La salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE), conocida como “Brexit”, se concretó después de varias sesiones de debate, que duraron una semana, en la Cámara de los Comunes del Parlamento británico, que votó hoy con 494 votos a favor y 122 en contra, una ley presentada por el gobierno británico sobre su autorización -de sólo 137 palabras-, y que ahora debe continuar su trámite en la Cámara de los Lores.
De acuerdo con el calendario previsto por la primer ministra Theresa May, los Lores podrían aprobar el Brexit antes del 7 de marzo, a tiempo para la cumbre europea de Malta a celebrarse el 9 de marzo, después de más de 8 meses desde el referéndum, cuando se podría activar el artículo 50 del Tratado de Lisboa, lo que daría inicio a las negociaciones con Bruselas.
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La Corte Suprema de Reino Unido dictaminó el mes pasado que el Ejecutivo de Londres requiere la aprobación parlamentaria para implementar la escisión del bloque comunitario, por lo que se estima que la estrategia de negociación con la UE esté aprobada y firmada por la reina Isabel II hacia el próximo 9 de marzo, para así cumplir con el plan de iniciar el proceso del Brexit antes del 31 de dicho mes.
Según el corresponsal del diario español El Mundo, la oposición laborista presionó a última hora, con el respaldo de decenas de diputados de todos los partidos, con una enmienda para reclamar a May que garantice de antemano los derechos a los tres millones de inmigrantes de la UE en suelo británico.
May lleva toda la semana recalcando que el futuro de los inmigrantes europeos y el de los expatriados británicos será “una de las prioridades de la negociación”. La mandataria garantizó sin embargo el miércoles que el asunto quedará resuelto “en cuestión de semanas”, pero no otorgó más detalles.
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