Tras las rejas se encuentran los asesinos de Rigoberto Venegas Siordia, de 81 años de edad, que fue hallado muerto el 15 de abril; golpeado, maniatado y con un calcetín en la boca, en el pasillo de su domicilio, ubicado en el fraccionamiento Valle Dorado, en Ensenada. Marco Antonio Chavarría López, titular de la Subprocuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), zona Ensenada, informó que en coordinación con la Policía Estatal Preventiva (PEP), se logró la detención de tres de los cuatro implicados en el homicidio. Los de nombre Jorge Antonio Aguilar González alias “El Filero”, de 23 años de edad; Carlos Alberto Vázquez Gutiérrez, alias “El Bam bam” de 41; y Lourdes Margarita Villela Treviño, alias “Lulú”, de 30, enfrentarán el proceso penal correspondiente recluidos en el Centro de Reinserción Social de Ensenada. Chavarría López dijo que la causa de la muerte fue asfixia por obstrucción de vías aéreas de un cuerpo extraño. Falleció minutos después de que lo abandonaran atad0 de pies y manos, y le introdujeran el calcetín en la boca para evitar que pidiera auxilio. Los presuntos homicidas en su declaración dijeron, relató el funcionario, que el sábado 11 de abril, se encontraban consumiendo “cristal”, junto con una cuarta persona en un domicilio en la colonia Piedras Negras, que aún no ha sido detenida, pero ya se giró orden de aprehensión en su contra. Ese día planearon el robo, que terminó en el asesinato de Venegas Siordia. El móvil fue “comprar más droga”, porque la “Lulú”, les contó que conocía a una persona que vivía sola y que de seguro tendría dinero y objetos de valor. “Lulú”, que antes había ido a limpiar la casa de don Rigoberto, tocó la puerta del domicilio, le pidió permiso para entrar al baño y una vez dentro de la casa, llamó a sus cómplices para corroborar que efectivamente estaba solo y tenía la puerta entre abierta.
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