¿Será que los diputados de la actual Legislatura se querrán tanto, que la mayoría de los integrantes compraron terrenos en la Ruta del Vino como buenos vecinos? En la edición pasada de ZETA se publicó que la diputada Claudia Agatón compró el terreno campirano. La transacción se hizo en noviembre de 2012, por la pequeña cantidad de un millón 947 mil pesos en efectivo. Pero no fue la única. Otros más listos, con prestanombres, adquirieron también por esa zona sus pedazos de tierra. A Max García, Liz Mata, Julio Felipe García y hasta uno que otro empleado, se les ve por los pasillos del Congreso, muy nerviosos por el tema del vecindario legislativo.
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