El delegado de la Secretaría de Bienestar en Tijuana, Gilberto Herrera Solórzano, refirió que entre los equipos de transición del mandatario estatal de Baja California, Jaime Bonilla Valdez, y la gobernadora electa, Marina del Pilar Ávila Olmeda, ha tenido lugar una relación “tersa, fluida” y “muy armónica”, con todo y las “diferencias” que haya podido haber entre ambos políticos una vez que se formalizaron los resultados de la elección del 6 de junio.