Un grupo de inconformes de Tijuana llevó a cabo la Primer Asamblea Municipal Deliberativa, que entre otras cosas tiene la intención de definir la ruta a seguir que tendrá el movimiento antigobierno.
Inicialmente, la sede del evento era la explanada de Palacio Municipal, no obstante las condiciones climatológicas obligaron a las agrupaciones a trasladarse a un edificio de la calle José María Larroque de la colonia Adolfo Ruiz Cortinez.
La convocatoria se extendió a todos los grupos de la sociedad tijuanense; al evento asistieron alrededor de 70 personas. A quienes hicieron acto de presencia les fue entregada una serie de documentos para presentar la esencia del encuentro, los principios del movimiento, objetivos, plan de acción y el catálogo de demandas que pretenden hacer llegar tanto al Ayuntamiento de Tijuana, al Gobierno del Estado de Baja California y al Gobierno de la República.
Héctor González Cuellar, activista e integrante de la Asamblea Municipal Deliberativa
Quien usó la voz fue el activista Héctor González Cuéllar, quien dirigió la conformación de tres mesas de trabajo: la primera para que se consensúen los principios “que alumbran y norman al movimiento”, la segunda para establecer una “agenda social” – las demandas – y la tercera para la “definición de objetivos y plan de acción”.
Al frente de la Asamblea también se encontraba María Elena Oliva Jiménez y el profesor Juan Ramírez Sánchez. En la presentación de los documentos se dijo que lo que se pretende es la unidad de las organizaciones en pos de un “sentimiento generalizado”, con un sentido “cívico, democrático y patriótico”.
Posterior a los acuerdos de las tres mesas de trabajo, las decisiones volverán a ser discutidas en la sesión plenaria, producto de la cual se emitirá la línea a seguir. Cabe destacar que el próximo sábado 25 de febrero en el municipio de Tecate, los manifestantes volverán a reunirse, para conformar nuevamente una Asamblea, en la que estén incluidas la presencia y las propuestas de organizaciones de los cinco municipios de Baja California.
Profesor Juan Ramírez Sánchez
De entrada, entre las principales demanda se encuentra nuevamente la reversión de la Reforma Energética y la implicación de las modificaciones a la Ley de Hidrocarburos, la reducción de los diputados y senadores plurinominales de la Cámara de Diputados, la pensión vitalicia a ex presidentes de la República, la abrogación de la Ley que regula los Servicios de Control Vehicular en la entidad, la no privatización del servicio de agua potable, la reducción de salario de los funcionarios estatales de primer nivel; en el plano municipal se repiten los puntos que integraron el pliego petitorio que Ramírez Sánchez entregó al Ayuntamiento.
No obstante, es importante destacar que todas esas demandas – y otras más – serán reforzadas y redefinidas después de la Asamblea de hoy domingo 19 de febrero.
En entrevista con ZETA, González Cuéllar, enfatizó que el centro del movimiento es el pliego petitorio que será entregado a las autoridades, y no las aspiraciones individuales de algún miembro que quiera utilizar su pertenencia a la Asamblea para capitalizarse políticamente y buscar algún cargo de representación. “Sería deshonesto que a nombre del movimiento (alguien) impulsara su candidatura”, consideró.
“No podemos caer en el oportunismo”, dijo, y anotó al pluralismo, la horizontalidad, la congruencia, la honestidad y la subordinación de los intereses particulares a los colectivos como uno de los principales valores del movimiento.
Sobre la baja afluencia, señaló que además de la lluvia y el viento, también influyó la “división natural” de agrupaciones sociales que “quieren instrumentar la esencia de las movilizaciones públicas”. Además, justificó que apenas se haya presentado unas cuantas decenas con que la Asamblea Municipal Deliberativa no cuenta con “la capacidad corporativa” que tienen los partidos políticos y las agrupaciones empresariales para convocar a grandes cantidades de personas. Por eso “la presencia ha venido decayendo” desde la histórica marcha del 22 de enero.
