18.1 C
Tijuana
domingo, junio 16, 2024
Publicidad

Disminuir el presupuesto

Los diputados que de mayoría priista dominaron la anterior Legislatura de Baja California, iniciaron su año fiscal en 2010 con un presupuesto de 249 millones de pesos. Tres años después, concluyen su labor gastando 661 millones de pesos al año. Un Congreso carísimo el de Baja California, sobre todo considerando que la economía no está para tales despilfarros. Golpeados los bolsillos de los bajacalifornianos y temerosos de lo que será 2014 ya con el incremento al 16 por ciento del IVA, entre otras medidas impositivas del Gobierno Federal, se esperaría que la clase política que maneja los Poderes del Estado, se ajustara el cinturón en una muestra de solidaridad, además de ponderar un gasto eficiente y no excesivo. En el actual Congreso de Baja California, en estos momentos se discute en la Comisión de Administración, lo que será el presupuesto de la Cámara que integran 25 diputados. Fue promesa de campaña de la alianza panista y del gobernador Francisco Vega de Lamadrid, disminuir el presupuesto de los legisladores. Realmente 661 millones de pesos, más 200 millones que se le otorgan al Órgano Fiscal Superior, dan cuenta que tan solo en el Poder Legislativo se destinan casi 900 millones de pesos, y eso considerando que no es un ente ejecutivo, sino precisamente legislativo, por lo que no gasta en obras, servicios para la comunidad o estrategias de combate. En estas condiciones, desde el Partido Acción Nacional, sus aliados proponen una disminución al presupuesto de los diputados de 271 millones de pesos, es decir, que en justo derecho y en responsable actitud, desempeñen sus labores con el 1 por ciento del presupuesto estatal, que le otorgaría al Congreso, 390 millones de pesos para funcionar al año. Pero algunos priistas -y también algunos azules o de presunta corriente izquierdista- se niegan a dejar ir el dinero que les permite gastar a manos llenas sin tener que justificar. Hasta el cierre de edición de ZETA, el más generoso en el ahorro había resultado el priista René Mendívil, quien proponía efectivamente disminuir el presupuesto, pero no en 271 millones, sino en 150. La negociación continuará. Mientras el PAN y el gobernador se comprometieron a bajar los billetes asignados a la Cámara, el PRI no puede desaprovechar la oportunidad de ser solidario en la disminución del gasto con los bajacalifornianos, sobre todo considerando que en días recientes dieron la espalda a la zona fronteriza al aprobar, sin cortapisas, el aumento al 16 por ciento de IVA. Por ello, disminuir el presupuesto en 271 millones a la Cámara, les representa la ocasión para congraciarse con el electorado. La realidad es que los diputados, empujados por sus antecesores de mayoría priista, traspasaron sus responsabilidades legislativas para intentar ser ejecutivos, pero no en el conjunto del Poder Legislativo, sino en lo particular cada uno de ellos. Donde mayor incremento hubo en el presupuesto anual, fue precisamente en los dineros que se les asignan a los legisladores para que se luzcan con el dinero del pueblo. Cada uno de los 25 legisladores se llevó 8.2 millones de pesos por año, entre salario, mantenimiento de personal, presupuesto para dádivas, para estudios, por apoyos y demás. Por ejemplo, solo para “gestión social”, es decir, para dar poquito aquí, poquito por allá en ayudantías a la sociedad necesitada, a cada diputado le asignan 250 mil pesos al mes. Otros 250 mil pesos al mes por concepto de apoyo a Comisión, y dado que todos los diputados están en alguna comisión, todos lo reciben. También 44 mil pesos mensuales para que abran un módulo de atención en su distrito, y 66 mil pesos al mes para pagar los sueldos de su personal en módulo. Solo este presupuesto que poco se transparenta o se justifica fiscalmente, asciende a 610 mil pesos por mes por diputado, lo que por los 25, suman 15 millones 250 mil pesos por mes, lo que resulta en 183 millones de pesos al año. Considerando que entregar dinero no es una labor legislativa, pero suponiendo que hay bajacalifornianos que se benefician de esa dádiva, podría disminuirse el presupuesto de “gestión social” de los 250 mil, digamos a 150 mil pesos por mes, lo que al año traería un ahorro de 30 millones de pesos. En el caso de la ayuda a comisiones, también valuada en 250 mil pesos, podrían dejar en 100 mil, rebajarle 150 mil pesos al mes por diputado significa otro respiro de 45 millones de pesos al año, y los diputados todos, tendrían dinero mes con mes para actuar de dadivosos. ¿Dinero para módulo y persona? Actualmente cada uno recibe 110 mil pesos al mes para este concepto, rebajarlo a 60 mil pesos ahorraría a las arcas estatales 15 millones de pesos. O sea, si los diputados en un dejo de sensatez, honestidad, espíritu de servicio, solidaridad con los bajacalifornianos y responsabilidad con el manejo de los recursos, disminuyen en un 40 por ciento en promedio la ayuda que se dan aparte del salario, bajarían en 80 millones de pesos el presupuesto. Y ése, es un buen inicio si se suma a los 150 millones de pesos que propone el PRI disminuir, así, entre todos le ahorrarían al Estado 230 millones de pesos por año. ¿No es tan mala idea, no?  Ojalá que los diputados que en la Comisión de Administración analicen la disminución del presupuesto del Congreso del Estado para el ejercicio fiscal 2014, saquen buenas cuentas y acaben con los excesos heredados de la anterior administración legislativa. ¿Va?


Publicidad


Autor(a)

- Publicidad -spot_img

Puede interesarte

-Publicidad -

Notas recientes

-Publicidad -

Destacadas