Entre 2015 y 2029 la demanda de gasolinas aumentará a una tasa media de crecimiento anual de 2.7 por ciento; en tanto el diésel de 3.6, y la turbosina de 4.3 por ciento. Por el contrario, se anticipa una reducción anual promedio de 22.2 por ciento en la demanda de combustóleo (utilizado como combustible en generación de energía eléctrica para la generación de vapor en calderas industriales hornos de secado y hornos rotatorios), en dicho periodo.
De acuerdo al economista, investigador nacional del Conacyt Alejandro Díaz Bautista, siguiendo la Prospectiva de Petróleo Crudo y Petrolíferos 2015-2029, las estimaciones de crecimiento económico de México, los patrones actuales de demanda y el dinamismo del sector transporte, se espera un incremento en la demanda de gasolinas, diésel y turbosina en México.
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“Llego la realidad económica que advertíamos desde hace años, México importa más de la mitad de gasolinas que consume”, sostuvo el catedrático de El Colegio de la Frontera Norte (El Colef).
El catedrático advirtió que derivado de las dificultades que hay en refinación, aunado al bajo precio del crudo, han incentivado su compra al exterior por parte de México. Para un país petrolero, como el que era México hace dos décadas, cifra muestra la realidad económica actual.
El especialista en temas energéticos, las importaciones de combustibles alcanzaron en 2015 una participación hasta de 53.8 por ciento de la demanda total nacional, a causa de un aumento en el consumo, pero también porque desde 2010 el Sistema Nacional de Refinación (SNR) operó a 71 por ciento en promedio y a una caída de 9.2 por ciento en el procesamiento de crudo en los últimos seis años.
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Agregó que entre 2010 y 2015 el porcentaje de utilización del SNR promedió 71 por ciento, siendo 2010 el año de mayor utilización, con 77 por ciento, y 2015 el de menor utilización, con 66 por ciento. La caída en el porcentaje de utilización de la capacidad instalada y por lo tanto, en el volumen producido, se debe entre otros factores a paros no programados derivados de problemas operativos, reducciones en el presupuesto de mantenimiento, así como a la ejecución de trabajos de rehabilitación, necesarios para procesar los crudos de distintas calidades recibidos en las refinerías.
Las importaciones
Derivado de lo antes expuesto la importación de petrolíferos alcanzara un promedio de 45 por ciento del total de la demanda interna, es decir, 8.5 puntos porcentuales arriba de la participación registrada en 2010.
En el caso de las gasolinas las importaciones representan 53.8 por ciento del consumo nacional; en el caso del diésel las compras en el extranjero son de 37.8 por ciento del total, frente a 29.1 por ciento al comienzo de la década. En otros petrolíferos, las importaciones representan 43.8 por ciento.
El año pasado la demanda de gasolinas fue de 793 mil 300 barriles diarios, siendo el sector transporte registró 99.8 por ciento del total de las ventas.
Las importaciones de gasolinas alcanzaron 426 mil 600 barriles diarios, es decir, 53.8 por ciento del total de la demanda nacional, según las cifras oficiales.
