartían algo y te quedabas calladito, el asunto es que ahora no alcanza, ya no tienen con qué tirarte, y entonces todo mundo ha de decir, ¿y ahora? Pues no nos queda más que ser ordenados, o sea, yo digo, bendita crisis, qué bueno que se cayó el precio del petróleo porque nos va a forzar el problema fundamental que tenemos, que es político”.
