El Papa Francisco escuchó esta tarde los testimonios de las familias chiapanecas reunidas en el estadio Víctor Manuel Reyna, en Tuxtla Gutiérrez, donde entre el exterior y el interior se concentraron unas 42 mil personas, según estimaciones de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana estatal.

En un encuentro con familias mexicanas en el sureste del país, el Pontífice criticó que entre las sociedades se promuevan ideas de aislamiento que debilitan el entorno familiar. “Y se van inoculando en nuestras sociedades (que) se dicen sociedades libres, democráticas, soberanas”, dijo Francisco al salirse del discurso que tenía preparado. “Y terminamos siendo colonias de ideologías destructoras de la familia, del núcleo de la familia, que es la base sana de toda sociedad”.

El Papa exigió legislaciones para las familias que no tengan los recursos básicos para sobrevivir y criticó que entre las sociedades se promuevan ideas de aislamiento que debilitan el entorno familiar.

“La forma de combatir esta precariedad y aislamiento se tiene que dar a distintos niveles. Una es por medio de legislaciones que protejan y garanticen los mínimos necesarios para cada hogar.

“Leyes y compromiso personal son un buen binomio para romper la espiral de la precariedad”, dijo, en su discurso en el Estadio Víctor Manuel Reyna.

En su discurso, el Papa Francisco advirtió que en las sociedades actuales se ciernen ideologías que buscan destruir la familia y lanzó un llamado para protegerla.

En un estadio de fútbol de la ciudad de Tuxtla Gutiérrez,  el Papa escuchó los testimonios de cuatro familias, entre ellas la de una madre soltera y de una pareja que se casó después de que ella se divorció.

Dijo que entendía que no siempre es fácil vivir en familia, pero que vale la pena intentarlo.

“Prefiero una familia herida, que intenta todos los días conjugar el amor, a una sociedad enferma por el encierro y la comodidad del miedo a amar”, dijo.

El encuentro con las familias es su último acto público de una jornada en la que también ofició una misa multitudinaria con indígenas.

El Papa reivindica a Samuel Ruiz

El Papa Francisco reivindicó hoy a Samuel Ruiz (1924-2011), obispo fallecido en 2011 vinculado a la Teología de la Liberación e identificado con las causas de los más pobres.

Antes de oficiar la misa en la catedral de San Francisco, el Papa Francisco estuvo en la tumba del obispo Samuel Ruiz, un hombre que no fue bien acogido por el Vaticano, incluso fue difamado, criticado por la curia mexicana.

Indígenas mexicanos agradecieron al Papa Francisco por haberlos visitado, pero sobre todo por ponerles la atención que otras personas no les han dado.

“Aunque muchas personas nos desprecien, tú has querido visitarnos y nos has tomado en cuenta, como la Virgen de Guadalupe a San Juan Dieguito”, le dijeron indígenas tzeltales y tzotziles en un mensaje ofrecido en sus lenguas y traducido al español durante la misa multitudinaria en San Cristóbal de las Casas, en el estado de Chiapas.

Muchas veces acusado de extremista o de colaborar con grupos de izquierda, Samuel Ruiz García, llamado “Tatic” por indígenas chiapanecos, fue un obispo defensor de las causas de los marginados. ZETA/SinEmbargo