José Cuitláhuac Salinas, ex titular de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), que depende de la Procuraduría General de la República (PGR), presentó hoy una demanda contra la dependencia gubernamental federal para reclamarle una indemnización de 33.8 millones de pesos por daño moral, informó el diario Reforma.
Según el funcionario, el daño moral estribaría por no haberle provisto de los vehículos blindados adecuados, los recursos para cubrir sus viáticos ni el personal de escolta que le correspondía para resguardar su seguridad y la de sus cuatro hijos.
Además exigió que la Procuraduría cubra el daño moral causado por el hecho de ventilar su domicilio particular en un juicio de amparo del que sería enterado un presunto narcotraficante, lo que considera que puso en riesgo su integridad física y la de su familia.
Esta demanda, denominada de reclamación de pago de indemnización por responsabilidad patrimonial del Estado, fue presentada ayer en la oficina de correspondencia de la PGR, de acuerdo con personal allegado al ex fiscal consultado por el diario.
El actual secretario del Sexto Tribunal Unitario Penal de la Ciudad de México señala que los responsables de las omisiones en su agravio son Guillermo Meneses Vázquez y María Guadalupe García Padilla, coordinador de Asesores y agente del Ministerio Público de la SEIDO, respectivamente.
También apunta a Vidal Díazleal Ochoa, ex director de la Policía Federal Ministerial, Carlos Gómez Arrieta, quien fuera director de Servicios Especiales de Seguridad y de Protección a Personas, e Isidro Junco Barajas, director de Servicios de Protección a Personas de la PFM.
“Con las omisiones que se estiman como actividades administrativas que se tildan de irregulares, se ocasionaron los daños al reclamante y los demás miembros de mi familia”, dice el ex subprocurador en su escrito dirigido a la Procuradora Arely Gómez Gónzalez.
El denunciante basó su demanda en los distintos amparos que ganó contra la PGR para que le garantizaran su seguridad y la de su familia, máxime que fue titular del área de combate al crimen organizado, indica el rotativo.