La violencia infligida por la pareja se presenta en todos los entornos y grupos socioeconómicos, religiosos y culturales. Si bien las mujeres pueden ser violentas en sus relaciones con los hombres (a menudo en defensa propia, y a veces hay también violencia entre parejas del mismo sexo), los agresores más comunes en la violencia contra la mujer son compañeros, esposos o novios, o excompañeros íntimos de sexo masculino.