La agrupación mexicana conmemora una historia de éxitos y bailes, de reflejar realidades, brindar arte sonoro, componer, fusionar y representar subculturas. En Tijuana celebrarán tres décadas de trayectoria, y 25 años del memorable álbum “El Circo”, considerado un disco de la cultura popular y el rock en Latinoamérica
Luego de innumerables presentaciones en Baja California desde principios de los noventa, La Maldita Vecindad y los Hijos del Quinto Patio, quienes ofrecerán un recital mañana sábado 1 de octubre en el Centro de Espectáculos Alamar, al lado de la agrupación argentina Zona Ganjah y la estadounidense Big Mountain, se definen como la misma agrupación de siempre: “Somos una banda que continúa con la misma fusión de rock, ska, reggae, danzón, calipso, folk y ritmos que hemos escuchado y que quisimos siempre oír, que en sus letras abordan cuestiones sociales, la vida cotidiana en el barrio. Seguimos siendo festivos y bailadores después de 31 años”, explicó Enrique Montes “Pato” (guitarrista) en entrevista telefónica con ZETA.
Marcando generaciones e influenciando a otros, los Hijos del Quinto Patio conmemoran una historia de brindar arte sonoro, componer, fusionar y representar subculturas: “Creo que hemos marcando nuestra presencia en varias generaciones con la música, y tenemos la idea de haber influenciado a grupos como Panteón Rococó y Nana Pancha, donde queda reflejado parte de lo que hemos hecho. Pasaron más de diez años para que surgieran bandas de fusión ska, y recordemos que antes no existían las redes sociales, ni nada que nos aproximara a lo que otros estuvieran haciendo, ahora lo googleas todo. Maldita es de una generación en la que se gestó Mano Negra en Francia y Los Fabulosos Cadillacs en Argentina”, expresó el músico.
“Nosotros escuchábamos música popular mexicana, afroantillana, cubana. Nos hicimos escuchando a La Sonora Matancera, Pérez Prado, cumbia colombiana, música ranchera y de tambora que luego llamaron banda sinaloense. Heredamos la música de nuestros hermanos, nos gustaba The Clash, (The Rolling) Stones, la música negra, el punk, lo hindú y árabe”, explicó Pato, haciendo hincapié a la fijación de La Maldita Vecindad por la cultura fronteriza, la subcultura de los pachucos, de su vestir, el spanglish, los bailes, la migración y la música de Los Lobos y Carlos Santana.
Sobre Tijuana, el guitarrista dijo que es la ciudad más cosmopolita de México, una metrópoli que aman por su cruce de culturas e importante flujo migratorio, una región que recibió a los Hijos del Quinto Patio desde sus inicios, y que les ha brindado experiencias gastronómicas (tacos de asada, mariscos, tortillas de harina y langosta), además de conciertos memorables: “El concierto más memorable fue debajo del arco, en la Avenida Revolución, para un festival cultural gratuito, aunque nosotros siempre nos sentimos felices de regresar a una ciudad que es nicho cultural, y que nos adopta como suyos”, subrayó
Al momento, el grupo integrado por Sax, Pato, Rocco y Aldo cierra su gira conmemorativa a 30 años de carrera, para iniciar otra referente a los 25 años de la publicación del emblemático álbum “El Circo”, que Sony Music reeditará para publicarlo en CD y vinil, con los temas “Pachuco”, “Un Poco de Sangre”, “Toño”, “Solín”, “Kumbala”, “Un Gran Circo”, “Pata de Perro”, “Crudelia”, “Mare”, “Otra” y “Querida”.
“‘El Circo’ es un disco que grabamos hace 25 años, producido por Gustavo Santaolalla, que vendió cientos de miles de copias y además, incluye el primer cover (tributo) a un cantante popular vivo (en aquel entonces) que fue Juan Gabriel, que en su momento la participación fue polémica, ya después esto se volvió un concepto y una corriente en la que todos los grupos de rock empezaron a hacer tributos a cantantes, pero grabar ‘Querida’ fue el primer tributo para él. (El Circo) Es un disco que habla de diferentes generaciones, de subculturas, que ha ido más allá del ambiente del rock y forma parte de la cultura popular mexicana”, apuntó el artista.
“Esta gira es honor a un álbum que no pierde vigencia, un disco que mientras la gente se siga reflejando en él, será un producto artístico que seguirá vigente, que tendrá sentido social, artístico y cultural. Afortunadamente Maldita Vecindad sigue siendo reflejado en la gente porque habla de la violencia en las calles en ‘Un Poco de Sangre’, como cuando lo hicimos en ‘Mojado’ sobre la migración y la desigualdad social, o la crónica callejera de ‘Un Gran Circo’, que relata la vida de los vendedores ambulantes, los limpiaparabrisas, la gente que lanza pelotas o fuego para comer”, detalló Montes, para rematar: “A nuestra carrera la define la honestidad de nuestro planteamiento”.
Sobre la producción de “El Circo”, Pato explicó que Gustavo Santaolalla fue clave para lograr el disco gracias a su amplia visión: “Él entendió e interpretó lo que banda quiso plantear, tuvo un trabajo de producción muy puntual. Nos produjo los primeros dos discos de la carrera, así es que pudo explorar nuestro potencial de manera más profunda en ‘El Circo’”, relató.
Referente a las producciones discográficas como “El Circo”, comparadas con las nuevas grabaciones hechas para la radio, el guitarrista de Maldita Vecindad dijo al Semanario que dicho material nunca se creó para vender: “Nosotros no fabricamos discos, sino que componemos alejados de clichés, y de canciones banales. El caso de ‘El Circo’, que sí se vendió mucho, es subrayable por su conexión con la gente, y nosotros nos sentimos afortunados de tener ese éxito por ser compuesto lejos de los cánones de la radio comercial, pero no nos interesa hacer discos para aparecer en Los 40 Principales”.
De igual manera, adelantó a ZETA sobre la reedición del “MTV Unplugged” que grabaron el 12 de octubre de 1996 en los estudios de esa cadena en Miami, Florida, además de la próxima publicación de un disco inédito grabado en 1994 que, por cuestiones contractuales entre su productor y la disquera, quedó congelado.
“Es un disco que grabamos en Nueva York, pero por cuestiones legales, tuvimos que crear otro disco, pero después de 22 años estamos en pláticas para publicarlo. Es un álbum que no es convencional, tiene más de veinte tracks, en los cuales tuvimos mucha libertad para poder desarrollarlo, trabajar en él. Estuvimos cerca de dos meses trabajando. Es muy importante para nosotros porque retrata un momento importantísimo que estábamos viviendo después del éxito de ‘El Circo’, y ese momento refleja lo que vivíamos, pensábamos… lo triste es que no pudo publicarse”, finalizó Pato.