Desde hace cinco años, residentes del fraccionamiento Pacífico Campestre son obstaculizados con la basura acumulada en el fraccionamiento vecino, Pacífico Campestre Norte, el cual se encuentra en estado de abandono y es la única vía de acceso a sus hogares. Por tal razón, Alejandro Luján y Jorge Gómez, propietario y promotor de este desarrollo, respectivamente, exponen que no ha sido posible la venta de los lotes que continúan deshabitados. Además, dificulta la permanencia de quienes ya residen ahí, no solamente por la imagen de desatención o las condiciones poco higiénicas que provocan los montones de desechos, también porque el bloqueo al acceso principal, convierte al fraccionamiento en uno de los menos transitados, y por lo tanto, inseguros. Pese a que el propietario de la zona residencial se encarga de la limpieza de sus terrenos, los residentes se quejan de la “desagradable tarea de pasar en medio de un basurero”, el mismo motivo que aleja a posibles compradores. Según lo dicho por Jorge Gómez, la problemática tiene su origen en la incapacidad del dueño del fraccionamiento Pacifico Campestre Norte para vender los lotes en que dividió su propiedad, por lo que prefirió abandonar el terreno y permitir que terceros lo llenaran de basura y escombros, evitando así una posible invasión. Al llenar el predio de basura, las personas optaron por tirar sus desechos dentro de la propiedad contigua, aunque ésta estuviese habitada y formara parte de un fraccionamiento distinto. 
En diversas ocasiones, Luján ha contratado servicios de limpieza del terreno por un pago de 2 mil pesos semanales, extendiendo las jornadas de limpieza hasta por tres semanas. Por su parte, Gómez refiere que aunque la autoridad municipal está enterada de la situación, no ha tomado ninguna acción para evitar o prohibir esto, ya que la basura se encuentra dentro de propiedad privada. Pero la preocupación continúa para los encargados y residentes del fraccionamiento, ya que cada vez es mayor la cantidad de basura que se acumula, lo cual podría derivar en un problema de salud pública.
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