Es bueno que lo primero sea lo primero

Desde los orígenes de la humanidad, el varón fue primero porque así fue creado y de una parte de su ser fue creada la hembra que le fue entregada por compañera, y así los dos fueron creados varón y hembra: al varón le dio poder para dominar en este mundo las aves, fieras, reptiles y animales del mundo. A la hembra le dio la gracia y el poder de dar la vida a los genes que el varón deposite en su vientre mediante la unión de sus cuerpos en acto sensual entre el varón y la hembra. Es bueno también recordar la historia para conservar memoria de grandes sucesos y así mantener el rumbo de la misma sin cambiar las reglas en los nuevos hechos y actividades sociales, culturales o científicas: puede haber cambios gramaticales según lo exige una expresión lingüística en un idioma como el inglés. Pero en el idioma neutro, el apellido paterno es el primero. Para millones de latinos que trabajan y viven allende las fronteras, se hizo necesario el cambio, pero ya lo han solucionado; si los legisladores mexicanos no tienen en qué entretenerse, que no le causen problemas a cien millones de mexicanos residentes en México, los desconocerán en el registro nacional de población y vivienda, en los bancos y en el INE, les pedirán cambiar sus actas, pasaporte o su identidad completa. El pueblo ya tiene bastantes incomodidades, ya no le causen molestias, ningún trámite es gratuito –y además de tardado–, se da de mala gana, no promuevan cambios que no son necesarios, como estamos es como debemos seguir.   Vicente Martínez Méndez Tijuana, B. C.