En medio de un clima adverso, la necesidad del contacto humano que provoque retos y emociones que alimenten el cine, y ante un futuro incierto frente al panorama digital que propone plataformas de streaming, el séptimo arte sobrevive a inminente acomodo evidenciado en el Festival Internacional de Cine de Guanajuato (GIFF), encuentro fílmico que festejó su primer cuarto de siglo de abonar al bienestar del cine nacional
Inmerso entre la industria de la piel, el calzado, la religiosidad futbolera, arquitectura barroca, cultivo de fresa, barrios, montañas verdes, tradiciones, culturas y en el corazón de un pueblo de película