Con sentido del humor pero dejando una gran reflexión Susana Alexander acompañada de Mariana Garza, Sophie Alexander Katz y Javier Díaz Dueñas, presentarán en Tijuana en el teatro del CECUT la obra “Instrucciones para una Muerte Feliz”
Hablar de la muerte es un tema que a casi nadie le gusta abordar, y menos si es entre familia, sin embargo, ahí está en cada uno de los seres vivos, en el planeta entero. Ella espera sigilosa ese momento en que se llevará al ser querido, al amigo, al conocido e inclusive, a uno mismo, algunas veces te avisa, otras llega intempestivamente, sucede por enfermedad, accidente o de manera natural.
Todos algún día pasaremos por ese trance, y es precisamente antes de que suceda, que la puesta en escena “Instrucciones para una muerte feliz” presenta en la historia de una madre que prepara a sus dos hijas y marido antes de que le llegue la muerte.
“Siempre está con nosotros y a todos nos va a pasar. Es una obra inglesa con un sentido del humor inglés, la gente se ríe mucho, aunque sea la muerte, pues la obra se llama ‘Instrucciones para una muerte feliz’ y la gente me pregunta, ‘oiga y cómo uno se va a morir feliz’; pues para empezar hay que buscar la tranquilidad espiritual por dentro y la otra cosa es dejar todo como para que uno se vaya con tranquilidad, es dejar las cosas bien, a los vivos que uno les va a dejar, dejar todo bien arreglado”, expresó Susana Alexander en entrevista vía telefónica con ZETA, quien hace el personaje de Mayra, una madre que le detectan cáncer en los huesos y decide planear su funeral.
“Esta señora planea su funeral así como mucha gente planea los 15 años, la boda y todo eso, ella planea su funeral, por qué no. La muerte es cuando uno se gradúa de la vida, y ésta es una graduación. Es lo que hacemos en esa obra. Somos una familia, yo tengo a mi marido (Javier Díaz Dueñas) y dos hijas (Mariana Garza y Sophie Alexander Katz) y yo lo que estoy tratando de hacer antes de morir y morir tranquila y feliz es unir a mi familia, eso es verdaderamente lo que me importa”.
Asegura que más allá del tema es una obra que dejará más de una reflexión y que el objetivo principal radica en unir a la familia.
“Es una obra linda, bonita, la gente sale contenta, a pesar del tema, la gente sale a hablar con su familia, después de verla, se dan cuenta que no es mala idea planear tu funeral, no es mala idea pedir cosas que uno quiere o no quiere. Por ejemplo, a lo mejor hay gente que no le gustan las flores blancas que siempre ponen, esas flores que huelen a muerto, a mí no me gusta tampoco”, dice la también directora.
“En mi personaje, dice que flores no, que no le avienten flores cuando la estén enterrando, le parece muy vulgar y feo, que no digan ciertas cosas, y así mi personaje va diciendo las cosas que quiere y que no quiere el día de su funeral. Entonces se convierte en una cosa cotidiana, vemos la muerte con esa cotidianidad y no con ese susto de que ‘no hay que hablar de eso’, que es de mal gusto; por qué no, de eso se trata ‘Instrucciones para una Muerte Feliz, una hermosa comedia inglesa”.
Con las actuaciones de Mariana Garza, Sophie Alexander Katz y Javier Díaz Dueñas, Susana Alexander también la dirige y se encargó de la traducción.
“Es una obra indirecta y tiene ese humor que es fino, muy particular, delicado, divertido. Que nos dice que tenemos que vivir el aquí y el ahora, pues no sabemos cuándo va a pasar este evento (la muerte), entonces, debemos de estar bien con todos, no a esperar cuando se muera la gente, sino aquí, ahora, en este momento tratar de ser lo mejor seres posibles y todo lo demás porque no sabemos cuándo puede suceder una cosa así”.
Con más de 50 representaciones, “Instrucciones para una Muerte Feliz”, llegará a la Sala de Espectáculos del CECUT con dos funciones, 7:00 y 9:30 pm, el miércoles 5 de abril. “Yo estoy comprometida con el público, siempre quiero que cada vez que monto una obra digo, ‘ojalá esto le interese a la gente’ porque creo que es importante lo que dice esa obra, yo no busco la obra para lucirme en un papel, sino lo que dice la obra en general es la base y que la gente se lleve algo que pueda cambiar su vida”, finalizó la actriz.
Por su parte Mariana Garza, funge como la hija mayor de Mayra, su nombre es Helena, una mujer centrada, muy apegada a sus papás, que está bien con todos y con la vida, que cuando se entera de que su mamá tiene cáncer terminal y le queda entre 6 a 9 meses de vida, su actitud toma un giro de esa constante manera de conducirse.
“Esta obra trata de cómo reeducarnos sobre nuestra percepción de la muerte, que es un hecho sobre el cual todos vamos a pasar y que simplemente entre más natural lo tomemos, puede ser de mayor beneficio para todos”, explica en entrevista con ZETA.
También está Gina, la hermana menor, quien es la oveja negra de la familia que al enterarse de la situación, transforma su manera de ser y se une más a su papá, Helena y su mamá.
“Es una obra con mucho mensaje, cuyo personaje principal es la muerte. Finalmente es un hecho que nos va a suceder a todos, que nadie se salva, pero lo que sí queremos todos (al tratar el tema y llevarlo al teatro) es que sea un momento lo mejor para uno, y para la familia, a quienes queremos. Es un tema difícil de abordar, pero vas a ver la obra y una vez que se termina, ahí inicia la tarea de la obra, donde la gente se va a casa y decide comenzar a hablar sobre el tema y que cuando nos toque a cada uno, les digamos cómo queremos que suceda, como queremos que sea nuestro funeral”.