El que anda más perdido que el candidato del PRD -Fernando Rivera Garibaldi, a la postre la única postulación ratificada por la autoridad electoral-, a quien no han visto ni en las oficinas del partido, es Marco Antonio Novelo, candidato del PRI a la presidencia municipal de Ensenada. No está haciendo campaña, o no hay interés de sus voceros en difundir sus fracasos en las brigadas.
Los jornaleros en el sur rural de Ensenada lo repudian porque no los apoyó en sus exigencias, y la estructura de Julio Felipe García y las simpatías de Alejandro Arregui, no perdonan a las cúpulas del partido el haberles impuesto al diputado con licencia.
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