Con vista al mar, embarcadero propio y en una de las zonas más exclusivas de Miami, Florida, la dirigente nacional del PRD, Alejandra Barrales Magdaleno posee un departamento con costo de un millón de dólares, el cual ocultó en su declaración 3 de 3.
El 1 de febrero de 2016, Barrales Magdaleno adquirió el inmueble a través de una triangulación, ya que una semana antes de la compra, conformó la empresa Maxba, a cuyo nombre está registrado el departamento. Esta compañía es, a su vez, propiedad de Albama Transportes Sociedad Anónima, cuyo 99 por ciento de sus acciones está a nombre de la dirigente partidista.
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El bien fue vendido por 997 mil dólares, de los cuales 700 mil pesos fueron pagados en efectivo, dinero obtenido de su “cuenta personal de ahorros”, según Barrales. El resto del pago quedará cubierto a través de una hipoteca de 30 años.
Además, señaló que los pagos de dicho crédito serán cubiertos con las rentas del inmueble, pues “nunca contempló habitar dicho departamento”.
Esta transacción se concretó cinco meses antes de que la ex senadora asumiera la dirigencia nacional del PRD.
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Barrales Magdaleno acusó en un principio a la televisora Univisión, la cual dio a conocer la información de la adquisición del condominio, de dar un “tratamiento doloso y distorsionado” a la información sobre el departamento, pues aseguró que el bien sí se encontraba dentro de sus declaraciones, tanto en anteriores cuando ocupó cargos como secretaria de Educación en el gobierno de la Ciudad de México y como senadora.
Sin embargo, después admitió “existe una inexactitud acerca de la información ahí contenida que pudiera generar una interpretación que no guarda relación con mi voluntad de cumplir con el fin que se persigue al hacer públicos los datos ahí requeridos”.
Por lo que pidió añadir al documento “los artículos de incorporación de Maxba Development Inc. a efecto de que se pueda corroborar la vinculación de ésta con Albama Transportes, S.A. de C.V.”
Tanto el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) y Transparencia Mexicana han promovido la rendición de cuentas a través de las declaraciones patrimonial, fiscal y de intereses mejor conocidas como 3 de 3.
Al reconocer ser la propietaria del departamento, la dirigente perredista aseguró que el inmueble fue adquirido con el producto de su trabajo de más de 30 años. Antes de iniciarse en la función pública, Barrales Magdaleno se desempeñó como sobrecargo, de donde saltó a convertirse en la lideresa de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación de México.
Entre los cargos que ha desempeñado, además de diputada en dos ocasiones de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, está el de secretaria de Desarrollo Social en el Michoacán y secretaria de Turismo del Distrito Federal.
No es la primera vez que un dirigente partidista es expuesto por sus lujosos bienes en Estados Unidos. Apenas en noviembre, el líder nacional del PAN, Ricardo Anaya fue objeto de una investigación periodística que dio cuenta de un estilo de vida en el que gastaba alrededor de 4 millones 500 mil pesos al año. Esto a pesar de que en la declaración 3 de 3 del panista, tanto sus ingresos como los de su esposa, se estimaban en 2 millones 600 mil pesos al año.
Además de la renta de una residencia en una exclusiva zona de Atlanta, Georgia, donde viven su esposa y tres hijos, se estimó también el costo de la colegiatura de sus hijos, que rondan el millón de pesos al año, más gastos de manutención e incluso, los vuelos que el político toma cada fin de semana para visitar a su familia.
Ahora el PAN y el PRD no solo coinciden en la alianza que formaron para los comicios de este año en la candidatura a la gubernatura de Nayarit y las pláticas que sostienen para unirse en las elecciones de la Ciudad de México, el siguiente año. También están las lujosas propiedades de sus dirigentes en la Unión Americana.
