Rosa es una mujer que está a punto de cumplir 45 años. Es soltera, con una hija adulta, abuela de unos gemelitos a quienes suele ver por videollamada. Vive sola en su piso citadino, es costurera y no debería tener mayores problemas que los cotidianos. Excepto por su familia, que simplemente le ha pedido su vida a cambio.