Por años, las dependencias federales con representación en Tijuana han carecido de un espacio adecuado para brindar servicio a los ciudadanos que acuden a hacer algún trámite. El problema comienza cuando se tienen oficinas como las del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (INFONAVIT), que atienden a 6 mil 500 usuarios por semana, mientras la Secretaría de Economía recibe a 500 ciudadanos. En igual situación está la Comisión Nacional para la Defensa de los Usuarios de las Instituciones Financieras (CONDUSEF), con domicilio en José María Velasco en la Zona Río; la diferencia es que frente al edificio se encuentra un estacionamiento que cobra 30 pesos por hora. Por lo que respecta a la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL) en José Clemente Orozco, ésta le presta un espacio a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) y a la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (PROFEPA). La Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) no es la excepción, en Avenida Guadalupe Victoria de la Zona Río. Llegar a estas oficinas es una odisea, ya sea porque es necesario tomar dos o más unidades de transporte público (50 pesos en promedio por viaje redondo), o bien, porque se debe buscar un espacio para el automóvil en la vía pública, o en definitiva, pagar entre 10 y 30 pesos por entrar un estacionamiento privado. La ciudadana Martha Hernández acudió desde el Mariano Matamoros a la delegación de la PROFECO en Zona Río. Dijo que pagó un boleto de 10 pesos con destino a la Zona Centro y de ahí otros 12 pesos para llegar al punto en cuestión. Le tomó aproximadamente hora treinta minutos; calificó de “caro y engorroso” moverse desde aquella área. Otro caso es el de Manuel Ávila, quien tuvo que realizar un trámite en el INFONAVIT, en Bulevar Díaz Ordaz. El problema es que no hay estacionamiento suficiente: “Es muy molesto tener que venir a la zona”, declaró. 
Desde el 18 de febrero, la Secretaría de Economía cambió sus instalaciones a la calle Séptima, entre Avenida Revolución y Constitución en la Zona Centro de Tijuana. El delegado de la dependencia, David Saúl Guakil, aseguró que el cambio se debió a que en las anteriores instalaciones se tenían 20 cajones de estacionamiento, mientras que en la nueva sede habrá 60. Además, ahora cuentan con un elevador más amplio, instalaciones funcionales y modernas, por un alquiler 12 por ciento más barato que en Zona Río. “El Presidente de la República, en un discurso, dijo a todos los delegados que hay que mover las instalaciones a la Zona Centro para reavivarla. Tanto nosotros como INFONAVIT, somos los primeros que estamos haciendo lo propio. Tenemos una afluencia de 500 personas a la semana, el que nos autorizó la renta fue Hacienda; al movernos nos ahorramos más del 10 por ciento”, expresó Guakil. “Tenemos dos pisos, la diferencia es que estamos pegados al edificio grande del estacionamiento que hicieron en (el bar) Las Pulgas. En la esquina tenemos una parada de camiones, parece que la PROFEPA está viendo si se viene. Ojalá y se vinieran todas las delegaciones al Centro”, finalizó. Por su parte, el delegado del INFONAVIT, Alejandro Arregui, afirmó que están por mudarse al edificio en cuestión entre abril y mayo: “Tenemos un flujo aproximado de 6 mil 500 derechohabientes por semana, logramos obtener la posibilidad del cambio. Ya se venía buscando la reubicación por más de diez años. La ubicación en la colonia Cacho es muy buena, pero ya era insuficiente en términos de espacio, ya se hacían grandes filas, teníamos solo cuatro cajones dobles estacionamiento para derechohabientes y personal; en la nueva ubicación tendremos 60 y un crecimiento mayor al 20 por ciento de capacidad y 30 por ciento más a futuro, lo que significa que creceremos por encima del 50 por ciento en el mediano plazo”. De acuerdo al funcionario, el cambio de sede es en función de su presupuesto, si bien, no ahorrarán, tampoco les costará más de lo que pagaban (no quiso dar el monto), además de la conectividad que tiene la zona con el transporte público. “Esto va alineado con la política del Gobierno Federal, donde se busca que se instalen las instituciones públicas para generar un polo de desarrollo. Estamos conscientes que somos detonante para prestadores de servicios, lo que sin duda estará generando un mejor servicio, accesibilidad al transporte y ayudar en la reactivación de la actividad económica”, concluyó. Sin más presupuesto Por su parte, la delegada de la CONDUSEF, Guadalupe Romero Garayzar, expuso que en su caso atienden como mínimo 100 personas diarias y las instalaciones son muy pequeñas. “El costo de lo que pagan las dependencias en rentas es muy variable, depende del tamaño de cada una de ellas, pero ahorita ni siquiera para contratar más prestadores de servicios nos están autorizando, nada, nada, nada. “No quieren soltar, nos tienen súper limitados, aunque el compromiso sea crecer, dar mejor atención. No. Es hacer más con menos y hazle como puedas”. — ¿Tienen contemplado cambiar de dirección?, se le preguntó. “Por el momento no. La verdad es que sí requerimos más espacio porque sí se me llena, tengo mucha gente parada, ojalá que para el fin de año pudiera moverme, tendré como unos 100 metros cuadrados. No hay estacionamiento, tengo en doble, fila, triple fila y reniegan que no hay dónde estacionarse”, asentó.
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