El Consejo General del Instituto Estatal Electoral (IEE) ya aprobó los límites del financiamiento privado del que podrán gozar los partidos políticos para la contienda electoral, y sus posibilidades son varias.
El martes del 19 de abril pasó por la Comisión de Partidos Políticos y Financiamiento, y el jueves 21, el dictamen número 19 terminó por plancharse. En términos técnicos, de ahí no pueden pasar.
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Empezando el año, el IEE calculó y aprobó el financiamiento público para los partidos, un total de 158 millones 877 mil 402 pesos. De acuerdo con los lineamientos de la Ley, repartió de manera proporcional -según el número de votos- entre las fracciones: más de 35 millones para campañas, 3 millones y medio para actividades específicas y casi 119 millones para gasto corriente.
En su análisis del martes 19, el Consejo estableció, como marca la Ley General de Partidos Políticos, que el financiamiento público debe prevalecer sobre el privado, cuyas aportaciones se dividen en las de militantes, de candidatos y de simpatizantes.
En el primer caso, los partidos están obligados a cuidar que la generosidad de la militancia no rebase el 2 por ciento de lo que de manera pública se entrega a todos anualmente para su sostenimiento, es decir, los casi 199 millones de pesos. El resultado es que la suma de la cooperación “entre personas con registro partidista” no debe rebasar los 2 millones 378 mil 404 pesos.
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Le siguen las aportaciones que los propios candidatos puedan hacer a su partido para el proceso electoral, que en dinero o especie, tiene el límite de 2 millones 265 mil pesos 007 pesos. El cálculo, de acuerdo con el IEE, corresponde al 10% del tope de gastos para la elección de gobernador anterior: 22 millones 650 mil 079 pesos. El criterio y la cifra -otros 2 millones 265 mil pesos- es la misma para las donaciones en dinero o especie que hagan los simpatizantes.
En suma, además de lo que las fracciones políticas reciben para gasto corriente y de campaña de dinero público, tienen la posibilidad de hasta 6 millones 908 mil 419 pesos privados.
El dictamen del IEE, establece que cada partido tiene libertad para decidir los montos mínimos y máximos de las aportaciones de sus militantes, precandidatos y candidatos.
Aun con otras aportaciones que podrán asignarse desde los comités ejecutivos nacionales partidistas a los comités en Baja California -financiamiento que tiene que regular el Instituto Nacional Electoral-, los topes de campaña -que van de 500 mil a 2 millones de pesos en el caso de las candidaturas a diputados, y de 2 a 11 millones de pesos en el caso de alcaldes-, no pueden propasarse por más del 5%, o la elección tendría que ser anulada. Una invalidación inédita.
