Después de la reconciliación interna, y de la reflexión sobre por qué perdieron por tercera ocasión en las urnas, el PAN se prepara para la elección de su nuevo dirigente municipal en Ensenada. De la amenaza contra los traidores parecen haberse olvidado.
Salomón Miranda
El próximo noviembre 1,800 afiliados panistas podrán emitir su voto. De éstos, 800 son “maruchanes”, es decir, aquellos que se dieron de alta recientemente al PAN sin firmar registro, sin presentar documentos ni fotografías. 200 más también son de afiliación reciente pero “legal”, mil son los panistas que ya estaban. Se vaticina que nada más votarán mil 200.
“Yo deseo que el próximo presidente sea electo de la misma forma en que fui electo yo, por convención interna”, externa Hugo Zepeda, actual dirigente quien presume ganó con el 60 por ciento de los votos.
“Son tantos los que quieren ser presidentes del PAN, como si hubiéramos ganado la elección”, dice en broma a los casi 10 “tiradores” a sucederlo. Aunque otros “mala leche” auguran que no habrá asamblea y que el nuevo dirigente será “designado” por el gobernador y que al resto de suspirantes “los ensartarán como brocheta”.
Los “apuntados”
Iván Nolasco, dueño de dos restaurantes y presidente del grupo “Unidos en Acción”. Ex director del Programa “Oportunidades”, ex secretario de Desarrollo Social, egresado del CETYS y apoyado por Pablo Alejo López Núñez y Miguel Ángel Castillo. Lo ubican como discípulo y entenado de López, quien lo ha protegido, promovido y mantenido a su lado como asistente, secretario, o colaborador.
Jesús González Collins “El Chino”, sindicalista y más priista que nada, se ha mantenido por décadas en la nómina oficial del PAN, ex empleado de CESPE, ya jubilado, ex delegado de Desarrollo Social, donde dio malas cuentas, ex candidato a regidor en la elección pasada, apoyado por Zepeda, “tienen las mismas mañas”, y Francisco Vera. Lo introdujo al PAN Francisco Blake, nunca se ha preocupado ni por conocer los estatutos del partido, “su principal mérito es ser un servil”, aseveran sus detractores. Aunque considera algunos que es lo peor que le podría suceder al PAN”, hacia él apunta “la línea”.
Miguel Ángel Barretos, actualmente es director de Sindicatura Social, aunque se maneja con bajo perfil fue subsecretario de Gobierno durante un año en la administración de José Osuna Millán. Afín al síndico social Félix Ojeda, grupo que logró ganar la interna para candidato a diputado, pertenece al grupo de los “sanchistas” encabezado por el ex alcalde Oscar Sánchez del Palacio. Su problema es que está peleado con Pablo Alejo. Le critican su falta de preparación y carrera profesional pero lo consideran un buen promotor, gestor, y honesto para manejar los recursos. Fue cercano de César Mancillas, del que se alejó pero del que aprendió las mañas, cuentan, como la de organizar fiestas para ganarse a sus correligionarios. Hace dos semanas celebró su cumpleaños y la fiesta llegó el 30 por ciento de la militancia.
Jesús Felipe Vazquez
También la quieren
Los tres anteriores son los aspirantes con mayor posibilidad en base a sus padrinos o allegados, quienes pueden garantizar de 100 a 350 votos. Pero con menos posibilidades otros desean subirse a la pelea. Como Salomón Miranda, regidor en Tijuana hace más de 10 años. Crítico de los gobiernos sean del PRI o del PAN, muy activo y gritón en las asambleas, “y el que menos expectativas tiene porque es muy conflictivo, de un carácter complicado”.
Está Refugio Valenzuela, coordinador de módulo de la diputada Rosario Rodríguez, se le respeta, o tolera, porque es panista de la vieja cuña, impulsado por Jorge Catalán, y sobreviviente de “los catalanes” que pasaron a mejor vida cuando la viuda y muchos se fueron con Pablo Alejo Núñez.
Alfonso Godoy, formó parte del Juvenil del PAN, pertenece al grupo de los “chavorrucos” que conforman Julio Moctezuma, Omar Murillo, Sergio Ramos, Orián García y otros cuarentones aún solteros o en plan de fiesta pero que conforman una fuerza viva en el partido. Son allegados del dirigente estatal José Luis Ovando pero simpatizaban con César Mancillas. “Es un buen chavalo, pero le falta experiencia política”, dicen.
Con pocas posibilidades también aspiran Víctor de la Mora, ex presidente de CANACO, con pocos años de militancia, sin grupo pero allegado a López Núñez, miembro del “Foro de Ensenada”, al igual que Jesús Vázquez, de “los catalanes”, apoyado por un pequeño grupo de Maneadero, al que ven más como técnico que como político. A este par se agregan Héctor Ramos y Rolando Villarino.
Refugio Valenzuela
La proyección es que votarán por Collins la gente del dirigente Zepeda, con 100 votos, y Javier Meza, quien trae a los “maruchanes”, como 300 de nómina. Iván Nolasco trae los votos de Félix Ojeda, que ganó la interna y le puede dar más de 400 votos. Mientras que Barretos parece tener asegurados 250 votos y Godoy 200, andarán entre los 20 y 50 votos el resto. También influirán los escasos 5 votos que “jala” Ernesto Rufo, y los 100 del repudiado (al exterior, no en el partido) Arturo Alvarado, ex director de la CESPE.
El próximo presidente del comité municipal del PAN, quien percibe un sueldo cercano a los 50 mil pesos mensuales, deberá encabezar una oposición responsable y ser colaborativo en el próximo Ayuntamiento encabezado por tercera vez consecutiva por un priísta, considera Zepeda Berrelleza. “Esperamos que a Marco Antonio Novelo le vaya bien, que no cometa los mismos errores que los anteriores alcaldes. No le vamos a escamotear el apoyo a Novelo”, concluyó.
