Aunque desde 2014, Tatiana Guerrero Verdugo se encuentra en estado vegetativo por la complicación de una cisticercosis, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) informó que aún se evalúa el caso para determinar si existe responsabilidad del personal médico que ahí presta servicio. En la edición 2175 de ZETA se dio a conocer que la misma institución -en el expediente médico de la paciente- confirmó que de haber atendido oportunamente la enfermedad, se hubiera evitado el crecimiento del cisticerco (larva) alojado en el cerebro de Tatiana, mismo que por su tamaño terminó por provocar una hidrocefalia, cuyas secuelas no la dejan levantarse de una de las camas de la Clínica 1 del IMSS desde hace dos años. Y es que Tatiana acudió desde 2007 en diversas ocasiones tanto a la Clínica 1 como a la Unidad Médica Familiar 27, con crisis convulsivas, pero nunca se le practicó una resonancia magnética o una tomografía. Ambos estudios suficientes para detectar la cisticercosis, según especialistas consultados. Cuando en 2013 se le diagnosticó la enfermedad -después de cinco años-, el IMSS dijo no contar con un neuroendoscopio, herramienta fundamental para realizar una cirugía. Es así como Ricardo Márquez Gaxiola, marido de Tatiana, decide utilizar un seguro de gastos médicos privados en una clínica particular. Sin embargo, la cirugía se complicó por el tamaño del cisticerco y, desde 2014, Tatiana no despierta. Márquez Gaxiola presentó una queja ante la Coordinación de Atención a Quejas y Orientación al Derechohabiente, pero este órgano del IMSS la rechazó meses después. La familia de la paciente demandó una indemnización por los daños ocasionados y el pago íntegro de los gastos médicos que se han generado de manera externa. También interpuso una denuncia en la Procuraduría General de la República (PGR), que continúa en integración. En un evento público donde participó el delegado del IMSS en Baja California, Francisco Iván Beltrones Burgos, dijo conocer el caso “muy bien”, así como la denuncia vigente en la PGR. Sin embargo, prefirió ordenar al jefe de Cardiología -especialidad distinta a la que amerita el caso-, Alfredo Comparán Núñez, hablar sobre el caso. “Lo conocemos desde hace dos años, es una paciente que no se operó dentro del Seguro, sino fuera. La opinión del Seguro (IMSS) sería que no necesitaba la cirugía. Es muy debatible que se opere una cisticercosis, a veces lleva el riesgo de quedar con daños después de una cirugía”. — ¿Cuál hubiera sido la alternativa en cuanto a tratamiento médico entonces?, planteó la reportera. “Se está analizando por el grupo médico para saber qué se podía hacer que no se hizo. Aquí ya tenía el expediente y sabíamos que era una candidata que no era apta a cirugía”, finalizó Comparán.
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