Un paquete sospechoso en un sector de la grada del estadio de Old Trafford, en Manchester, Inglaterra, fue detonado de forma controlada este domingo, después de que fueran evacuados unos 20 mil aficionados y se decretara la suspensión del encuentro que debían disputar el Manchester United y el Bournemouth, de la Liga Premier.
El árbitro del partido, el inglés Jon Moss, tomó la decisión de posponer el inicio del duelo después de hablar con el delegado del Manchester United, quien le dijo que había “un incidente en algún lugar del estadio”.
Equipos especiales de la policía, apoyados de perros, revisaron las tribunas del estadio y encontraron un paquete sospechoso, que posteriormente detonaron de forma controlada, afuera del inmueble deportivo.
Ante ello, las fuerzas de seguridad decidieron decretar la suspensión del partido, que no se jugará este domingo. Todavía no se ha fijado una fecha para la celebración del choque, con el que se cerrará la temporada 2015-16.