- La sociedad está agraviada por los graves efectos de la política privatizadora del municipio 2016-19 en el área de urbanización, alumbrado, educación, salud, sistema de limpia, y seguridad.
- Un gobierno como el de Tijuana, sin autoridad moral y crisis política además de organización debería ser austero y elementalmente decente. La sociedad rechaza el oportunismo y derroche por contenidos e imágenes falsas. La prensa por salud social y moral debe ser independiente del Estado. La estructura municipal está en crisis con graves carencias, en aspectos de desarrollo de vivienda digna, en tales condiciones no deben ni puede darse el lujo de ingentes presupuestos en publicidad, promoción de funcionarios con ambiciones futuristas de carrera política pagada con recursos públicos.
- Por ello la publicidad y comunicación debe reducirse a lo indispensable, ser creativa, con imaginación. Aplica hacer más con menos. Se debe buscar el sentido social, el apoyo y solidaridad de los medios de comunicación con un gobierno que adopte la decencia y austeridad, como prioridades.
- Congelación del impuesto predial o en su caso acreditación del diferencial pagado y aplicado en 2017 para abonar el pago del periodo 2018. La ciudad de Tijuana y el país están vapuleados por decisiones centralistas generalmente ineficientes, absurdas, aberrantes, que orillan a constantes adversidades económicas: el incremento del IVA al 16%, la devaluación de la divisa mexicana, la reforma fiscal, el incremento a energéticos: diésel, gas, gasolina y electricidad, el proceso inflacionario generado por el gasolinazo, el visible desempleo por huida de industrias, la migración extraordinaria y la llegada de deportados y encima de ello un incremento al impuesto predial es el colmo que ocasionó protesta nunca vista en los 5 municipios.
- Los ingresos municipales en el cobro del impuesto predial pueden llegar a su nivel más crítico ante un gobierno maniatado y descalificado moralmente para cobrar lo reclamable, sin antes poner orden en su casa.
- Seguridad pública, corrupción y brutalidad. El cuerpo de la policía en todos sus niveles, por definición debería ser humanista y servir a la sociedad, aportar a su protección. A los agentes de policía de la ciudad a menudo se les teme más que los delincuentes por conductas criminales. A juicio de la ciudadanía, requieren tener perspectivas de futuro y profesionalizarse, formación académica, inversión en educación y formación. Demandan un perfil profesional especial por su permanente relación con el pueblo. Lejos de eso, su falta de ética, tacto, preparación, convicción en el servicio lastima, los quiebra moralmente y se someten al crimen organizado.
- Con un 98% de impunidad en homicidios dolosos, no hay una policía científica que tenga prestigio. Es un problema de lo más grave que no se ataca más que despidiendo a personal en servicio, pero sin mayores acciones y consecuencias de recuperación de lo robado. La academia local, las instituciones educativas de educación media y superior deberían comprometerse desde los altos niveles a contribuir a formar nuevos perfiles de agentes de seguridad pública como carrera profesional con policías.
- Finanzas municipales en crisis DE DEUDA con un primer lugar del municipio más endeudado del país con $2,547 millones de pesos. Por ello antes de recurrir al re-financiamiento, evitar inflar los niveles inmanejables de deuda pública de la ciudad, se deben desarmar y eliminar la burda maquinaria establecida para fomentar el sistemático rompimiento de la ley, el desvío de recursos que en números gruesos asciende a más de 80 millones de dólares con cifras de 2014.
- Agua y vida para los 5 municipios y el campo. La prioridad es la vida, el agua como derecho humano. La defensa de un bien estratégico para el municipio de Tijuana con intervención de sus autoridades en el mandato de disponer con mínimos de servicio ante la Comisión Nacional del Agua, para garantizar en el largo plazo, del abasto a tres municipios de la costa de la cuota de agua del Río Colorado. Exigimos un pronunciamiento del cabildo de RECHAZO al abuso del agua de la Cervecería del Grupo Modelo.
- No a la privatización y abandono del sistema de limpia que trabaja al 35% de su capacidad. En un centro de recolección de 20 unidades, sirven solo 7. El resto está en los talleres por no querer pagar las reparaciones. ¿Cómo es posible que Gastélum emplee 143 millones de pesos para rentar camiones y no comprar unidades nuevas para ese servicio básico? ¿Cómo explican esa decisión sospechosa de beneficiar a privados y demostrar viejos compromisos de privatizar la recolección de residuos sólidos?
Héctor Ramón González Cuéllar
Correo: vistahermosa.ac@gmail.com
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