Entre las afectaciones que dejó el Huracán “Newton” en su paso por la península a principios de esta semana destaca la caída de árboles, letreros, postes de teléfono y energía eléctrica, inundaciones y daños en viviendas por las fuertes ráfagas de viento. Y el municipio de Mulegé se llevó la peor parte del fenómeno meteorológico, el cual sobre tierra mantuvo la categoría de huracán.
Entre las principales afectaciones se encuentra la crecida de arroyos por vialidades importantes. El arroyo corrió por la avenida Manuel Montoya que en su paso arrasó con carros y cuanto objeto se atravesara en su camino.
De manera histórica Santa Rosalía registró 480 mililitros de agua algo que no presenciaba en el estado desde 1929, “tenemos Santa Rosalía con 480 milímetros es el registro histórico que tenemos registrado desde 1929, la media anual ahí es de 105 milímetros”, reconoció Luis Alfonso Martínez Plata, Director Local de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) en el estado.
Entre los principales daños, la alcaldesa del municipio de Mulegé, Cecilia López informó que al menos 730 kilómetros sufrieron daños en caminos rurales siendo devastados, por lo que la heroica Mulegé se encuentra incomunicada con Santa Rosalía hasta ese momento, se sabe de tres cortes carreteros que se presentaron, uno entre Loreto y Ciudad insurgentes en Comondú; mientras tanto de Guerrero Negro a Santa Rosalía fueron dos más.
“Hubo ahí, muchas afectaciones, sí tenemos en la sierra, los caminos rurales son 730 kilómetros totalmente devastados, así estamos hoy terminando, hoy espero terminar con el recuento de daños, usted sabe que nuestro municipio es bastante amplio, todavía no tenemos acceso al sur a la heroica Mulegé, no hay paso”, lamentó.
Se tiene un registro de alrededor de 60 casas afectadas, de las cuales 6 de la colonia Canadá son pérdidas totales, pero la sorpresa fue ver los puentes de la Heroica Mulegé, los cuales estaban sobrepasados con la cantidad de agua que bajó de la zona serrana.
“Bajó muchísima agua, la verdad es que por aquí nos afectó la colonia Canadá, con varias viviendas con pérdida total, alrededor de siete viviendas y una afectación parcial a unas 55, 60 casas, pero le digo lo que nos tiene tranquilos es el saldo blanco”, reiteró.
Al cierre de esta edición, la evaluación de daños se mantiene en la zona norte, sin embargo se decretó estado emergencia a los cinco municipios de baja California Sur, además se hizo la solicitud de decretarse zona de desastre por el paso de “Newton”.
Entre los reportes brindados a Zeta, alrededor de mil 700 personas fueron albergadas en los diferentes refugios temporales en el estado por el paso del Huracán “Newton”, en Los cabos se concentró el 90% de éstos; la peligrosidad del fenómeno tropical obligó a las autoridades a evacuar incluso algunas zonas de riesgo urgentemente, ya que “Newton” tuvo rápido desplazamiento y una evolución repentina, su trayectoria siempre fue amenazante a la entidad, incluso el propio Gobernador del Estado, Carlos Mendoza Davis reconoció que los tomó por sorpresa la rapidez del ciclón.
“Éste es un fenómeno que se nos ha adelantado, que trae mucha agua y a veces los grandes problemas no se generan por vientos, sino por una gran cantidad de agua, hay que tenerle toda consideración a este fenómeno, y por supuesto, tomar todas las providencias preventivas necesarias para no tener acciones que lamentar posteriormente”, expresó el servidor público.
Para evitar mayores riesgos en las escuelas se suspendieron las clases para todos los niveles en todo el estado, así como las actividades aéreas y portuarias. La justificación fue que el fenómeno avanzaba muy rápidamente y ponía en riesgo a la población estudiantil, antes que pudieran realizar una nueva sesión por parte del Consejo Estatal de Protección Civil, así lo informó Héctor Jiménez Márquez, Secretario de Educación Pública.
“La suspensión de clases a partir del día de mañana, cancelar las clases hasta nuevo aviso de una reunión que se pueda establecer aquí en el propio consejo”, reiteró.
Precisamente ante la cercanía, se establecieron refugios temporales urgentes, ya que se esperaba que afectara rápidamente a gran parte del estado, sin embargo, los refugios empezaron las labores a las 8 de la mañana del martes 6 de septiembre, cuando los estragos del huracán se empezaron a sentir a partir de las dos de la mañana.
“En una primera etapa se han habilitado 56 albergues en el estado, 18 de ellos corresponden al municipio de Los Cabos, 15 al municipio de La Paz, 10 en Comondú, 10 a Loreto y tres a Mulegé”, expuso Carlos Godínez León, Subsecretario de Protección Civil en el Estado, pero de este número, solo operó 12 en Los Cabos y seis en La Paz.
Precisamente algunas personas acudieron a los albergues y prácticamente obligaron a que se abrieran, esta vez en La Paz el miedo se apoderó de algunos ciudadanos por los riesgos y las malas condiciones en que viven, hablando de casas endebles o invasiones, tal es el caso de Alejandro Luna de la Ampliación Villas de Guadalupe, Irma de La Pasión, Juan Pablo de Agua Escondida y Juan Manuel Ortiz también de La Pasión respectivamente.
“A la una de la mañana yo empecé a sentir que el viento estaba más recio, empezaron a volar algunas láminas de casas contiguas a donde yo vivo, entonces yo me resguarde en una casa de material que está bien hecha. Como a las siete de la mañana, ya oímos el pronóstico de que venía a 150 kilómetros de aquí de La Paz, y yo le dije a él, nos conviene ir a checar ahí a la Ema Osuna y resguardando y ya con los militares ver si se va a poner más feo esto y sí nos dijeron que venía muy fuerte”.
“Como a las 2, 3 de la mañana empezó el aire muy fuerte, yo no estaba en un lugar muy seguro, porque ya ha llovido y corre bien feo el agua, y pues el motivo la seguridad de mis hijos y pasaron las brigadas y aproveché el apoyo que nos brindan. Nos dijeron que era código rojo por eso nos vinimos, pero allá sí se estaba muy fuerte”.
“Me tuve que salir por la noche porque entraba lluvia por donde sea”.
“A mi casa se le levanta mucho la lámina y hacía mucho viento, nos vinimos porque con el viento se levantaba mucho”.
Sin embargo una vez atendidos en el albergue, nadie se quejó al contrario disfrutaron de un lugar seguro, y sobre todo con la atención médica, alimenticia y de seguridad, así lo dijo Bibiano Ruiz, Teniente de Infantería de la Tercera Zona Militar, el cual dijo que todo aquel ciudadano que “quiso refugiarse en este albergue, ahorita tenemos 25 personas, entre hombres, personas adultas, mujeres y niños, se les está proporcionando lo que es cobija, cobertor, colchoneta, ahorita ya se les está preparando la comida. Ahorita la gente albergada es de aquí de La Pasión, gente cercana a la Universidad, y durante la noche el meteoro estuvo arrojando ráfagas de vientos y un poco de agua”, manifestó.
Los mismos ciudadanos se percataron de que la fuerza del meteoro era tal que ponía en riesgo a sus familias. Algunos se vieron en la necesidad de salir con algunos documentos y solo una pequeña bolsa de sus pertenencias, aunque el miedo por dejar las pertenencias siempre deja ese mal sabor de boca, pues abandonan sus pertenencias y en algunos casos “afectó a varias casas, ya les voló el techo, solicitaría que vayan las autoridades ya que hay muchas personas que les gusta, saqueadores pues, andan llevándose las láminas”.
Precisamente elementos de la zona militar desplegaron operativos para disminuir este tipo de actos vandálicos en las colonias, pero también en los tiendas departamentales, supermercados y tiendas de autoservicio, por lo que “vamos a estar en coordinación con las autoridades, para que, sin descuidar la atención civil, para recuperarse de los estragos que pudiera generar este meteoro, vamos a estar apoyando a las autoridades mediante patrullaje en toda la ciudad para evitar actos de pillaje”, afirmó el Comandante de la zona, el General Diplomado de Estado Mayor, Edgar Flores.
Lamentablemente se registró en el municipio de La Paz un acto de rapiña en una tienda de autoservicio ubicada en 5 de Mayo y Municipio Libre, de la colonia Francisco Villa, donde quebraron e ingresaron por una de las puertas del negocio y se llevaron parte de la mercancía.