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sábado, abril 6, 2024
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La última caída del Perro Aguayo

Pese a que no se le inmovilizaron las cervicales al momento de atenderlo como indicaba el protocolo, y que no se atendió con mayor rapidez- el proceso duró seis minutos-, las lesiones recibidas por Pedro Aguayo Ramírez eran de pronóstico fatal, expusieron los médicos consultados. Francisco Acuña Campa, director del Servicio Médico Forense (SEMEFO) del Poder Judicial de Baja California, explicó a ZETA los detalles de la necropsia aplicada al luchador que refirió como causa de muerte, traumatismo de cuello con lesión cervical. “El cuerpo llegó en la madrugada del sábado como a las cuatro de la mañana. Se siguió el procedimiento regular y se encontraron fracturas en la primera, segunda y tercera vértebra cervicales con lesión en médula espinal. En el cuello hay siete vértebras y las primeras tres estaban fracturadas. Al revisar el cráneo también encontramos un poco de edema cerebral”, detalló. “Exactamente no sabemos cuál fue el golpe que terminó con la vida del luchador, pero tuvo que ser un impacto fuerte a nivel del cuello y la cabeza, y es un impacto anteroposterior  (desde el frente hasta la parte de atrás) con una reflexión de la cabeza hacia la parte posterior (latigazo hacia atrás). “El hecho de ir y venir de la cabeza (de manera constante) sobre el eje central de la columna cervical podría también generar una fractura, porque las vértebras cervicales no tienen ningún apoyo, mientras que las vértebras dorsales están fijas con las costillas y eso les da cierta seguridad y fuerza, por lo que se tornan más difíciles de que se puedan fracturar. El médico forense consideró que: “… pudo haber sido un grupo de golpes lo que a la postre haya generado la muerte de esta persona”. De igual manera, informó que en el examen toxicológico y de alcoholemia, Aguayo salió negativo. En cuanto a la posibilidad de negligencia por parte del doctor  a cargo y los organizadores del evento, el titular del SEMEFO en Baja California opinó: “No podemos hablar de negligencia, ya que las lesiones presentes fueron producto del trauma inherente de la lucha, en caso de que se hubiera tratado con una rapidez, el hecho de tener fracturas, de todos modos el pronóstico hubiera sido muy malo”. Continúan las investigaciones Gilberto Cota Alanís, subprocurador de Justicia en Tijuana, dio a conocer que ya se abrió una investigación por homicidio culposo dentro del expediente 541/15/20A/AP. “La cuestión es que se da al aviso de una persona fallecida, por lo que se hace la diligencia necesaria y tenemos que indagar y concluir con la investigación sobre si hay o no una responsabilidad, aunque aquí hay una cuestión que hay que destacar, que la Lucha Libre está reglamentada, por lo que hay que estar conscientes que este es un espectáculo deportivo y existen mayores posibilidades de hechos como este. Es por eso que las personas que estuvieron esa noche tienen que declarar. Hasta ahora ya han declarado el médico, la persona que venía con él (Aguayo), que aseguró ser su primo, el promotor y el comisionado”. — ¿Será citado a declarar  Óscar Gutiérrez, Rey Misterio Jr.? “La Policía está haciendo la investigación, por lo que todas las personas que tuvieron que ver serán citadas. Tanto Rey Misterio como Konnan y los otros dos luchadores tendrán que declarar en los próximos días”. De la atención recibida por el luchador fallecido, Cota Alanís agregó: “Lo que el médico legista nos dijo es que dada la gravedad de la lesión en la zona de las cervicales, era muy delicada y, por más y mejor atención que hubiese tenido, el resultado hubiese sido el mismo, ya que era una lesión mortal”. Consultado respecto al proceso judicial, el abogado Benigno Licea explicó que por ser un deporte de contacto y estar regulado por el Estado como actividad deportiva y espectáculo, no existen posibilidades de que haya detenidos por la muerte de Pedro Aguayo Jr. “No puede ser considerado como un acto delictuoso porque hay una ausencia de antijuricidad, el luchador no lo hace por causarle, ya que son parte de las reglas del deporte de contacto. Por otra parte, el Estado autoriza este tipo de deporte o espectáculo, ya que recibe un beneficio por dicha actividad mediante sus impuestos. “Técnicamente en la averiguación previa que está integrando el Ministerio Público se va investigar porque tienen la obligación, ya que hay una muerte. De esta manera se tiene que citar a todas las personas que intervinieron, médicos, promotores luchadores, pero solo es para que den su versión. Pero repito, no habrá la comisión de un delito, debido a que hay una causa de justificación”, finalizó Licea. En cuestión de minutos Se fue haciendo lo que tanto amaba y apasionaba desde los 15 años de edad. Pedro Aguayo Ramírez, mejor conocido como El Hijo del Perro Aguayo, perdió la batalla más dura de su vida, debido a un severo traumatismo cervical, ocasionado por una serie de golpes en su batalla ante Rey Misterio Jr. Más todos los acumulados en sus cientos de peleas. A pesar de todos los esfuerzos médicos que se hicieron la noche del 20 de marzo en el Auditorio Municipal “Fausto Gutiérrez Moreno” por salvarle la vida, la gravedad de la lesión no lo permitió y el destino ya estaba escrito. El luchador murió a los 35 años, la madrugada del sábado 21 de marzo. La función que organizó la empresa The Crash la noche del viernes 20 de marzo, era el escenario perfecto para el retorno de Rey Misterio Jr. a Tijuana, tras casi diez años de su partida a la empresa norteamericana WWE. Por ende, el Auditorio Municipal lucía atiborrado. La lucha estelar, un duelo entre Misterio y Xtreme Tiger ante el Hijo del Perro Aguayo y Manik. Desde las siete de la tarde era visible la larga fila para ingresar al inmueble, cientos de aficionados aguardaban que las puertas fueran abiertas para ingresar. Poco a poco el recinto de los luchadores fue poblándose con niños, jóvenes y adultos, hombres y mujeres por igual. A lo largo de la velada todo transcurrió como se esperaba, las cinco luchas previas al combate estelar cumplieron con el espectáculo. Incluso, antes de la lucha estelar se dio un gran duelo entre gladiadores locales y resultó mejor de lo esperado, donde Tony Casanova, Super Nova y Star Boy, tuvieron que ser atendidos por los paramédicos y llevados en ambulancia al hospital, a causa de diversas lesiones. Eran alrededor de las once de la noche cuando llegó el momento esperado por todos los aficionados. La lucha estelar estaría por comenzar. Rey Misterio Jr. saldría primero al ring, siendo recibido entre gritos y aplausos, mientras que el Hijo del Perro Aguayo fue el último en salir y lo hizo entre rechiflas de los presentes. Apenas un día antes, el “Perrito” había asegurado a ZETA que “le daría una paliza a Rey Misterio y dejaría en vergüenza en su propia casa y ante su gente”, al grado de no poder levantarse. Pero el destino le tenía preparada una mala jugada al hijo del “Can de Nochistlán”. A los cinco minutos de acción, Xtreme Tiger arroja a Aguayo hacia las cuerdas, éste da una marometa golpeándose las cervicales, luego se incorpora y es tomado por Rey Misterio Jr., quien le aplica unas tijeras que sacan del ring al “can”, pero al momento de abandonar el cuadrilátero, se golpea la nuca y parte del cuello sobre el ras de la lona, sin detenerse. El Perro se reincorpora y asciende al ring, visiblemente en malas condiciones, para ser recibido por Rey, quien le propina una patada voladora sobre la parte alta del hombro. Esto hace que Pedro Aguayo caiga ya inconsciente sobre la segunda cuerda, donde permaneció inmóvil por unos segundos. Mientras yacía, la lucha continuaba ante el asombro del propio Rey Misterio Jr., quien intentó dar una llave “619”, pero al observar las malas condiciones en que se encontraba su rival optó por no hacerlo, pasando los pies solamente por la cabeza sin hacer contacto. Al percatarse de esto, Konnan, quien acompañaba a Aguayo en la esquina,  trató de reanimar al gladiador, sacudiéndolo en dos ocasiones. Acto seguido, el comisionado de Lucha Libre, Mario Fuentes, se acerca al luchador y es cuando se decide llamar al médico encargado de la función, Ernesto Franco, quien se encontraba atendiendo a Súper Nova, lesionado durante la lucha anterior. Arribó un par de minutos después de que el rudo perdiera el conocimiento. Antes de esto, una persona de nombre Teresa Sánchez, quien se encontraba entre el público (se supo era doctora), saltó la valla para brindarle los primeros auxilios al luchador, lo mismo hizo otra persona que era bombero, en lo que llegaba el médico encargado. Una vez que Franco arriba al área, lo primero que hace es colocarle una cánula al luchador para de esa manera evitar que se ahogara. Al mismo tiempo, los paramédicos habían salido a llevar a dos luchadores que también terminaron con fuertes lesiones en la pelea anterior, como lo fueron Tony Casanova y Star Boy.  Es por esta razón que al momento del lamentable acontecimiento no hubo disponible una camilla para que el “Perrito” tuviera una atención inmediata como era necesaria. Por eso se optó utilizar un triplay de la lona como recurso para trasladar al gladiador hacia el pasillo del inmueble, ante el asombro del público que no daba crédito de lo que estaban viendo y creían que todo era parte del espectáculo. Una vez que se topan con los camilleros en el túnel del Auditorio, Pedro es removido del triplay a la camilla, pero ya visiblemente sin vida. Una ambulancia esperaba al luchador, quien en medio de gritos y confusiones fue subido al vehículo para ser trasladado al Hospital del Prado. Seis minutos transcurrieron entre el momento que Aguayo perdió el conocimiento y en lo que arribó al nosocomio privado que se ubica a escasos metros del escenario. Después de una hora y ante la presencia de varios luchadores como Konnan, el mismo Rey Misterio Jr., Damián 666 y Xtreme Tiger, entre otros directivos de la Lucha Libre, Pedro Aguayo Ramírez fue declarado muerto alrededor de la una de la mañana del sábado 21 de marzo. Se hizo hasta lo imposible por salvarlo Ernesto Franco, médico encargado de las funciones de Lucha Libre, fue seriamente atacado y cuestionado por su manera de actuar ante los hechos, incluso se le acusó de negligencia, pero se defendió argumentando que se hizo todo lo posible por el luchador, del cual nunca se separó hasta el fatal desenlace. “Desafortunadamente tuvimos un desenlace fatal con Pedro Aguayo, a raíz de una serie de golpes que tuvo en la región cervical, fue un traumatismo cervical. Se le hicieron todas las maniobras de resucitación por alrededor de una hora y no logramos reanimarlo, lamentablemente perdió la vida”, señaló el doctor. “Al momento en que llegamos al hospital intervinieron los médicos como el internista, traumatólogo, junto con su servidor, realizando algunas maniobras de resucitación por espacio de una hora”, complementó. Sobre los minutos que transcurrieron antes de que llegara a la escena, justificó: “Estaba atendiendo a otros luchadores que habían sido lesionados en la lucha anterior y esto me mantuvo ocupado cuando estaba la lucha, pero cuando arribé ya estaba siendo atendido por la doctora Sánchez, a partir de ahí nunca me separé de él hasta el momento que falleció. Siempre recibió la ayuda necesaria, si lo sacamos en el triplay fue meramente una cuestión práctica, lamentablemente no fue suficiente”, aseguró el doctor de la Comisión, quien ha ofrecido sus servicios por 13 años sin enfrentar antes ninguna situación tan grave como ésta. — El luchador había tenido ya una serie de lesiones en la espalda y cuello en su carrera. ¿Estos antecedentes pudieron afectarle y provocar su muerte? “La verdad no se puede saber con exactitud, ya que fue revisado como todos antes de la lucha, ya que no sube ninguno sin que haya sido checado por el médico que está a cargo. En este caso, Pedro estaba en perfectas condiciones, incluso traía una presión de 120-80, lucía fuerte y saludable. Les aplicamos el antidoping y salió negativo”. Por su parte, Juan Carlos Pelayo, presidente de la Comisión de Box, Lucha Libre y Artes Marciales Mixtas, indicó que la muerte de Aguayo fue totalmente accidental y se debió a un traumatismo cervical, por lo que no hubo negligencia. “Este es un deporte de contacto y, como tal, siempre tiene su riesgo y consecuencias como ésta, que son lamentables.  Nosotros como Comisión hicimos todo lo que estaba a nuestro alcance. Desde un principio se le brindó la ayuda necesaria, es cierto que debido a que en la lucha anterior habían resultado varios luchadores lesionados, el doctor no se encontraba en el cuadrilátero, pero contamos con el apoyo de la doctora Teresa Sánchez, quien estaba en las primeras filas y nos brindó los primeros auxilios. Lamentablemente fue accidente que podría haberle ocurrido a cualquiera”, manifestó Pelayo. “Es importante destacar que durante esta función se cumplieron todos los reglamentos necesarios para realizarse, tanto de Bomberos como Protección Civil, que exigen contar con dos ambulancias, cinco paramédicos y un doctor. Además, se tienen los contratos que hace el promotor con el inmueble”. — Después de este lamentable acontecimiento, ¿qué hará la Comisión para evitar que este tipo de tragedias se repitan? “Más que evitar, hay accidentes que son fatales, pero inevitables. Lo que tenemos que hacer es una legislación que regule dichas actividades y que de alguna manera dé certeza jurídica a estas mismas actividades, o sea, una ley a nivel nacional como la Ley Federal del Deporte, donde la Lucha Libre no aparece y el Boxeo. No es posible que no haya una ley que regule y deslinde las responsabilidades de todos los que participamos en esto, porque al final, obviamente tiene que haber alguien responsable. Si hubiera esa ley estaríamos deslíndanos al ser un accidente y todo quedaría en un hecho lamentable”, recalcó. El promotor de la función, Ignacio de la O, se mostró consternado por la situación vivida durante la trágica noche: “Estamos viviendo un momento lamentable en el que estamos involucrados no solo profesionalmente, sino en todos los aspectos, y nos duele la muerte de Perro Aguayo. Somos una empresa seria, siempre hemos cumplido con todas las expectativas y ustedes la gente son nuestros críticos. Nosotros cumplimos con todos los permisos, aquí no hay ningún culpable, fue un accidente muy lamentable y nos sentimos consternados. Además de que en todo momento estuvimos apoyando a la familia, ellos contaron con todas mis atenciones, respondimos con todos los gastos”. — ¿Cómo fue el momento en que se le dio la noticia a la familia? “Sus papás tomaron las cosas con calma, me imagino que las experiencias al vivir este tipo de cosas por la carrera de su señor padre estaba conscientes de lo riesgoso que es este deporte. Nuestra relación de trabajo fue increíble, teníamos mucha confianza entre nosotros, (El Hijo del Perro) siempre fue fiel a nuestra empresa, a nuestra marca, fuera del ring había una gran amistad entre nosotros”. “Fue consecuencia de tantos golpes”: médico especialista El certificado de defunción emitido por el Servicio Médico Forense (SEMEFO) aclara que el luchador Perro Aguayo Jr. murió por traumatismo de cuello con lesión cervical y medular. Pero esto fue consecuencia de la cantidad de golpes recibidos por mucho tiempo o alguna lesión no sanada, de acuerdo al doctor Jorge Avilés Valverde, especialista en medicina interna adscrito al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y a la Secretaría de Salud. En su opinión a ZETA, el galeno aclara que lo que observó a través de los distintos videos que circulan en internet, el desvanecimiento sobre las cuerdas del ring y posterior fallecimiento, derivó de una serie de circunstancias que se agravaron con la caída que sufrió fuera del ring, luego de que Rey Misterio Jr. intentó aplicarle unas tijeras. “Con ese golpe le viene un trauma severo que terminó siendo fatal, si bien las vértebras cervicales son fuertes y están protegidas por músculos muy fuertes,  en el caso de luchadores profesionales es difícil que por una sola lesión cause ese daño vertebral severo, por lo general ellos tienen masa muscular muy fuerte y toleran esos golpes del diario. Seguramente ya tenía lesiones previas, como pueden ser compresiones de la médula espinal, hernias de disco, compresiones de la raíces nerviosas o alguna fractura en las vértebras”, detalló Avilés. Reiteró que Aguayo perdió el estado de alerta al salir del ring, y si bien se levantó y volvió con puro instinto, “ya estaba en estado de coma”. “Pero no es resultado de un golpe, fue un trauma completo. Son todas las llaves, patadas, contusiones en cervicales, estar en la misma actividad tanto tiempo. Es común que los luchadores terminen sus carreras con los hombros, rodillas y cervicales destrozadas”, dijo el especialista. Sobre la intervención médica, el también catedrático de la Universidad Xochicalco señala que no se procedió como marca el Advance Trauma Life Support (Apoyo Vital Avanzado en Trauma). “En medicina tenemos ciertos scores que manejamos cuando el paciente tiene un accidente, el ATLS, certificado que se obtiene haciendo un curso dirigido a médicos y a TUMS (Técnicos en Urgencia Médica), se aplica cuando manejamos a algún tipo de paciente crítico en urgencia o en hospital. En el caso del luchador, lo inicial era inmovilizar las cervicales, corroborar que estuviera respirando y que tuviera actividad cardiaca, eso es lo más importante, y de esos pasos no se hizo ninguno. Sin embargo, no todo es responsabilidad de quienes atendieron al luchador, todo indica fue trauma completo”. — En el mejor escenario, ¿qué hubiera pasado de sobrevivir Aguayo? “Pues hay casos como la lesión incompleta que sufre John Cena a manos de Batista, en cervicales 3 y 4; Batista le hizo una desnucadora, pero nunca perdió las funciones cardiovasculares y respiratorias. Lo manejaron quirúrgicamente con jaula de titanio y hueso en polvo, pero cuando se da una lesión tan arriba, como en este caso en las cervicales 1 y 2, donde están los centros respiratorios del tallo cerebral, es catastrófica. En el caso hipotético de haber sobrevivido, tendría las secuelas de una cuadriplejia, sin movimiento en las cuatro extremidades, con apenas actividad cardíaca y ventilatoria”, finalizó Avilés Valverde. (ZETA/Rafael S. González Martínez) Despiden al “Hijo del Perro” Aguayo En un acto final en el que solo estuvieron presentes sus padres, familiares y amigos más cercanos, el luchador Pedro Aguayo Ramírez “El Hijo del Perro Aguayo” entregó su última gota de sudor en el Parque Funeral Colonias, en el municipio de Zapopan. Previo a la cremación, con una misa de cuerpo presente, aficionados a la Lucha Libre y decenas de periodistas pudieron apreciar el féretro del deportista. Fina caoba en su última morada y flores blancas en el atrio, adornaron la escenografía de su última presentación en público. Junto al féretro una cartulina en la que se leía: “Pedrito. Que Dios te reciba con los brazos abiertos como todo un luchador. Tú venciste mil batallas…”. El sacerdote Pablo, de la capilla del recinto funeral, también hizo épico el momento durante la homilía: “Él fue un héroe”. Luz Ramírez, la madre, también habló: “Me consuela saber que mi hijo murió haciendo lo que más amaba, luchar”. Así fue la despedida de Pedro junior, “El Hijo del Perro”, el lunes 23 de marzo. Con la presencia de Konnan, ex luchador y empresario de la AAA. También con la asistencia de Rey Misterio Jr., con quien sostuvo su última lucha en Tijuana la noche del viernes. Ambos personajes montaron guardia al frente del difunto. Al último adiós asistieron luchadores, unos con máscara y otros sin ella, por lo que los aficionados difícilmente pudieron identificarles. Entre los presentes estuvieron Rayo de Jalisco, El Satánico y Latin Lover. También acudieron empresarios y promotores de las diversas compañías de lucha libre. Cabizbajo, Rey Misterio Jr. evitó a los medios de comunicación, mientras la gente lo animaba. Desde el domingo 22, infinidad de personalidades desfilaron en la sala de velación. La mayoría amistades de la familia Aguayo Ramírez, quienes acudieron a darle un abrazo y condolencias al can mayor. Los políticos también se hicieron notar con coronas fúnebres y arreglos florales con su firma. Afuera de las capillas El Carmen, de Gayosso, en Guadalajara, decenas de reporteros deseaban tener la nota. De manera amable, la familia del “Perrito” solicitó respeto a su dolor y la señora Luz puso al doctor Mario García Orozco, médico de la familia desde hace más de 20 años, en manos de la prensa. A nombre propio y de la familia Aguayo, el galeno aseguró en una improvisada rueda de prensa que no se puede culpar a nadie de la muerte del luchador, a quien atendía como profesionista “y como algo más…”. De igual manera, el especialista en ortopedia exoneró a la empresa AAA de cualquier responsabilidad, puesto que cumplió con todos los requisitos acostumbrados para estos espectáculos. Tampoco estima que haya habido una tardía atención o negligencia médica hacia Aguayo. García Orozco desestimó el hecho de que al luchador lo hayan sacado en una tabla y no en una camilla, “no es mi punto decir si alguien tuvo o no la culpa, por una cosa muy sencilla: yo no estuve ahí. No tenemos las pruebas, más que lo que ustedes saben y lo que nosotros sabemos”. El médico con más de 18 años de laborar para la Comisión de Box y Lucha del Distrito Federal, y de atender a toreros y luchadores, explicó que la lesión que pudo haber ocasionado daños en la economía corporal del “Hijo del Perro” habría ocurrido al golpear la nuca sobre la lona. En el video que un aficionado subió a redes sociales con el nombre “Rey misterio vs hijo del perro Tijuana 2015”, el doctor señala que hay un momento en el minuto 6:09 de reproducción donde se aprecia que Pedro recibe una patada de Rey Misterio Jr. y cae de espaldas. En ese instante se ve a Aguayo girar todo el peso de su cuerpo sobre la cabeza. “Yo no tengo los documentos más que lo que dice el acta de defunción, que recibió un traumatismo a nivel de columna cervical, a nivel del cuello, específicamente, y que eso produjo reacción medular. Es lo único que sabemos. Eso se llevó a cabo por el Servicio Médico Forense. No puedo hablar por ellos, no tengo los documentos que ellos tienen”, puntualizó el médico. Luis Carlos Sáinz Martínez Defiende a su sobrino Luego del lamentable acontecimiento, Rey Misterio Junior fue acusado malamente por diversos medios y por algunos aficionados como el culpable de la muerte del Hijo del Perro Aguayo. Miguel Ángel López, mejor conocido como Rey Misterio, externó su pesar y enfatizó que el menos culpable es su sobrino, Óscar Gutiérrez: “Una noche bonita se transformó en una noche trágica. Es un hecho fortuito que se dio, un lamentable accidente, de los pocos que se han dado en la Lucha Libre; creo que en la historia de este deporte (en México) es el tercero que se da, primero el de Sangre India y Oro. “Creo que todos en su momento hicieron su papel, tanto servicio médico como la Comisión. Era algo que no pudo evitarse, ya que por lo que he sabido de otros compañeros, como el Hijo del Santo, Perro Aguayo ya traía lesiones en la espalda y decidió continuar con su carrera. Independiente de esto, es un hecho que quisiera ya no hablar ni recordar”. El original Rey Misterio confesó que su sobrino se encuentra triste por la muerte de Pedro Aguayo, al cual describió como un gran amigo fuera del ring. “Óscar (Gutiérrez) está mal, le dolió mucho lo que le paso a Pedrito, ya que la gente lo ha acusado y criticado, muchas mentiras han dicho de él y pienso que no se vale, porque fue un accidente. La familia está devastada y les duele lo que la gente dice de él. Solo espero que se recupere y no repercuta en todo los planes que tenía en su regreso a México”, recalcó. (ZETA/Marcos A. Angulo Álvarez)


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Autor(a)

Redacción Zeta
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Redacción de www.zetatijuana.com
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